Enviado a la página web de Redes Cristianas
Estimado/a amigo/a:
Hemos venido compartiendo mensajes de Adviento, preparando el camino simbólicamente, como cada año.
Es hora ya de anunciar que, con este Nacimiento que rememoramos y revivimos cada año, celebramos que Dios se haya encarnado en nuestra historia personal y en la Historia humana.
El niño que se nos ha dado, Emmanuel, nos recuerda que cualquiera de nosotros puede nacer de nuevo (como Nicodemo) a pesar de nuestras carencias, de nuestras miserias, de nuestros miedos, de nuestras traiciones …
No se trata de “hacer nada”. Sólo dejar que el Amor nos vaya transformando, a través del rostro del hermano, de la hermana, en particular de los que más sufren, acogiendolos, con entrañas de la Misericordia que en nosotros se ha prodigado.
Deseamos que en este 2014, Él siga renovando también, a través de la acción de su Espíritu en cada uno de nosotros, el rostro de nuestras Iglesias locales y comunidades, para que ellas puedan ser testimonio y luz y cumplir con la Misión con la que han sido enviadas, progresando en el camino de la Unidad en Cristo.
Es lo que queremos compartir hoy con cada uno y cada una que os sentis parte de la red Proconcil, sosteniendo y alentando -allí donde estais- este modesto pero continuo proceso conciliar.
Os pedimos en esta Navidad una oración por quienes hemos asumido una responsabilidad particular en el proceso, por mi como coordinadora y por todo el equipo asesor en la diáspora, para que seamos fieles a nuestra particular Misión y la realicemos con Gozo y Esperanza en cualquier situación.
¡¡¡FELIZ NAVIDAD Y AÑO NUEVO 2014!!!
Un saludo fraterno
Emilia Robles
proconcil@proconcil.org