Los ‘diez mandamientos’ del papa y la catequesis de niños -- Leonardo Belderrain Doctor en teología Moral y responsable de la catequesis de la capilla Santa Elena diócesis de Quilmes (Buenos Aires-Argentina)

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Enviado a la página web de Redes Cristianas

Se comenta que las declaraciones del Papa hacen temblar a los sectores más conservadores, que tendrán que adaptarse a la nueva filosofía que él imparte.
Este jueves, a través de la revista de los jesuitas, Francisco ha dado un paso más y ha marcado nuevas líneas en temas de los que ha hecho bandera la Iglesia, y que sería muy importante que lleguen a los adultos catequistas y a los niños. Se expresan las ideas del Papa y los comentarios nuestros.

NO CANSAR CON EL ABORTO Y LA HOMOSEXUALIDAD

«No podemos seguir insistiendo sólo en cuestiones referentes al aborto, al matrimonio homosexual o al uso de anticonceptivos. Es imposible. Yo he hablado mucho de estas cuestiones y he recibido reproches por ello. Pero si se habla de estas cosas hay que hacerlo en un contexto. Por lo demás, ya conocemos la opinión de la Iglesia y yo soy hijo de la Iglesia, pero no es necesario estar hablando de estas cosas sin cesar».

Belderrain: los niños de nuestras sociedades urbanas reflexionan fácilmenteacerca de cómo ellos discriminan a uno que habla mal, al discapacitado, al que no conoce Orlando o Disney World o al que es amanerado. Una catequesis inclusiva debe anunciar que allí donde se recibe a un inmigrante despreciado se recibe a Dios y allí donde se discrimina a alguien por su condición sexual o social, se activa lo diabólico; se lo expulsa a Dios

– NO SER DE DERECHA

«No habré sido ciertamente como la beata Imelda, pero jamás he sido de derecha. Fue mi forma autoritaria de tomar decisiones la que me creó problemas».

Belderrain: forma parte del afianzamiento ?yoico? de los chicos que se centren en ellos; pero pueden comenzar a hacer otros actos altruistas, tales como preguntar: papá?? ¿quieres que veamos en la tele algo que nos guste a los dos? El domingo?? ¿quieren que les haga, mamá y papá, el desayuno que le gusta a los dos?

– NO TORTURARSE EN EL CONFESIONARIO

«Esta es la grandeza de la confesión: que se evalúa caso a caso, que se puede discernir qué es lo mejor para una persona que busca a Dios y su gracia. El confesionario no es una sala de tortura, sino aquel lugar de misericordia en el que el Señor nos empuja a hacer lo mejor que podamos».

Belderrain: para que los chicos no hagan de él una sala de tortura, resulta bueno que entre ellos aprendan a dialogar y discernir, primero entre amigos, qué es un accidente o una calamidad en la vida, qué es simplemente un error de crecimiento y qué pudiera ser un pecado. Sería muy rico que vieran a nuestros educadores confesarse con gente con la que dé gusto abrirse; llenos de misericordia y que puedan comprender nuestras situaciones dilemáticas y aprender de ellas.

– AUMENTAR LA CUOTA FEMENINA

«Es necesario ampliar los espacios para una presencia femenina más incisiva en la Iglesia. Temo la solución del ‘machismo con faldas’ porque la mujer tiene una estructura diferente al varón».

«Las mujeres están formulando cuestiones profundas que debemos afrontar. La Iglesia no puede ser ella misma, sin la mujer y el papel que ésta desempeña. La mujer es imprescindible para la Iglesia. María, una mujer, es más importante que los obispos. Digo esto porque no hay que confundir la función con la dignidad. Es preciso, por tanto, profundizar más en la figura de la mujer en la Iglesia. Hay que trabajar más, hasta elaborar una teología profunda de la mujer».

«En los lugares donde se toman las decisiones importantes es necesario el genio femenino. Afrontamos hoy este desafío: reflexionar sobre el puesto específico de la mujer, incluso allí donde se ejercita la autoridad en los varios ámbitos de la Iglesia».

Belderrain: Que los chicos vean hombres y mujeres en la catequesis, cómodos, sin disputar poder, hacer de esta manera que la iglesia de nuevo vuelva a ser el país de la libertad. Esto no se improvisa y requiere grandeza de alma.

– SALIR DEL DESPACHO Y NO SER FUNCIONARIO

«El pueblo de Dios necesita pastores y no ‘funcionarios clérigos de despacho’. Los obispos, especialmente, han de ser hombres capaces de apoyar con paciencia los pasos de Dios en su pueblo, de modo que nadie quede atrás, así como de acompañar al rebaño con su olfato para encontrar veredas nuevas».

Belderrain: Si la catequesis le pide a los chicos certificados, para saber si fueron a misa a otro lugar, se suma burocracia y se hace de las capillas lugares donde se va sólo por el peso de la obligación. Las capillas para los niños deben volver a ser los lugares de la fiesta donde da gusto celebrar el día de la madre, la Navidad o cuando la abuelita partió.

– MANTENER LA «FRESCURA»

«Tenemos por tanto que encontrar un nuevo equilibrio, porque de otra manera el edificio moral de la Iglesia corre el peligro de caer como un castillo de naipes, de perder la frescura y el perfume del Evangelio. La propuesta evangélica debe ser más sencilla, profunda e irradiante. Sólo de esta propuesta surgen luego las consecuencias morales».

Belderrain: ¿Cómo hacer para que en las capillas y lugares de culto se sienta el perfume del evangelio? Creo que de dos maneras: *aumentando el amor reciproco entre todos ( koinonia) y *cuidando especialmente a los más pobres(diaconía). Los niños son muy sensibles y se dan cuenta si hay perfume o no lo hay.

– AMAR A MOZART Y FELLINI.

«En música amo a Mozart, obviamente. Aquel ‘Et Incarnatus est’ de su ‘Misa en Do’ es insuperable: ¡te lleva a Dios!»

«Mozart me llena: no puedo pensarlo, tengo que sentirlo».

«‘La Strada’ de Fellini es quizá la película que más me haya gustado. Me identifico con esa película, en la que hay una referencia implícita a san Francisco.

Belderrain: Es importante que los chicos hagan experiencias estéticas y místicas que los marquen. ?Sólo se ve bien con el corazón??, pero a este órganohay que aclimatarlo, haciéndole sentir cosas bellas. Como dice el Papa, se trata de hacer sentir la belleza y no sólo de pensarla. En este dar arte y belleza ayuda Mozart y mucho, en nuestro ambiente, la murga que integramos.

– DORMIR EN EL REZO

«Rezo el oficio todas las mañanas. Me gusta rezar con los salmos. Después, inmediatamente, celebro la misa. Rezo el rosario. Lo que verdaderamente prefiero es la adoración vespertina, incluso cuando me distraigo pensando en otras cosas o cuando llego a dormirme rezando».».

Belderrain: Los niños tiene que aprender a meditar y a rezar, sobre todo en las comidas, aprendiendo a comunicar allí en ese espacio, lo que los alegra (acción de gracias) y lo que les preocupa,(oración de petitorio).

– NO LLEVAR VIDA DE «SOLTER?N»

«Los religiosos son profetas. Son los que eligieron un modo de seguir a Jesús que imita su vida con la obediencia al padre, la pobreza, la vida en comunidad y la castidad. En este sentido, los votos no pueden acabar convirtiéndose en caricaturas, porque cuando así sucede, por ejemplo, la vida de comunidad se vuelve un infierno y la castidad una vida de solterones. El voto de castidad debe ser un voto de fecundidad. En la Iglesia los religiosos son llamados especialmente a ser profetas que dan testimonio de cómo se vive a Jesús en este mundo y que anuncian cómo será el reino de Dios, cuando llegue a su perfección. Un religioso no debe jamás renunciar a la profecía».

Belderrain: Para eso es importante que los chicos nos vean ir con gusto hacia aquellos que no tienen voz: geriátricos, cárceles, hospitales, y que desde allí también nos vean proponer estrategias para construir aquel mundo que se parezca al nuestro. No mejor sino más confortable y digno. Ayer celebramos con una banda rockera la primavera en la cárcel; a nadie le quedó la duda, entre los que participamos de aquella fiesta, que aquellos espacios de exclusión son las nuevas catedrales de Dios.

– EVOLUCIONAR DESDE LA «LOCURA» JUVENIL

«En mi experiencia como superior en la Compañía, si soy sincero, nunca me he comportado así, haciendo las necesarias consultas. Y eso no ha sido bueno. Mi gobierno, como jesuita, al comienzo, adolecía de muchos defectos. Corrían tiempos difíciles para la Compañía: había desaparecido una generación entera de jesuitas. Eso hizo que fuera elegido yo, provincial más joven. Tenía 36 años: una locura. Había que afrontar situaciones difíciles, y yo tomaba mis decisiones de manera muy brusca y personalista».

Belderrain: .Que los niños estén en comunidades donde las grandes decisiones se tomen en equipo, es el mejor antídoto para no ser quemados ?a posteriori?? por los autoritarismos y para que mañana disfruten y cuiden sus democracias, sus micromilitancias, su vida de familia y convivencia en el barrio. Pero no hay nada más estimulante que estar en comunidades donde sus responsables, como el Papa, hablen algunas veces de lo que aprendieron ?metiendo la pata??.