Representantes de comunidades laicas se solidarizaron esta mañana con el padre Jon Sobrino SJ, a quien la Congregación para la Doctrina de la Fe le ha expresado discrepancias con algunas de sus interpretaciones teológicas.
‘Agradecemos el aporte de la reflexión teológica del padre Jon, reconocemos su identificación con el testimonio de los mártires y nos solidarizamos con él, en este momento difícil’, manifestó Carlos Ayala Ramírez, director de la radio universitaria YSUCA.
Ayala Ramírez destaca que la notificación del Vaticano no establece ninguna sanción ni prohibición, pero señala que a veces este tipo de declaraciones se convierten en difamaciones.
‘Celebramos que no haya ninguna amonestación, porque eso habría sido una injusticia contra quien nosotros consideramos un teólogo de la misericordia y la justicia, pero nos preocupa que estas noticias se divulgan sin tomar en cuenta el impacto que pueden causar’, sostuvo.
Ayala Ramírez reiteró que quienes han sido formados por el padre Jon, hacen suyos los ideales, anhelos y sueños del sacerdote jesuita, perteneciente a la generación de Ignacio Ellacuría, Segundo Montes, Ignacio Martín Baró y los demás asesinados por el ejército gubernamental en 1989.
Los laicos, en su declaración pública, destacan que la notificación de la Santa Sede, se da entre dos aniversarios importantes para la vida y obra de Jon Sobrino: los 30 años del asesinato del padre Rutilio Grande y los 27 años del magnicidio de Monseñor Oscar Arnulfo Romero, el 12 y 24 de marzo, respectivamente.
La resolución del Vaticano objeta algunas de las interpretaciones de Sobrino, planteadas en sus obras cristológicas: ‘La Fe en Jesucristo. Ensayo desde las Víctimas’ y ‘Jesucristo Liberador. Lectura Histórico-teológica de Jesús de Nazaret’.
La Congregación para la Doctrina de la Fe considera que los planteamientos del sacerdote jesuita no coinciden con las interpretaciones de la doctrina católica, pero no aplica ninguna de las sanciones que habían sido anunciadas por algunas publicaciones periodísticas.
Cortina es reconocido en el mundo entero por sus valiosos aportes desde la Teología de la Liberación y su praxis desde la vivencia de las víctimas. Su trabajo académico y teológico lo realiza en la Universidad Centroamericana ‘José Simeón Cañas’ (UCA).