El catedrático de Teología defiende en la UIMP un mayor conocimiento de las religiones para evitar conflictos
Juan José Tamayo, en la UIMP./ DMEl teólogo Juan José Tamayo ha afirmado que con la llegada de Barack Obama a la presidencia de los Estados Unidos, «estamos en el camino» de reconducir la Alianza de Civilizaciones propuesta por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero y el primer ministro turco, Tayyip Erdogan, en el año 2004.
El catedrático de Teología y Ciencias religiosas de la Universidad Carlos III, que dirige un curso en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), destacó en rueda de prensa que «Obama representa la aceptación de parte del imperio de esta iniciativa» y «no es partidario del choque de civilizaciones, sino del diálogo y del encuentro entre culturas».
Al respecto, recordó que Obama ha sido el primer presidente de la historia de Estados Unidos que «citó a los tres profetas de las tres grandes religiones en un discurso en El Cairo».
A su juicio, la Alianza de Civilizaciones ha sufrido «un cambio de paradigma», ya que antes contaba con «la indiferencia de muchos países occidentales» y del «emperador» George Bush, que mostró «su rechazo» a la misma y optó por el «choque de civilizaciones de Huntington».
Sin embargo, los países que recibieron con más entusiasmo esta propuesta fueron los árabes, «precisamente a los que se consideraban los responsables del choque de civilizaciones».
Quitar «telas de araña»
Por otro lado, Tamayo, que dirige el curso ‘Judaísmo, Cristianismo e Islam, tres religiones en diálogo’, destacó la importancia de que exista un mayor conocimiento de las religiones para evitar conflictos.
En este sentido, consideró «muy importante quitar las telas de araña de los ojos» que no permiten conocer las líneas de exposición de cada una de las religiones. Por ello, abogó por pasar de una actitud «anti» a un planteamiento «inter», para una sociedad plural desde el punto de vista religioso, además de intercultural o interlingüistica.
Además, denunció que es «habitual» considerar a las religiones como fuentes de conflictos, cuando en realidad pueden ser «fuentes de diálogo y espacios de comunicación para trabajar por la paz y la justicia».
Sobre el contenido del curso, comentó que estas tres religiones «pertenecen a la misma familia», «son hermanas», ya que tienen varios elementos en común, y unos «principios éticos muy afines», que se centran en la opción por los excluidos y los marginados, pero «como sucede en todas las familias», las relaciones no han sido siempre muy buenas, y han vivido «más momentos de confrontación que de convivencia pacífica y diálogo».
Tamayo indicó que en el curso pretende difundir un conocimiento profundo de las tres religiones para acabar con los presupuestos imaginarios, más que reales, que se tienen sobre ellas. Estos estereotipos, «promovidos por la religión predominante», consideran al Judaísmo como «la religión de la venganza, al Cristianismo la del amor y al Islam la de la violencia