(RD/Colpisa).-?Es puro maquillaje, lo que hay que mirar son las acciones??, protestaba Jim Hackett en reacción a la forma en que Benedicto XVI ha enfrentado el escándalo de los abusos sexuales.
Para este programador informático que este viernes participaba en una vigilia a la puerta de una galería del Soho neoyorquino en demanda de acciones más enérgicas, el líder de la iglesia católica sólo ha respondido a las presiones.
Comparten su opinión los miembros de la Red de Supervivientes de Abusos de Sacerdotes (Snap, por sus siglas en inglés), donde su fundadora Barbara Blaine calificaba la sorpresiva reunión del jueves como ?un gesto amable, puramente simbólico??.
?Lo que necesita es tomar acciones concretas, disciplinar a aquéllos que han encubierto los abusos durante décadas y lo siguen haciendo. Sólo así puede garantizar que no volverá a suceder??. Entre tanto, su promesa es una cuestión de fe.
Ningún obispo de EEUU ha perdido su puesto o ha sido disciplinado por lo que el mismo papa consideró ?malos manejos??. En el mejor de los casos se les ha cambiado de emplazamiento, como hicieran ellos con los sacerdotes acusados de abusos sexuales. La única cabeza que se ofreció resultó una broma de mal gusto.
Poco después de dimitir por haber escondido durante años los abusos de Bostón, con una actitud criminal que llevó la diócesis a la bancarrota, el cardenal Law fue destinado a Roma al frente de una de las cuatro basílicas de la ciudad. ?Esa maniobra fue un insulto para nosotros??, dice Blaine llena de rencor.
Todavía uno de los cinco cardenales que Snap acusa de ser responsables de los abusos de cientos de niños por haber trasladado sigilosamente a los pederastas de parroquia en parroquia es hoy el presidente de la Conferencia Episcopal de EEUU.
Indignación e hipocresía
De todo ello responsabiliza a Joseph Ratzinger, que como cardenal y como Papa ha encubierto a los responsables. Tan indignante es para las víctimas este acto de hipocresía que ni siquiera dan credibilidad a las emociones descritas por el Vaticano el jueves, cuando algunas de las víctimas rompieron en sollozos frente a él.
?Aplaudimos el valor de esas víctimas porque revivir el trauma de haber sido sodomizado en la infancia por un sacerdote es lo más difícil que se puede hacer??, dijo Blain, ?pero nosotros le hubiéramos dicho otro tipo de cosas??.
Aún así el Papa escuchó palabras duras. ?Le dije que tiene un cáncer en su iglesia y que tiene que hacer algo para atajarlo??, contó a la CNN Bernie McDaid. ?Espero que me esté escuchando, le dije, y él asintió con la cabeza??.
Snap dice tener evidencias de que los abusos sexuales se siguen produciendo y que al menos 13 archidiócesis, entre ellas la de Boston, no siguen las reglas de transparencia impuestas por la propia iglesia católica de EEUU.