Campesinos, trabajadores y estudiantes están convocando a la sociedad hondureña para ocupar las calles de Tegucigalpa -capital del país- el sábado (4) y exigir el retorno de Manuel Zelaya a la presidencia del país. Ayer (1º), Zelaya afirmó que volverá al país el sábado, cuando termina el plazo de 72 horas dado por la Organización de Estados Americanos (OEA) para la restitución del gobierno legítimo.
El bloqueo militar que impide el acceso de ómnibus y automóviles a Tegucigalpa está obligando a los manifestantes a entrar en la ciudad caminando. Según periodistas que se encuentran en la capital del país, los grupos de manifestantes están surgiendo en forma espontánea desde varias ciudades hondureñas y de los países más cercanos.
En las paredes de la capital, grafiteros pintan «Fuera, Pinocheletti», asociando al ex-dictador chileno Augusto Pinochet con el presidente temporario de Honduras, Roberto Micheletti. «Fuera, golpistas de la Academia Militar», refuerzan los manifestantes que exigen la restitución del gobierno de Zelaya, depuesto y expulsado del país el último domingo, por una Junta Militar.
El canciller temporario de Honduras, Enrique Ortez, garantizó ayer a la prensa local que «hay 25 mil personas listas para impedir», el sábado, la entrada de Manuel Zelaya en Tegucigalpa. Ortez dijo que cualquier persona puede entrar en el país, excepto Zelaya. El canciller informó que el Presidente depuesto podrá regresar a Honduras como ciudadano, pero que será detenido, porque existe una orden de detención contra él en la Justicia hondureña.
Vía Campesina afirmó que los medios de comunicación del país están divulgando informaciones tendenciosas y contrarias a los movimientos sociales. Según nota de la entidad, los vehículos de prensa «sólo pasan la información que les conviene y no lo que realmente está sucediendo. Esto ha generado un clima de desinformación en toda la población y en los movimientos sociales. Sólo contamos con la solidaridad de la comunidad internacional».
Las organizaciones que constituyen Vía Campesina están organizando una misión internacional -con delegados de América del Norte, Central y del Sur y también de Europa- para recibir a Zelaya el sábado, en Tegucigalpa. La entidad pretende acompañar al presidente depuesto por la capital, reforzando las protestas de los demás grupos, tales como indígenas, sindicalistas y estudiantes.
«Es momento de construir la integración centroamericana y latinoamericana, no dejaremos que pisoteen nuestros derechos, ya hicieron eso en el pasado. Hoy estamos siendo llamados a construir nuestra propia historia», protestó Vía Campesina en un comunicado de prensa.
Otras entidades internacionales reforzaron el repudio al golpe de estado. En la tarde de ayer, los países miembros del Sistema de Integración Centro-Americana (Sica) suspendieron, por unanimidad, las relaciones comerciales y diplomáticas con Honduras.
A comienzos de la semana, la OEA y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) también rechazaron el golpe de estado hondureño. Las dos entidades amenazaron suspender a Honduras en el caso que Zelaya no sea restituido en la presidencia del país.
Mañana, la Asociación de Trabajadores del Campo (ATC), de Vía Campesina y otras organizaciones civiles de Nicaragua, El Salvador y Guatemala van a bloquear las fronteras de esos países con Honduras.
Traducción: Daniel Barrantes – barrantes.daniel@gmail.com