Enviado a la página web de Redes Cristianas
Es el vaticanista Marco Politi es el que afirma en artículo de Religión Digital (RD), que firma la propia redacción con fecha de hoy, 08/06/2014: «Los lobos acechan la revolución pacífica que pretende el Papa Francisco». Y como sobre título, “El vaticanista denuncia la «oposición silenciosa» de grupos ultra conservadores”, y como subtítulo «Está tocando grandes intereses económicos, la alarma de un atentado contra él es muy seria». Todo esto lo afirma Politi en su último libro sobre el papa Francisco. Como también cosas tan contundentes como éstas:
“Acusan al papa de demagogia, de populismo, de disminuir el primado papal, de llevar a una ‘protestantización’ de la Iglesia y de hablar demasiado de pobreza”.
Lo de los lobos es expresión de Marco, lo de “con piel de oveja” es, en este contexto, cosa mía. Y lo afirmo porque he oído y leído afirmaciones de obispos, y gente “muy católica” (pero, a lo que parece, muy poco cristiana, suelo añadir yo, sin ningún ánimo de juzgar; apenas con la idea de describir, sin más, lo que me transmite, o no, un aroma evangélico), que, sin referirse al Papa directamente, pero dejando meridianamente claro que las insinuaciones a él se referían, le han dado palos de todo tipo: con varitas finas, con palos consistentes, o con garrotes como para dejar KO al agredido. Y todo, sin perder los modos, y hasta con sonrisa beatífica. Modos, como dice una amiga mía nada sospechosa de atea o agnóstica, sino muy integrada en la Iglesia, y, por eso mismo, muy enterada de sus usos y costumbres, modos y estilos muy clericales.
En este blog he escrito varias veces indicando, y denunciando, actitudes de ese tipo, y hasta no me he retraído de traer ciertos nombre a colación. Como ciertos obispos, o el reciente fundador de un instituto religioso, cuyos nombres no quiero ahora señalar, no vaya a ser que mi comportamiento no sea prudente ni productivo para la unidad de los creyentes. Y digo esto porque los dos artículos que escribí sobre quien auguró un inminente, y casi irremediable cisma en la Iglesia, enviados a un portal cristiano que me ha publicado muchos artículos, en este caso no los sacaron de la tenue penumbra del cajón.
Es a estas personas oficialmente católicas y creyentes a las que me refiero, comentando afirmaciones del vaticanista Marco Politi, como “lobos con piel de oveja”. La palabra “demagogia”,y “populismo¨, con las que también acusan al Papa, fueron usadas reiteradamente en la conferencia de Santiago Martín, que oí por YouTube, en la que, con poca competencia en mi opinión, disertó un poco superficialmente sobre la “Misericordia”, en lo referente a permitir, o no, la comunión a los divorciados o separados, unidos en otra unión, oficial o no. Pero se nota en ciertos ambientes y foros clericales, cada vez más parecidos a las ideas de monseñor Lefebvre (Marcel François Marie Joseph Lefebvre), obispo católico opuesto virulentamente al Concilio Vaticano II, que acabó excomulgado por Juan Pablo II. Los actuales lobos disfrazados de oveja se diferencian del obispo rebelde francés en que no se oponen al Papa ni al concilio con virulencia, sino bastante más maquiavélicamente.