Incluso con recomendaciones del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la inviolabilidad de la embajada brasilera no fue preservada. Hoy por la mañana, el edificio de la Embajada, instalado en Tegucigalpa, fue blanco de ataques de armas de efectos químicos, lanzadas por las tropas de seguridad del gobierno de facto.
Según informaciones repasadas por integrantes de movimientos sociales y de derechos humanos, Zelaya, su esposa, familia, funcionarios de la embajada y la población presentaron cuadros de diarrea, vómitos, vértigos, hemorragia nasal y gastrointestinal, debido al contacto de substancias tóxicas como plaguicidas, componentes químicos de los gases y substancias radiactivas. Las informaciones dicen que la primera dama es quien se encuentra en peor estado.
Para agravar la situación, las Fuerzas Armadas prohibieron la entrada de médicos y de la Cruz Roja Internacional, violando todos los tratados y convenciones internacionales de salud y respeto de los derechos humanos. Sin embargo, en entrevista con las redes locales, el presidente hondureño enfatizó la necesidad de intervención de la Cruz Roja en la situación.
Los ataques ocurrieron el mismo día en que el Consejo de Seguridad de la ONU defendió la preservación de la embajada brasilera, donde se encuentra Zelaya desde el último lunes.
Durante el encuentro, ocurrido en Nova York, el ministro de Relaciones Exteriores, Celso Amorim, expresó el rechazo del gobierno brasilero a las amenazas contra su embajada y pidió que el Consejo de Seguridad reconozca la «inviolabilidad» de la Sede. El ministro pidió además a Roberto Micheletti, presidente de facto, que respete la Convención de Viena sobre la inviolabilidad de las sedes diplomáticas y resaltó que Brasil reconoce como presidente únicamente a Manuel Zelaya.
A pesar del pedido de varios jefes de estado, defensores de derechos humanos y representantes de movimientos sociales hondureños, el Consejo no se pronunció enfáticamente sobre la crisis política por la que pasa Honduras, después del golpe de estado, instalado el día 28 de junio.
Marcha
Incluso con el aumento de la represión militar y policial los ciudadanos hondureños contrarios al golpe continúan manifestando su descontento. Hoy, por los barrios de Tegucigalpa un grupo de resistencia marchó, bajo amenaza, exigiendo la vuelta de Manuel Zelaya al poder. La movilización, que fue organizada por el Frente Nacional de Resistencia contra el golpe va a continuar también los próximos días.
La Unión Cívica Democrática, que apoya al gobierno del golpista Roberto Micheletti, también realizó hoy una marcha que se inició frente a la Casa de las Naciones Unidas y en su recorrido pasó frente a la Embajada de Estados Unidos.
Derechos Humanos violados
Debido a los agravios ocurridos en el país, el Observatorio Internacional sobre la situación de Derechos Humanos en Honduras (OISDHHN) solicitó medidas enérgicas a la Corte Suprema de Justicia, al Congreso de la República de Honduras, al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones, a la comunidad internacional; en particular a la Unión Europea; y al Promotor General de la Corte Penal Internacional.
Todos los llamamientos del OISDHHN ruegan por la población hondureña, que está siendo privada de sus derechos más básicos. El Observatorio Internacional subrayó la necesidad de que los delitos cometidos en Honduras sean castigados penalmente y pidió la visita de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos a fin de verificar la situación implantada en Honduras. Otra gran preocupación es la cercanía de las elecciones presidenciales. Es preciso que la comunidad internacional respalde la posición del Secretario General de las Naciones Unidas para que el proceso electoral no sea reconocido, dadas las circunstancias.
Traducción: Daniel Barrantes – barrantes.daniel@gmail.com