EN SOLIDARIDAD con LA REVOLUCI?N CUBANA
Viernes, 10 de Febrero, a las 7.30 de
la tarde, en la sede del MAS, Gral. Ramírez de Madrid, 29
Intervienen:
Pedro Barea Díaz y otros miembros de la Coordinadora Estatal de Solidaridad
con Cuba
-¿Es cierto que el cubano es un régimen represivo y dictatorial? ¿Qué tipo de cubanos lo viven así?
¿Por qué lo niega Amnistía Internacional?
-¿Existen en Cuba pobres, mendigos y parados, como ocurre en Occidente?
-¿Qué relevancia se ha dado en la prensa española a la decisión de la Asamblea General de la ONU de Octubre pasado, de condenar una vez más el bloqueo estadounidense, con el apoyo de la práctica totalidad de los países
miembros?
Estos y otros muchos interrogantes sobrevuelan a menudo sobre
nuestras conciencias cuando leemos y escuchamos los ataques informativos
contra el proceso seguido por la revolución cubana que, como toda
obra humana, se debate en medio de incertidumbres y falta de recursos.
Pero no son sólo los Medios. En los últimos meses hemos asistido
en Madrid a una campaña anticubana preocupante para todos los que
miramos con simpatía la tenaz resistencia del pueblo cubano. Cual
nuevo Miami en las entrañas europeas, en Madrid se han asentado
legalmente cubanos que pertenecen a organizaciones de marcado perfil
terrorista, como es el caso del grupo Alpha 66; en Madrid se han escenificado actos públicos típicamente contrarrevolucionarios (Parque de Berlín, Octubre-Novbre 2011) con el apoyo financiero y político del gobierno de la Comunidad y con la presencia activa de la misma Esperanza Aguirre
; desde Madrid, se han alimentado campañas mediáticas, sostenidas con dinero público, dirigidas a socavar y calumniar el devenir de la Revolución cubana, acusándolo sin datos mínimamente rigurosos de violación de derechos humanos, de represión política sistemática y de aplicación de torturas.
Esa línea de discurso ha llegado a ser la ‘verdad indudable’ en la conciencia de muchos españoles y europeos para quienes la palabra Cuba
viene a ser similar a represión y pobreza, sin cuestionarse las informaciones facilitadas por las multinacionales de la comunicación.
Ante ello procede plantearse, una vez más y con perspectiva crítica, en qué medida llegamos a conocer la realidad cubana. ¿Cómo entender, por ejemplo, desde nuestra situación de crisis estructural, que un régimen tan despótico como nos pintan consiga sistemas de sanidad y educación enteramente gratuitos para todos o que la mortalidad infantil no pase del 5 por mil (en EE. UU. es del 7 por mil) alcanzando en muchas regiones (como la provincia de Caimera donde se encuentra Guantánamo, el ‘Gulag’ de la tortura moderna) que esa mortalidad infantil sea literalmente de 0 (cero)?
De estos contrastes no nos informan los Medios. Porque lo que está en
juego es la validez de un modelo, el capitalista ultraliberal que combate
todo lo que no puede usar en su beneficio, frente a otro que pretende
alcanzar el Socialismo por una u otra vía.
En ese camino se encuentran otros pueblos de América Latina (Bolivia,
Venezuela, Ecuador…). Ninguno de ellos es la panacea, y también ellos mantienen contradicciones, principalmente en el terreno político. Pero a nadie se le oculta que en términos de justicia y equidad social, es decir, de liberación de la miseria y la explotación o, lo que es igual, de posibilidades de vida y de futuro para todas las capas de la población, son un referente para
los pueblos de Occidente y, en especial, para todos los que nos sentimos
atraídos por la fuerza de las utopías, históricas o trans-históricas.
Los cristianos de base no somos insensibles a estos procesos de liberación popular. En un mundo globalizado por el capitalismo neoliberal nos sentimos espoleados por una espiritualidad de la solidaridad que nos impulsa a globalizar la justicia y el amor con las víctimas del actual ‘des-orden’ planetario. Ese espíritu de solidaridad nace de la experiencia de
un Dios que, en Jesús, se hace solidario con los pobres y excluídos y la hacemos visible en miles de causas con los empobrecidos y marginados de
la tierra.
desde hace ya 51 años, está transitando el pueblo cubano, un ejemplo de tenacidad y fe en el futuro que merece nuestro reconocimiento y
solidaridad.
Para hacerla efectiva aquí y ahora, nos sentimos urgidos a responder a
la demanda que nos han cursado las organizaciones que más trabajan
en la solidaridad con el pueblo cubano, en particular, la Coordinadora Estatal
de Solidaridad con Cuba, promotora de la campaña “Cuba no está sola”.
Para conocer mejor el contenido de esta Campaña y apoyarla con nuestra
presencia, os convocamos a un Acto que, con este fin, tendrá lugar el Viernes, 10 de Febrero, a las 7.30 de la tarde, en la sede del MAS, Gral. Ramírez de Madrid, 29