El pasado 20 de Abril se emitió a las 22.20h. en el canal cuatro, un reportaje del programa Callejeros titulado “San Francisco: el barrio Bilbaíno donde circula la droga”. La intención de este escrito es manifestar nuestro descontento e indignación sobre el trato y la imagen que se dio del barrio.
El propósito del programa según figura en su página Web es el siguiente:
Para callejeros no hay fronteras. Y su curiosidad no tiene límites
Esta presentación que hacen de sí mismos deja clara la flexibilidad del programa. Sin embargo esta flexibilidad en la praxis y tal como pudimos ver en el reportaje, roza la falta de objetividad, la irresponsabilidad, el sensacionalismo y lo más importante, la falta de respeto y de ética a la hora de tratar ciertos temas como son la prostitución y la drogadicción..
No se tuvieron en cuenta todos estos aspectos, lo cual ha provocado el descontento de muchas personas que viven, trabajan y en definitiva, forman parte del barrio.
Se dio una visión parcial y negativa del barrio desde un punto de vista morboso, alarmista y sensacionalista. San Francisco no es solo droga y prostitución, esto no es lo más relevante, ni los policías se pasan el día corriendo por la calle deteniendo a personas con diamantes… Los temas no fueron tratados con la debida sensibilidad y respeto hacia las personas. Se provocaron situaciones que invadieron la intimidad de muchas personas no sólo con las cámaras, sino también con el estilo de preguntas como “¿no te da vergüenza…?” Fueron preguntas que enjuiciaban sobre lo correcto y lo incorrecto; preguntas que abrieron “heridas” muy dolorosas, que lejos de tratar a las personas y las diversas situaciones con delicadeza fueron utilizadas en el reportaje para reflejar una realidad forzada, como si eso fuera lo “habitual” del barrio. San Francisco no es eso. ¿Acaso no interesa dar a conocer el esfuerzo de muchas personas, durante años, por sacar sus negocios adelante? ¿Por qué no se refleja el esfuerzo de gran número de inmigrantes por aprender Castellano y Euskara, formarse y aprender diferentes oficios y participar en procesos de integración de la mano de diversas asociaciones? ¿Por qué se remarcan los aspectos más negativos respecto de la prostitución y la drogadicción? ¿Acaso no conocen el trabajo y los cambios a positivo habidos en los últimos años, o es que esto no vende programa? Parece ser que para Callejeros sólo importa mostrar lo negativo, sin considerar la repercusión que pueda tener para la vida del barrio y quienes aquí vivimos. Sin embargo, los “reporteros” se acercaron a los recursos del barrio vendiendo el reportaje desde un enfoque positivo y con el objetivo de visualizar las iniciativas que han propiciado mejoras en el barrio. Desde el barrio de San Francisco nos preguntamos dónde está este contenido que “supuestamente” era el objetivo. Nos sentimos engañados y utilizados.
Tampoco se tuvo en cuenta la libertad de las personas y el derecho a no querer salir en la televisión, en este programa se grabaron detenciones y se violó la presunción de inocencia aún cuando el detenido expresaba su no consentimiento. ¿Qué ética profesional es ésta?, ¿Dónde queda el respeto básico que se merece toda persona?
Se emitieron juicios de valor, afirmaciones rotundas como “Ah, entonces tú eres su chulo…”; “Se te ha salido la mandíbula por consumir coca…”. ¿Esto es información?, ¿Qué aporta al espectador?… ¿ESTO ES PERIODISMO?
Finalmente hemos de denunciar, así mismo, que la visión dada del barrio ha excluido al movimiento ciudadano que existe desde hace décadas en el barrio. Un movimiento ciudadano plural, formado por decenas de organizaciones sociales y vecinales que trabajan en la denuncia del abandono y la exclusión que sufre la población y el entorno urbano en el que habitamos, pero que también desarrolla un sin fin de iniciativas que hacen del barrio un espacio más digno, habitable e integrador. Iniciativas que rescatan también todo lo positivo, que es mucho más que la imagen dada por Callejeros, que existe en nuestro barrio.
Esperamos de CUATRO una respuesta que contraste su visión y nuestra crítica a su programa.
Adjuntamos también las actividades que desde la Coordinadora de Grupos de Bilbao la Vieja, San Francisco y Zabala estamos realizando para posibilitar vida, ilusión y dignidad a nuestra realidad.
Atentamente los grupos abajo firmantes:
Coordinadora de Grupos de Bilbao La Vieja, San Francisco y Zabala
Aldauri fundazioa
Asociación vecinal de San Francisco
Comunidad de Itaka-Escolapios en San Francisco
Izangai elkartea
SOS Racismo
Parroquia Corazón de María
Parroquia San Rafael
Etorkizuna zabalik aisialdi taldea
Caritas Diocesana de Bilbao
Asociación de vecinos de Zabala
Esku zabalak – Adsis
Comisión AntiSIDA de Bizkaia
Modulo psicosocial Auzolan
Artísimas colectivo de artistas feministas
Posada de los abrazos
Askabide
Federación Sartu
La Salle Iturburu elkartea
Sarea – Red solidaria de San Francisco
Galtzagorri grupo de mujeres
EAPN Euskadi – Red Europea de lucha contra la pobreza y la exclusión social
Hermanas Pasionista en Bilbao
Bizkaiko Askagintza
Asociación Susterra
Asociación Bitarte
Asociación Itxarobide
Asociación T4
Oblatas – Leiho Zabalik
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Oficina Municipal del Plan Especial de Rehabilitación de Bilbao La Vieja, San Francisco y Zabala 2005-2009
Estimado Patxi:
Cuenta con la adhesión de la Oficina Municipal del Plan Especial de Rehabilitación de Bilbao La Vieja, San Francisco y Zabala 2005-2009 y la mía personal al escrito que se adjunta. No es facil comentar lo que sentí cuando ví el programa en cuestión salvo quizá la impotencia que existe ante la mayor parte de la actuación de los medios de comunicación en el barrio y lo facil que es ignorar el trabajo de mucha gente para que las cosas cambien.
Recibe un cordial saludo,
JAVIER ROJO
Gestor del Plan Especial de Rehabilitación de Bilbao La Vieja, San Francisco y Zabala 2005-2009
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De mi consideración:
Vivo en el barrio San Francisco desde hace casi veinticinco años y mediante este mensaje deseo adherirme a la protesta por el programa Callejeros sobre nuestro barrio.
Los valores de la tolerancia, la ciudadanía y la solidaridad se construyen cada día, especialmente en barrios como San Francisco, escenario de un esfuerzo social, ciudadano y político que el reportaje en cuestión contribuyó a invisibilizar, en mi opinión.
Les sugiero que, utilizando la enorme influencia beneficiosa que su medio de comunicación puede tener, vuelvan a acercarse a nuestra realidad con una nueva mirada que, sin ocultar lo que nuestro barrio tiene de marginalidad y conflicto, permita ver los procesos de cambio y desarrollo y, por encima de todo, reconozca y resalte la dignidad humana de todas las personas.
Reciban un cordial saludo.
Fernando Fantova
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Estimad@s responsables de CUATRO:
Supongo que han visto el programa “San Francisco: el barrio bilbaíno donde circula la droga” emitido por su cadena el viernes 20 de abril. Y si no conocen esta parte de Bilbao a buen seguro que se les han quitado las ganas de visitarla cuando pasen por aquí. A no ser, claro, de que necesiten abastecerse de drogas ilegales o establecer relaciones sexuales mediante pago.
Ahora bien, como vivo en este barrio desde hace 17 años, me atrevo a desaconsejarles cualquiera de esos dos motivos para acercarse a San Francisco.
Las drogas ilegales (y las legales también) se encuentran mucho más fácilmente en otras partes de Bilbao, entre ellas en las más acomodadas, lo que no es nada original de esta villa, como es bien sabido. Salvo la heroina, seguramente, aunque tampoco es exclusiva de este barrio. Y si les aprieta la necesidad y no tienen escrúpulos en participar en el mercado (de alquiler, pero mercado) de carne humana, sepan que aquí sólo van a encontrar el estrato más bajo de la prostitución bilbaína, en acusado declive desde hace años precisamente porque la clientela con algún posible rehuye su cutredad. Como tampoco en esto Bilbao es nada original, supongo que si no lo sabían se imaginaban que la prostitución de clase media baja en adelante, por describirla de alguna manera, se concentra en otras zonas, nuevamente sin hacer ascos a las más acomodadas.
Así que, por favor, no contribuyan a estigmatizar un barrio asignándole monopolios que no posee, y que si alguna vez los tuvo fue hace más de treinta años. Ahora le quedan restos marginales de aquello y una parte, sin exclusividad, de la nueva marginalidad desarrollada entorno a la carencia de papeles que aboca a la economía sumergida. Eso que tanto se han empeñado en resaltar, hasta el punto de que es de lo único que trata el reportaje. Pero resulta que junto a ello hay otras muchas cosas, unas positivas y otras no tanto (gentrificación, por ejemplo), como en cualquier lugar. Por eso, les sugiero que, empezando por el título (más ajustado hubiera hablar del barrio bilbaíno donde sobrevive parte de la marginalidad, o algo así) rehagan el reportaje, acercándose a esos otros aspectos, que estoy convencido que también conocían quienes perpetraron el programa, pero optaron por ocultarlos. Y si no, vengan de visita y conozcan la otra realidad del barrio, la otras realidades, entre las que hay fiestas como Arroces del Mundo (este año el 16 de junio, creo), y conviven comercios tradicionales y nuevos, gentes de toda la vida y recién lllegadas, etc.
Esperando que ese programa de Callejeros sea una excepción, y no la norma que deslice a su cadena del rojo que la publicita al intenso amarillo de la noche del 20 de abril, reciban un cordial pero enfadado saludo,
Patxi ZABALO
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En defensa de la dignidad de todas las personas me gustaría que atendieran el comunicado adjunto.
Gracias por su atención.
Pedro Alonso
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Confío en el criterio de los autores de la carta y por tanto adhiero a su comentario.
Atentamente,
Greta Frankenfeld
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Amigas y amigos de CUATRO
Como vecino del barrio de San Francisco de Bilbao y miembro de diversos colectivos vecinales y sociales de nuestro barrio, quiero mostrar mi más absoluta indignación por el programa emitido por su cadena de Callejeros titulado «San Francisco: el barrio bilbaíno donde circula la droga».
Más allá de lo criticable que es ese tipo de periodismo, no saben el
daño que hacen a la población que habita en nuestro barrio y,
particularmente, a quienes llevamos años trabajando en su rehabilitación.
Esperamos una rectificación o, al menos, que su medio se haga eco de
otras iniciativas que se desarrollan en nuestro barrio y que
«casualmente» nunca son noticiables.
Adjunto el manifiesto firmado por la mayoría de grupos vecinales y
sociales de la zona.
Atentamente
Carlos Askunze Elizaga
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Vaya desde estas líneas mi más enérgica protesta fruto del enfado que me ha producido el enfoque que ustedes han dado sobre la realidad de nuestros barrios. Solicito que hagan constar públicamente la protesta que un importante número de personas y grupos estamos realizando.
Atentamente
Patxi Manrique
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Resulta lamentable que haya quien hace negocio de las miserias humanas de la gente que menos posibilidades tiene. Seguramente tú o tus compañeros y compañeras también tendréis miserias que podrían ser noticiosas, y me dolería que alguien las sacara a la luz pública.
No tengo televisión y no he visto más programas vuestros que el de San Francisco, pero fijo que si os dedicáis a las situaciones sociales denunciables habréis sacado en más de un programa la corruptela de los grandes movimientos de dinero de las constructuras, la venta de armas a países en desarrollo, los maltratos y torturas en las cárceles desde las instancias oficiales, la circulación de droga en las cárceles administrada por los funcionarios, etc.
Dani Gutierrez
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Con este mensaje quiero mostrar mi malestar por su programa sobre el
barrio de San Francisco de Bilbao. Soy una persona que tiene su
negocio y trabaja en este barrio y creo que con este tipo de
programas sólo se consigue poner ne len la ruedas del proceso de
regeneración y convivencia del barrio ne l que estamos implicados
muchos organismos y personas.
Jota
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Estimado Patxi y … (misma respuesta para todas las quejas)
Muchas gracias por ponerse en contacto con nosotros. Suponemos que su mensaje hace referencia al programa “San Francisco” (ninguno de nuestros programas tiene el título al que usted hace referencia)
Le agradecemos sinceramente su opinión. Nos ayuda a reflexionar e intentar mejorar en nuestro trabajo. Obviamente no hemos tratado de ofender a nadie. Indiscutiblemente en el barrio hay otras realidades mucho más positivas que la mayoría de las que enseñamos. Pero éste equipo tiene la obligación de enseñar situaciones sociales denunciables. Las que son noticia. Le aseguro que intentamos hacerlo con todo el respeto del mundo, pero aun así seguro que muchas veces nos equivocamos. Le reitero nuestro agradecimiento por su mensaje
Un saludo afectuoso de todo el equipo de Callejeros
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Estimado Patxi:
Soy Carlos García, coordinador de Medicos del Mundo Bilbao. Te escribo porque en los días pasados por problemas de comunicación internos no circulo la información de esta iniciativa en contra del programa callejeros y al final no firmamos este documento, que tan gustosamente hubiéramos apoyado.
Vamos a distribuir el mensaje entre nuestros socios/as, colaboradores/as y contactos y dirigirnos a Cuatro como señaláis en el mensaje.
morbo sin piedad
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Xabi larrañaga – deia
Varios grupos que trabajan por Bilbao La Vieja se han dirigido al programa televisivo Callejeros para mostrarle su enfado. Y es que hace un mes emitió un reportaje acerca de San Francisco en el que sólo olvidó citar las siete plagas faraónicas. Imperó un morbo muy bajuno, pero lo peor no fue eso, moneda común en el periodismo, sino lo otro: una falta absoluta de piedad, compasión, empatía, una ausencia dolorosa de justicia, una visión inquisidora que no se corresponde con la obligación del reportero. Más que filmar la desgracia ajena se dedicó a dictar sentencia. Se habría extralimitado dejando el micrófono para ayudar a los cocainómanos, pero se salió del redil ético y profesional haciendo lo contrario: abroncándolos por estar como están. La exposición de la marginalidad puede ayudar a sacudir corazones, y a veces conviene que las cámaras sensacionalistas se cuelen donde no lo hace la gente llamadas de orden. Cierto grado de amarillismo es un cepo para que el ignorante abandone su irresponsable ignorancia y colabore en la rehabilitación del prójimo. Lo que no cabe es presentar a una prostituta yonki, embarazada e hija de prostituta, y reñirla en público. Como si ella eligiera su vida en el Hola y su curro en Infojobs. Viendo Callejeros recordé a una puta alcohólica de 1499, vecina de Balmaseda: «Amancebada de clérigo, por sus malos tratos y malos recados dejó perder a sus hijos y hacienda, y es mucho borracha, en tanto grado que tiene la cara y narices y rostro muy embermejido del mucho beber, y es mujer de mala suerte, miserable, rencillosa, maledicente y alcahueta porque le den algo que beba, y es tanto dada al vino que con la pobreza que tiene por taza de vino diría al contrario de la verdad y es ladrona». Ni puta gracia, vamos, ni entonces ni ahora. Porque el malditismo sólo mola en cuerpo ajeno y en Bukowski. Y en la tele, claro.