La primavera ha durado dos años. Extraño fenómeno, porque, aparte de no ser climático, es eclesial. Vino de pronto, sin anuncio previo, cuando ya estábamos acostumbrados a la inercia de las cosas, y en el campo católico no se aspiraban aires de renovación. Se quería, se anhelaba, se sufría por ello, pero no se esperaba. Del colegio de cardenales reunidos bajo llave, al igual que de Nazaret, ?no podría salir algo bueno??.··· Ver noticia ···
Registrarse
¡Bienvenido! Ingresa en tu cuenta
¿Olvidaste tu contraseña? consigue ayuda
Recuperación de contraseña
Recupera tu contraseña
Se te ha enviado una contraseña por correo electrónico.