Queridos hermanos y amigos
Estamos nuevamente llegando a las fiestas de Navidad y al comienzo de un Nuevo Año.
¡Cuánto dolor, cuántas muertes¡ ¡qué mundo convulsionado nos está tocando vivir¡
Pero al mismo tiempo; cuánta solidaridad, cuánto clamor en el Planeta por la Paz, por un mundo de Justicia??
¡Cuánta gente lucha por salvar al hombre mientras tantos otros luchan por el poder y por destruirlo. !
¿Qué nos deparará este Año Nuevo que lo recibimos con tantas Esperanzas…?
¿Qué nos pasa que siendo tantos los que ansiamos un Mundo Nuevo parecemos tan débiles ante la locura del mal?
De todos modos mucho hemos avanzado en estos años:
Una América Latina Unida en la Unasur
Muchos países de la Región luchando junto a sus Pueblos para acercarnos a una realidad de Justicia y Paz por la que todos soñamos.
Y nosotros en nuestra Patria debemos mantener firme La ESPERANZA Y LA PAZ INTERNA en este año difícil de elecciones
Jerónimo ya participa del Misterio y siendo yo tan una con él vivo esta nueva realidad como viviendo en dos mundos, aquel que aún no se me devela y este caminar en la Tierra sin él a mi lado y hoy junto a Néstor y a tantos que lucharon para tratar de cambiar este Planeta Tierra
Sé que ésta será una pequeña carta tomándome el tiempo de estar cerca de tantos que físicamente están lejos pero siempre en mi corazón.
Quiero entregarles un regalo y es decirles que he encontrado para el año que viene la forma de hacer llegar a todos la vida de Jerónimo escrita por él mismo y documentada, así él llegará directamente a ustedes con sus propias palabras.
Su figura desde que partió y yo sumergida en sus escritos, cada día se agranda más, yo no debo ni puedo llorar o estar triste, se me dio vivir junto a él una vida tan rica que realmente ha sido un Don que no acaba de azorarme.
Bueno no quiero hablarles de mí, sino de lo que siento en estas fechas y llegar con tiempo a ustedes.
No hay Revolución sin revolucionarios,
no hay Mundo Nuevo sin Hombres Nuevos.
Festejamos la Encarnación de ese Hombre que se llama Jesús
y que cada día nace y crece en nosotros,
todos los hombres de buena voluntad,
hasta hacer eclosionar en el mundo la Justicia y la Paz por la que gime la humanidad.
Unámonos,
somos muchos, los más, y no somos débiles,
Su Luz y su fuerza nos sostiene y nos da coraje,
todo lo demás se nos dará por añadidura.
Esto es lo que ansío para estas fiestas.
Un abrazo junto con Jerónimo
CLELIA