(Traducido para Rebelión y Tlaxcala por Bárbara Maseda y revisado por Manuel Talens.)
Todavía estoy aquí en Palestina y me siento afortunado porque no podría imaginar estar en cualquier otra parte en estos momentos cruciales. Espero que comprendan la demora en escribir, dadas las circunstancias. Desde la última vez que escribí hace casi 10 días, nos hemos reunido y hemos hablado con cientos de personas y hemos realizados varios talleres y conferencias sobre el desarrollo del ataque colonialista (además de visitas a la devastación en marcha y a la destrucción de tierras y hogares).
Ha sido muy, muy trabajoso; y muy, muy arduo, tanto emocional como físicamente. Sin embargo, hemos visto y a diario vemos muchas, muchas señales esperanzadoras y seguimos ?esforzándonos por tener una feliz participación en los pesares de este mundo» (mi proverbio budista favorito).
Tina, la mujer palestino-usamericana [1] golpeada esta semana junto a su hijo de 17 años por un soldado israelí en la frontera nos contó su impactante historia [2,3].
Mientras escuchábamos el relato de Tina en Beit Sahour, venían a mi mente otras imágenes:
– El arma de fabricación usamericana que fue utilizada por un francotirador israelí para dispararle en su casa a Musa (Moisés), de 19 años, sobrino de mi amigo y experto en derecho internacional, el Dr. Abueid. Los Abueid son una familia cristiana muy respetada con un hijo, cuyo único crimen era ser un palestino en la tierra de sus antepasados, codiciada por aquellos que no han aprendido nada de la historia. El hijo menor, Issa (Jesús), escapó. Qué ironía para un soldado judío matar a Moisés y dejar escapar a Jesús. Sin embargo, el padre dijo modestamente que la mujer a quien dispararon en la cabeza esa misma noche en ese mismo vecindario había sufrido una tragedia mayor: sus parientes encontraron a su bebé de 7 meses lamiendo las gotas de sangre que manaban del cadáver de su madre.
– El montón de tarjetas verdes de identificación palestinas metidas en el chaleco (cuyo color era el de una sustancia inmencionable) del soldado israelí que detuvo a un miembro de nuestro grupo en Hebrón hace una semana. Esas interacciones diarias nos enseñan los valores de superar el miedo y los valores del trabajo en equipo bajo circunstancias difíciles. Nos preguntamos si esta demostración de fuerza, aquí y en los puntos de control entre áreas palestinas (que evidentemente no son para la seguridad), da a estos ladrones de tierra la confianza de pensar que el poder compensa la falta de justicia.
– Los vidrios hechos añicos en las ventanas aún sin reparar de la casa de Shaden Abuhijleh, intelectual feminista, educadora, esposa, madre y abuela. Shaden fue asesinada cuando un soldado israelí pulverizó su casa con el fuego de su ametralladora. Su esposo (un destacado médico de Nablus) y su hijo (actualmente director de relaciones públicas en la Universidad de Alnajah) resultaron heridos [4].
– La joven madre con su hijo de cuatro años sentada en el cementerio de Nablus delante de su martirizado esposo entre las filas de docenas de palestinos asesinados (una de tantos parientes, hermanos, primos, tíos y sobrinos, madres e hijos). Nablus está bajo estado de sitio con invasiones casi todas las noches de las fuerzas de ocupación israelíes (la noche que estuvimos allí también demolieron una casa en el centro de la ciudad).
– La orden de ?arriba las manos?? en las 40 hectáreas de olivos y almendros en el pueblo de Aljaroshiya (distrito de Tulkarem). La orden vino de la «Custodia de Propiedad del Ausente?? (la compañía acusada de despojar y de adueñarse de propiedades de los palestinos), lo cual es interesante, ya que el texto alega ?motivos de seguridad?? (no especificados). En realidad, el muro fue cambiado y desviado para incluir esta fértil tierra que solía exportar 12 toneladas de aceite de oliva y cientos de kilos de almendras (evidentemente un territorio robado sin el menor asomo de problemas de seguridad). Antes de que nos mostraran las órdenes, la familia nos enseñó la tierra que está ahora separada de su casa por la red de cercas electrizadas. El anciano se lamentó en una ocasión diciendo que es peor que la muerte de un niño, porque el niño puede ser enterrado pero la tierra se muere todos los días ante sus ojos detrás de esta monstruosa cerca.
Estos son algunos de los muchos lugares que visitamos y las víctimas nos narraron sus historias. En Gaza y en el Líbano las historias son aún más horrendas.
En Gaza, por ejemplo, un profesor, su esposa y sus siete hijos fueron masacrados esta semana [5].
Quien fuera señalado como blanco, un líder de la resistencia de Hamas que se encontraba en el mismo edificio, sufrió heridas pero se salvó. Pero no sólo es horrendo el asesinato de civiles, el ataque a las plantas generadoras de electricidad (que también corta el suministro de agua) ha causado otra catástrofe humanitaria que traspasa los límites del entendimiento [5].
El terrorismo de estado israelí se extendió al Líbano donde docenas de civiles libaneses fueron asesinados y una parte significativa de la infraestructura civil (puentes, el aeropuerto, edificios de apartamentos) fue destruida después de que dos soldados ocupantes israelíes fueran capturados (Israel ha mantenido cautivos a muchos libaneses durante años y se niega a liberarlos).
Las palabras son demasiado limitadas en cualquier idioma para describir las experiencias de racismo y brutalidad por las que Tina ha tenido que pasar; son limitadas para narrar los otros casos que presenciamos en los últimos días. Pero también vimos decenas de actos heroicos de resistencia y de generosidad y espíritu increíbles. De hecho, cada palestino que vimos es en sí mismo un acto de resistencia al insistir en permanecer en la tierra de sus antepasados a pesar de los atroces esfuerzos del Estado de Israel para desarraigarlos. Ellos continúan viviendo a pesar de todas las desigualdades y a pesar de sufrir a diario crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad. El jueves, decenas de miles de estudiantes celebraron el éxito de haber pasado el examen para la certificación general (Tawjihi), el final de su escuela secundaria. Ahora tendrán que arreglárselas para llegar a las universidades (las fuerzas de ocupación han quebrantado significativamente derecho a acceder a la educación y a la religión, ya que la mayoría de las ciudades se encuentras aisladas unas de las otras). Sin embargo, de alguna manera piensan que tendrán éxito?? Dios lo quiera.
Nosotros, en la comunidad internacional, necesitamos centrarnos en la falta de protección de los civiles palestinos. Incluso los ciudadanos usamericanos de origen palestino en los territorios ocupados, como Tina, carecen de protección. Otra violación reciente de los derechos humanos básicos consiste en la negación del ?derecho de residencia» a los poseedores de pasaportes usamericanos (incluso aquellos nacidos en Cisjordania) casados con palestinos con ?derecho de residencia??. Las comillas son necesarias aquí, ya que las decisiones acerca de quién merece este derecho y quién no se basan en el racismo sionista (el máximo del territorio con el mínimo de población autóctona) y es una práctica contraria al derecho internacional y a los derechos básicos de los habitantes autóctonos. Miles de familias palestinas están afectadas por esta política, algunos se ven obligados a vivir separados y la mayoría corren el peligro de que los deporten de sus propias tierras y hogares. Se estima que entre 60 000 y 70 000 personas de las que viven aquí no pueden siquiera salir de su pueblo para no tener que vérselas con un soldado israelí que descubra que no poseen los documentos adecuados para vivir en sus propias tierras. Pero, además, muchos palestinos con los documentos adecuados no pueden salir de sus ciudades. Se trata de ciudades que están bajo asedio desde hace varios años.
Es difícil describir mis sentimientos después de tantos encuentros y acontecimientos. De hecho, hay un agudo contraste entre la digna resiliencia palestina -incluso cuando prácticamente hemos tocado fondo: las dos terceras partes del pueblo palestino son refugiados y personas desplazadas-y la ocupación brutal y la creciente degradación moral, las mentiras, las distorsiones del autoproclamado Estado judío. Los sionistas parecen robar y mentir, robar y mentir repetidamente sin apenas ultrajes entre países (sólo entre ciudadanos). Muchos palestinos nos preguntaron: ¿Por qué se exige el retorno de un soldado del ejército de ocupación mientras no se liberan/regresan los más de 10 000 palestinos secuestrados y encarcelados por el poder del Estado colonialista de Israel? ¿Hasta cuándo van a tolerar este doble rasero los débiles y complacientes europeos y los regimenes colaboracionistas del mundo árabe? ¿Cuándo los gobiernos en Usamérica, Canadá y Europa empezarán a prestar atención a los intereses de su propia gente en lugar de a las elites sionistas? ¿Cuándo las elites y los desinformados comprenderán que a los palestinos les han robado sus tierras durante 60 años y se las siguen robando, y que ése es el meollo de los problemas y de las inestabilidades? Ningún pueblo aceptará que lo sometan a una limpieza étnica diaria sin oponer resistencia. Al fin y al cabo, la paz sólo es posible cuando hay justicia. Localmente, las personas resistirán?? internacionalmente debemos protestar y aplicar boicots, desinversiones y sanciones hasta que Israel cumpla con los derechos humanos y se pliegue al derecho internacional.
Acciones de activistas y anuncios:
– Electronic Intifada ha lanzado http://electronicLebanon.net para concentrar la cobertura que estará realizando de los actuales ataques israelíes al Líbano. Manténgase en sintonía con este sitio para conocer los testimonios de testigos presenciales, comentarios y noticias de los últimos acontecimientos.
– Para equilibrar la cobertura que hacen los medios de difusión usamericanos del conflicto en Oriente Próximo, Imagine-Life emitirá varios centenares de anuncios televisivos la semana próxima. Los anuncios de esta televisión pública les mostrarán a los usamericanos las ramificaciones de la ocupación israelí, el deterioro de las condiciones de los derechos humanos y las raíces de los conflictos actuales en el Oriente Próximo. Para donaciones: http://www.imagine-life.org/donate.html
Notas
[1] Para conocer más acerca de la utilización del término «usamericano», ?usamericana?? o «Usamérica» consúltese El dios americano de las palabras http://www.rebelion.org/noticia.php?id=25466 (N. de la T).
[2] Véase http://www.remembershaden.org
[3] El autor ha incluido en su artículo, escrito originalmente en inglés, referencias a sitios que amplían o ilustran sus planteamientos. El lector tendrá en cuenta que todos estos vínculos le llevarán a textos en inglés. http://www.thecornerreport.com/index.php?=638&more=1&c=1&tb=1&pb=1#more638 (N. de la T).
[4] The Guardian, 13 de Julio de 2006 http://www.guardian.co.uk/israel/Story/0,,1819128,00.html
[5] http://rafah.virtualactivism.net/news/06/june_06_reports.htm y MONA EL-FARRA’s My life in Gaza
Bárbara Maseda y Manuel Talens son miembros de los colectivos de Rebelión y Tlaxcala, la red de traductores por la diversidad lingüística. Esta traducción se puede reproducir libremente a condición de citar al autor, al traductor y la fuente.