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Sobre la inmigración: carta abierta de cuatro graduados sociales -- Jesús Roiz Corcuera, Juan Manuel Núñez Contreras, Fernando Ruiz Ramos y José Antonio Estívariz Llanos

Publicado en

Asociación pro Derechos Humanos de Andalucía

Sevilla, 2 de Marzo de 2008
Respetado compañero: Ha llegado a nosotros el artículo publicado el 18/2/08, titulado “El paro de la inmigración es un problema de creciente magnitud” y que firmas como presidente de nuestro apreciado Colegio de Graduados Sociales de Cádiz. Conocemos tu afiliación política, que recientemente has sido senador por el PP y que eres Teniente de Alcalde del Ayuntamiento de Cádiz. Queremos decirte que hemos quedado sumamente sorprendidos al ver que firmas el artículo como presidente del Colegio y que utilizas la web para la publicación de un artículo que claramente refleja un matiz electoralista por inscribirse en la misma línea que Arias Cañete y Rajoy están manteniendo en la campaña electoral.

Pero además de sorprendidos estamos indignados. Estamos indignados por el hecho de que hayas utilizado la profesión de graduado social para respaldar unas manifestaciones personales, vertidas con una intencionalidad político-partidaria y radicalmente contrarias a la razón de ser de dicha profesión. No sólo has firmado el artículo como presidente, también lo has defendido diciendo que se trata de “un artículo puramente profesional”.

Mientras estamos escribiendo esta carta tenemos delante el logotipo de la profesión de graduado social. Tú sabes muy bien que dentro del logotipo dominan, una balanza en equilibrio y la leyenda “Justicia Social”. Pues bien, tus manifestaciones cargadas de xenofobia, te muestran totalmente desequilibrado al juzgar a las personas inmigrantes y proclamando la injusticia social. Ninguna sensibilidad muestras ante la persona inmigrante como sujeto de derechos y deberes, obligada a vivir en absoluta precariedad y, por contra, clara queda tu hipersensibilidad ante los perjuicios económicos que a la Administración le pueda proporcionar el creciente paro en la población inmigrante. Es más, en tu hipersensibilidad llegas a afirmaciones nada ajustadas a la realidad o a la verdad.

Con tu balanza de ponderar desequilibrios pesas a los inmigrantes para distinguir entre buenos y malos. Inmigrante bueno es el que con una cualificación adecuada, trabaja, crea riqueza económica, paga impuestos y cuotas a la Seguridad Social, no aporta cargas sociales y no recibe prestaciones ni subsidios. Ese es el inmigrante que interesa, no persona sujeto de valores sino mano de obra barata y cuanto más barata mejor, de usar y tirar, de tolerancia forzosa mientras no pueda ser sustituido por una máquina.
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Vemos que, como tu compañero de partido Arias Cañete, te quejas de la falta de cualificación profesional en los trabajadores inmigrantes. Ya está bien de difamar. Tu sabes que hay muchos trabajadores inmigrantes que no pueden ocupar puestos de trabajo o ejercer profesiones teniendo titulación y preparación porque les es vetado por una normativa discriminatoria de la que tu partido político también es responsable. Su frustración personal nada te importa. Esto hace que en las actividades a que pueden acudir los inmigrantes la media de cualificación de éstos supere la media que aportan los trabajadores autóctonos. Como estás en plan de eliminar gastos sociales, no contemplas la formación profesional de los trabajadores inmigrantes no cualificados, ni como inversión para la obtención de riqueza económica. Se ve que tus deseos se dirigen a una inmigración selectiva, es decir, la que consiste en acudir a los países empobrecidos y extraer de ellos, además de las materias primas, lo que gente de tu partido llama “capital humano cualificado” aunque con ello se ahonde el empobrecimiento.

José Blas, nos causas escalofríos cuando como colofón de una serie de imputaciones a los inmigrantes de mermar nuestra riqueza nacional, textualmente dices: “En resumen, una dura factura que viene a dar un duro golpe a la economía de este país y desconocemos todavía el efecto multiplicador de una inmigración sin trabajo y las consecuencias tan graves que ello conlleva. Tiempo al tiempo.” Esto no se debe decir, no solo porque suscita xenofobia y lleva al enfrentamiento social contra la población inmigrante, sino porque el itinerario que te ha traído hasta aquí está empedrado de falsedades y apreciaciones injustas. Vamos a hacer un repaso:

– Nos dices que los inmigrantes ya no son rentables, porque cuestan más de lo que pagan y “las arcas del Estado están pagando una dura factura”. Te podemos demostrar que la aportación de la población inmigrante en 2007 a la Seguridad Social fue en torno a 900 millones de euros, equivalentes a las pensiones que cobran 900.000 personas en España. Por otra parte en 2007, la diferencia entre lo que aportaron los inmigrantes y lo que recibieron es de 5.000 millones de euros. Otro dato: en el período 2000 – 2005 la inmigración ha incrementado la renta de cada español en 623 euros.

– Te duele que los inmigrantes cobren prestaciones que tienen carácter contributivo. No comprendemos tu queja discriminatoria, ni la exageración de que las prestaciones por desempleo abonadas a los inmigrantes “están poniendo contra la cuerdas a la economía española”. Suponemos que cuando acudes al Juzgado de lo Social pidiendo Justicia lo harás exigiendo que al menos se reconozcan los derechos atribuidos al trabajador por la Ley General de la Seguridad Social. ¿Por qué lamentas un trato igualitario a todos los trabajadores?
– Te duele que los inmigrantes cobren subsidios. Tú sabes que muchos de los subsidios son migajas que han quedado tras el recorte de prestaciones contributivas y que, en todo caso, son conquistas de los trabajadores.

El colmo llega con la alusión al cheque bebé. Te recordaremos tu frase y nos ahorramos comentarios:”estamos pagando…un cheque bebé que al tener esta inmigración un alto porcentaje de natalidad, también está haciendo”su agosto””.
– Te duele, no que los trabajadores inmigrantes se queden sin cobrar de las empresas salarios o indemnizaciones que han devengado, sino que acudan al Fondo de Garantía Salarial a cobrar parte (ya que el Fondo, tu sabes que no da la totalidad) de lo que les reconoció en su día el Juzgado de lo Social, cuando la empresa a que prestaron sus servicios, juzgada y condenada, es declarada insolvente.

– Hablas de la crisis de la construcción y de la crisis económica en general como causa u origen de un cúmulo de problemas para las empresas y para las “arcas del Estado”. Olvidas intencionadamente que los inmigrantes son víctimas de unas crisis que no han ocasionado y que los causantes son agentes sociales muy relacionados con el partido a que representas y favoreces con tu artículo en esta campaña electoral. Sin embargo llama la atención tu insensibilidad ante la persona trabajadora inmigrante y su unidad familiar. No parecen importarte las causas de la crisis ni quienes puedan ser los causantes.

Tampoco parecen importare las condiciones de trabajo, ni el incumplimiento de la legislación laboral por parte de los empresarios. Tú sabes que muchos empresarios, valiéndose de la precariedad reinante, están ocasionando que trabajadores inmigrantes no cobren o estén cobrando prestaciones por debajo de lo que legalmente debería corresponderles por haber incumplido sus obligaciones de alta y cotización a la Seguridad Social.

– Vuelves a resucitar el efecto llamada con que el PP hace tiempo castigó nuestra paciencia. Pues sí, existe un efecto llamada y un efecto salida. El efecto llamada no es ninguna “apertura de puertas” a la inmigración, como tú dices. El efecto llamada es la fuerte atracción que ejerce la España y la Europa enriquecidas sobre las poblaciones de los países empobrecidos. El efecto salida son el conjunto de las circunstancias que fuerzan la emigración como medio de salvar las distancias crecientes entre países enriquecidos y países empobrecidos. Te invitamos a analizar causas y causantes de la emigración forzosa, a lo mejor descubrimos que la deuda la tienen los países enriquecidos con los empobrecidos y que las políticas migratorias en Europa han de fundarse en razones de justicia reparadora. A lo mejor por esta pista encuentras el sentido y el ejercicio de nuestro lema “Justicia Social”, tan maltratado en tu artículo.

Para terminar te pedimos que hagas justicia al sector más débil de nuestra sociedad, a la población inmigrante, rectificando públicamente las manifestaciones vertidas en tu artículo. La xenofobia de los dirigentes de la sociedad engendra xenofobia en las bases de la sociedad. Si se contribuye a ella, no se hable de “contrato de integración” ni de INTEGRACION.

También te pedimos que des las instrucciones pertinentes para que esta carta sea colgada en la web de tu Colegio, en el mismo espacio donde se encuentra el artículo que, lamentándolo profundamente como compañeros, nos vemos obligados a impugnar.

Tus compañeros: Jesús Roiz Corcuera, Juan Manuel Núñez Contreras, Fernando Ruiz Ramos y José Antonio Estívariz Llanos

Puede consultar el artículo en http://www.eleconomista.es/blogs/la-telarana/?p=1306

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