Cristianismo y Justicia
Sólo silencio. Nada que hacer. ?nicamente esperar. Una cura de ausencia, como si de pronto las cosas perdieran su voz y toda vibración quedara detenida. No hay en este día textos sagrados, ni lugares, ni mediadores, ni ofrendas. El altar del mundo ha quedado vacío. Sólo los rostros permanecen en su desnudez si nos aproximamos Ver noticia original en …