El diario del Vaticano ficha a De Prada tras denunciar las «voces ateas y anticristianas» de la cadena
La discusión sobre la orientación de la COPE continúa abierta en el seno de la Conferencia Episcopal Española. Ayer, en la reunión del comité Ejecutivo los críticos reiteraron su oposición a la renovación del contrato de Federico Jiménez Losantos, tras escuchar las explicaciones de Alfonso Coronel de Palma, presidente del consejo de administración de la emisora.
Según explica La Vanguardia, el debate de ayer fue más intenso que el del pasado 8 de mayo, cuando el cardenal arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, expresó por escrito su disconformidad con la actual orientación de la COPE y a la renovación de Losantos. En este mismo sentido se habría expresado el cardenal arzobispo de Barcelona, Lluís Martínez Sistach, quien ha reconocido públicamente su rechazo a la continuidad del polémico periodista en la COPE.
Burlas reiteradas
La semana pasada, tanto Sistach como el escritor Juan Manuel de Prada -quien criticó la línea de la COPE en el diario oficial del Vaticano, L’Observatore Romano-, y Manuel María Bru, responsable de los contenidos socio-religiosos de la COPE -quien cuestionó el «liberalismo autosuficiente» de Losantos-, fueron objeto de las burlas del locutor. Estos comentarios despectivos habrían salido a colación en la reunión de ayer.
De Prada, contratado por el diario vaticano
L’Observatore Romano, que ya avaló al sector crítico al publicar el artículo de Prada, les ha dado un nuevo empujón al contratar al escritor como colaborador fijo. Parece que la protesta formal de la COPE por las críticas no ha calado en la voz del Vaticano.
Reunión de la comisión permanente
La decisión final sobre la COPE la adoptará la comisión permanente, integrada por 23 prelados ?los miembros del ejecutivo, más los presidentes de las distintas comisiones de la conferencia?, se reunirá el martes y el miércoles de la semana próxima, dos días antes del Congreso del PP. La cadena en general y Losantos en particular vienen manteniendo una línea muy beligerante contra el encuentro en Valencia y el liderazgo de Rajoy.