Somos un grupo de laicos y laicas jóvenes, comprometidos con la Iglésia en diversos proyectos y organizaciones, que nos sentimos dolidos por las últimas declaraciones de la Conferencia Episcopal. Por este motivo, queremos manifestarnos de forma pública. Lamentamos profundamente que quien nos representa no use su condición para sembrar el mensaje integrador y plural de Jesús. Nos sabe muy mal como cristianos y queremos dejar claro que nos manifestamos sin ningún interés partidista.
«Queremos obispos cristianos» significa que queremos obispos que sigan a Jesús con autenticidad, que sean autocríticos, que acojan la pluralidad tal y como Jesús acogía a todo el mundo y que se adapten a los signos de los tiempos.
Queremos obispos cristianos, de la misma forma que queremos que haya curas, campesinos, estudiantes, obreros, administrativos, funcionarias, periodistas, profesionales… que también lo sean. Y que cada uno desde su responsabilidad haga madurar a nuestra Iglesia.
No olvidemos jamás que dentro de esta Iglesia existen distintas maneras de pensar y que lo que tenemos en común es el seguimiento de Jesús y del Evangelio. Unidos por este mismo objetivo, las diferencias pierden fuerza.
Así entendemos que seguir el Evangelio, que es la apuesta por el AMOR, no admite un lenguaje juzgador, de ataque, división o exclusión. Queremos obispos valientes que procuren fomentar actitudes de diálogo, de pobreza, de humildad, de justícia, de compasión, de paz, que trabajen al lado de los pobres y den testimonio de que la felicidad pasa por ser limpios de corazón. Al mismo tiempo queremos que acepten la libertad que cada uno tiene para decidir desde su conciencia cómo materializar estos valores.
En definitiva, queremos obispos conciliadores que representen y no impongan. Sólo de esta forma podremos construir todos juntos la Iglesia que deseamos.
Barcelona, 21 de febrero del 2008
(Información facilitada por Juan Hernández, de Mallorca)