Su manifiesto ha dado que hablar. Ya son varios medios de comunicación los que se han hecho eco de los pensamientos de un grupo de jóvenes católicos de Mairena del Aljarafe que exigen una Iglesia «más democrática» y critican su «involución». Por tal motivo, han convocado para el próximo sábado una manifestación a las 12:00 delante del Palacio arzobispal, en la ciudad hispalense, a la que se prevé que acudan unas 500 personas.
El grupo convocante se denomina Pastoral Juvenil de la Parroquia Espíritu Santo, en la citada localidad. Buena parte de sus integrantes se han encargado de desarrollar dicha labor en la feligresía durante 20 años, pero según informaron varios componentes ayer a este periódico, la llegada del nuevo párroco, Antonio Vergara (delegado episcopal para asuntos jurídicos de las hermandades), les privó de seguir ofreciendo este servicio.
En el manifiesto enviado ayer declaran su desacuerdo con «el desfase y la incapacidad de dar respuestas sólidas y reales de la Iglesia», a cuya jerarquía acusan de «utilizar» a Cáritas para «justificar su falta de pronunciamientos directos ante necesidades sociales». También critican la «falta de diálogo interreligioso por parte de la institución eclesiástica», así como «no dejar trabajar y expresarse libremente a teólogos, sacerdotes y catequistas».
De igual modo, muestran su disconformidad con «la supresión del papel del laicado impulsado por el Concilio Vaticano II, el celibato obligatorio frente a la libre opción, el no reconocimiento de categoría familiar a dos personas con un proyecto de vida en común, la represión sexual como doctina, el protagonismo implacable del sacerdote en las eucaristías y la dedicación plena del sacerdote a ser gobernador y cuidador del templo, lo que provoca su incapacidad evangelizadora».