El 3 y 4 de mayo del 2006, es una fecha que quedará en la memoria de los habitantes de San Salvador Atenco, estado de México, como unos de los días más tristes de su historia, sobre todo para las mujeres que se encontraban en el lugar: la vida de 47 de ellas quedó marcada por la violencia y al menos 26 sufrieron además abuso sexual.
Lo que inició como un acto de resistencia en solidaridad por el desalojo de ocho vendedores ambulantes del vecino pueblo de Texcoco, se convirtió en un enfrentamiento entre grupos policíacos (federales, estatales y municipales) y pobladores de esta localidad, hecho que trajo consigo un sin fin de violaciones a los derechos humanos de las personas involucradas.
Los acontecimientos violentos, dados a conocer por la mayoría de los medios de comunicación como el ?restablecimiento del Estado de Derecho??, dejaron al descubierto la agresión sexual hacia las mujeres por parte de los policías que participaron en el operativo, y el inicio de una lucha para castigar a los responsables.
A la batalla que iniciaron las 47 mujeres detenidas en el penal del Santiaguito, estado de México, se han sumado legisladoras, organizaciones de la sociedad civil nacionales y extranjeras, así como defensoras y defensores de los derechos humanos, por mencionar algunas instancias.
Las mujeres agredidas, entre quienes se encuentran 26 que fueron abusadas sexualmente incluyendo un grupo de extranjeras –dos españolas, una chilena y una alemana– buscan justicia y castigo para los responsables directos, para ello han llevado el caso ante organismos internacionales como el Comité para la eliminación de la discriminación contra la mujer (CEDAW) que se reunión en agosto pasado en Nueva York.
Dicho organismo, pidió al gobierno mexicano en septiembre le otorgue a la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Relacionados con Actos de Violencia contra las Mujeres en el País (FEVIM) la jurisdicción para procesar y castigar a los culpables de los hechos cometidos y proporcione asistencia económica, social y psicológica a las mujeres víctimas de Atenco.
Igualmente, en días pasados, integrantes de Aministía Internacional (AI) México, solicitaron a la FEVIM que atraiga los casos de las denuncias de abusos y violaciones sexuales a mujeres.
En mayo pasado, la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Patricia Espinosa Torres y la secretaria de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Marta Maurás, pidieron una investigación a fondo de las denuncias sobre las agresiones sexuales a las mujeres en Atenco.
Mientras que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) ha confirmado ya que fueron 26 los casos de agresión sexual contra las mujeres de San Salvador Atenco.
A su vez, la Comisión Civil Internacional de Observación por los Derechos Humanos (CCIODH) presentó la semana pasada en el Parlamento Europeo el informe preliminar que resultó de su visita al lugar de los hechos en mayo y junio. El informe destaca preocupación por el curso que se le dará al caso.
Hasta ahora y como resultado de los operativos del 3 y 4 de mayo aún permanecen detenidas siete mujeres en el Penal de Santiaguito, estado de México, entre las que se encuentra Magdalena García Durán, indígena mazahua representante de la Organización Indígena Desarrollo Integral, AC.