Muchas gracias por invitarme a escribir unas líneas sobre Lupa Protestante en su primer cumpleaños.
Os felicito por la maravillosa iniciativa de Lupa Protestante. Puedo deciros que desde su nacimiento la leo a diario con verdadero placer y no menor asentimiento. Es una revista que aborda cuestiones teológicas de fondo, siempre muy pegadas a la realidad y en un lenguaje muy asequible al común de los mortales, creyentes o no, y no creyentes de distintas tendencias. La considero:
– Un espacio de libertad de expresión, en un momento en que ésta se ve cada vez más recortada en las iglesias, donde funciona la censura explícita o implícitamente. Libertad que se compagina con el respeto.
– Un espacio de crítica eclesial, política y social, en un momento en que nuestras iglesias viven cada vez más instaladas en el orden establecido y están constantemente merodeando en torno al poder en busca de apoyos, y cuando ese apoyo se recibe, se ve limitada la libertad de anunciar el Evangelio como Buena Noticia para los Pobres y mala noticia para los ricos. Es un evangelio descafeinado el que transmite, un evangelio sin sal y sin luz.
– Un espacio de pluralismo ideológico, tanto teológico como político, en tiempos de pensamiento único y de lo políticamente correcto.
– Un espacio de ecumenismo sincero y exigente, que subraya lo que une a las distintas iglesias, sin por ello escamotear las diferencias, que lejos de distanciar, son la mejor manifestación de la riqueza del pluralismo. Diferencias que deben respetarse y valorarse positivamente, pero sin caer en la desgualdad. Diferencias dentro de la igualdad de derechos y deberes.
– Espacio de diálogo interreligioso en busca de la Verdad con minúscula y con mayúscula, en tiempos de fundamentalismos religiosos cada vez más acusados. Una verdad que se mueve en el plano noético (teoría del conocimiento teológico), ético-utópico (ideal a conseguir) y práxico (compromiso).
Deseo a Lupa Protestante larga vida.Con mi agradecimiento al director y a los colaboradores, ad multos annos.
Vuestro amigo,
Juan José Tamayo-Acosta.