El tiempo nuevo será tiempo de paz y Justicia o no será… -- Gabriel Sánchez (Montevideo)

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La Iniciativa de Seguridad contra la Proliferación (PSI) y la Armada de Mil Barcos de EE.UU.
El control de los océanos del mundo, ¿preludio para la guerra?
Rick Rozoff
Global Research
Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens
Uno de los esfuerzos más monumentales y arrolladores, aunque sea pasado por alto frecuentemente, del gobierno de Bush por proyectar una dominación militar mundial y al hacerlo pervertir aún más las relaciones internacionales, es lo que su iniciador, John Bolton, en su capacidad de Subsecretario de Estado para Control de Armas y Seguridad Internacional llamó en sus días Iniciativa de Seguridad contra la Proliferación (PSI).

Lanzada oficialmente el 31 de mayo de 2003, la PSI fue la más amplia aplicación de la proyección internacional del poder por parte de EE.UU. en la era posterior a la Guerra Fría, implicando como lo hace, nada menos que la capacidad de realizar vigilancia naval, interdicción [interdicción marítima, es la negación de acceso a puertos específicos a naves mercantes para la importación/exportación de mercancías a un país determinado o a varios países, N. del T.] y eventualmente acción militar desenfrenada en todos los océanos del mundo.

Después de y como suplemento para la Operación Libertad Duradera y sus seis áreas de responsabilidad desde el sur de Asia al Cuerno de África y del Océano Índico al Mar Caribe, la así llamada Operación Esfuerzo Activo, que colocó durante siete años todo el Mar Mediterráneo bajo su control, fue el preludio de la OTAN y prototipo para la Iniciativa de Seguridad contra la Proliferación. La PSI es una operación militar diseñada e implementada unilateralmente por Washington sin consulta previa con las naciones y pueblos de las áreas en cuestión.

Y como la Operación Libertad Duradera y la Operación Esfuerzo Activo, su autoproclamada misión es ilimitada en su alcance geográfico y en el alcance histórico.
La PSI fue anunciada con el supuesto objetivo de, según el siempre complaciente New York Times, ?excluir materiales y contrabando nucleares.?? Una norma suficientemente amplia como para incluir casi cualquier operación naval en cualquier sitio y con cualquier propósito real para el que Washington quiera emplearlo.

Después, Irán fue crecientemente identificado como justificación putativa para extenderla al Golfo Pérsico y, si EE.UU. y sus aliados pudiesen inventar algún método para llegar allí, el lago endorreico que es el Mar Caspio. Por cierto, el ex Secretario de Defensa Donald Misfield fue un ávido propugnador de lo que conceptuó como Guardia del Caspio.

El Mar Caspio es, claro está, una formación rodeada de tierra que no es accesible a las armadas, con la excepción de sus cinco Estados costeros.

la PSI no tardó en salir a la caza de ?contrabando norcoreano?? en los Mares Egeo y Negro, el Golfo Pérsico y el Mar del Sur de China, entre otros, aunque su mayor concentración sigue estando en Asia.
El mismo 22 de mayo de 2006, el artículo del New York Times, del que emana la cita anterior, también incluyó este apéndice revelador: ?La iniciativa también involucra esfuerzos por limitar el financiamiento y transacciones comerciales sospechosas de Irán, Corea del Norte, Siria, Cuba y otros países.??

Los países mencionados son cuatro de los siete acusados por el gobierno de EE.UU. inmediatamente después de los ataques del 11-S de ser ?Estados que apoyan el terrorismo,?? es decir, Cuba, Irán, Iraq, Libia, Corea del Norte, Siria y Sudán.

Este autor escribió el 12 de septiembre de 2001, que de los siete Estados mencionados, sólo uno, Sudán, tuvo alguna conexión previa con Osama bin Laden, rota más de cinco años antes; que ninguno de ellos había reconocido el orden talibán en Afganistán (aunque los firmes aliados de EE.UU.: Pakistán, Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos sí lo habían reconocido, y los Emiratos sean la única nación árabe con un contingente militar en Afganistán para aumentar la ironía); y que tres de los siete países identificados ? Irán, Iraq y Siria ? habían sido víctimas del mismo extremismo al que se les acusaba de apoyar.

El único vínculo concebible que tienen en común es que cada una de ellas ha sido objeto de intensos e incesantes esfuerzos de EE.UU. y Occidente en general para aislarla localmente y estigmatizarla internacionalmente como preparativo por un proyectado ?cambio de régimen.??
Y todas las seis tienen estrechas relaciones de Estado a Estado tanto con Rusia como con China.
Hace tres años, los medios estatales norcoreanos presentaron precisamente una perspectiva semejante.

?Corea del Norte advirtió a Corea del Sur contra la provocación de una ?guerra nuclear? si se une a un ejercicio internacional dirigido por EE.UU. orientado a interceptar armas de destrucción masiva, informaron los medios estatales. ?Corea del Sur dijo el mes que enviaría un equipo a ?observar? un ejercicio de la Iniciativa de Seguridad contra la Proliferación (PSI) dirigida por EE.UU., frente a Australia en abril.?? ?Minju Joson, el periódico publicado por el gobierno del Norte, también advirtió el sábado que la participación de Seúl en el ejercicio ?impediría que las relaciones inter-coreanas se desarrollen favorablemente y implicaría?? una guerra nuclear en la península coreana.?? (Agence France-Presse, 12 de febrero de 2006)

Agence France-Presse de hoy informa sobre un ?estudio? del Consejo de Relaciones Exteriores [CFR] de EE.UU. que declara que ?EE.UU. y sus aliados podrían tener que desplegar hasta 460.000 soldados a Corea del Norte para estabilizar el país si colapsa y estalla una insurgencia, dijo un estudio privado estadounidense del 28 de enero.??

La cantidad precisa de soldados estipulada sugiere que el análisis del CFR difícilmente puede ser sólo teórico.
Y menciona de modo bastante despreocupado, como de pasada, que:
?Corea del Norte linda con dos grandes potencias ? China y Rusia ? que tienen importantes intereses en juego en el futuro de la península. Es virtualmente seguro que se involucrarían activamente en cualquier crisis futura que tuviera que ver con Corea del Norte.???

No se diga que EE.UU. no haya ignorado temerariamente la preocupación de Corea del Sur al presionar a Seúl al respecto.
http://www.globalresearch.ca/index.php?context=va&aid=12102

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=80090&titular=el-control-de-los-océanos-del-mundo-¿preludio-para-la-guerra?-

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EL TIEMPO NUEVO SERA TIEMPO DE PAZ Y JUSTICIA O NO SERA??La patria no es el lugar en el que vivimos, sino el lugar en el que nos gustaría vivir. Simone Weil

Montevideo, 3 de febrero de 2009 ? Gabriel Sánchez

No somos concientes de que tanto había avanzado la escalada armamentística y estratégica, durante el periodo de Bush, lo cierto que esporádicamente, el amague de algún ataque a Irán, o la escalada entre las dos coreas han tensado los cables y puesto las luces al rojo vivo??

En este mismo momento Pyongyang aseguró de que invalidará ?todos los acuerdos de reconciliación, de no agresión, cooperación e intercambio en la línea fronteriza militar en el Mar del Oeste (Mar Amarillo)??, (http://www.informador.com.mx/internacional/2009/74453/6/pyongyang-advierte-posible-confrontacion-con-seul.htm), desde que el presidente surcoreano, Lee Myung-bak, asumió su mandato el pasado febrero, las relaciones se han ido deteriorando y han pasada a una fase de enfrentamiento que amenaza con activarse??Hay acusaciones de Corea del Norte hacía el régimen de Seúl de preparar una confrontación naval en el Mar amarillo.-

En realidad se rumoreaba que el equipo de defensa de Bush estaba dispuesto a llegar a intervenir en una guerra localizada y convencional en la península coreana, sin embargo nadie sabe a ciencia cierta que hará la nueva administración estadounidense en la región y tampoco cuál seria su respuesta ante una eventual confrontación entre ambas Coreas??

Tal vez Obama descubra que Bush le ha atado tanto las manos a sus planes, que deberá elegir entre continuar con sus políticas o desmontar la colosal industria bélica, que produce como en tiempos de guerra y desarticular el despliegue estratégico que parece tener como objetivo el configurar una superioridad estratégica incontrastable por parte de Estados Unidos, o lo que es más factible la guerra.

?? Si la guerra se desatará, parece obvio que ni será localizada, ni convencional y Estados Unidos puede llegar a constatar que la República Popular China y Rusia se han estado preparando también para tal eventualidad ??Es por eso que las decisiones que tome Obama ahora, pueden dar tranquilidad al mundo, pero deberá someter a los halcones de la industria armamentística y sobretodo destrozar la columna vertebral de los belicistas dentro del ejercito, que la administración republicana se encargó de encumbrar??Es incalculable cuanto dinero puede ser transferido desde esa nefasta industria hacia proyectos productivos, en esa línea, China puede ser una gran aliada, teniendo en cuenta el interés que se tiene por la Paz.-

Es tiempo de ver si podemos deponer nuestras naturales ansias de dominio y caminar juntos hacia un instancia de colaboración, en donde deberemos poner ingentes esfuerzos comunes para sortear un tiempo amenazante??y superar la suma de crisis que tiene una causa común??

El presupuesto básico para lograrlo es la Paz, pero no la paz armada, que despilfarra billones de dólares en sofisticados armamentos, sino la inversión de recursos, técnicas y colaboraciones de todo el orbe, en la construcción de relaciones más justas que eviten una acumulación desmedida, insana, que condena al hambre a millones y en lograr equilibrar el consumo de tal manera que permita a los ciclos naturales recuperar a la madre tierra y finalmente, un reparto equitativo y justo, que llene el plato de todos??

Sin lugar a dudas tenemos los recursos y la tecnología para realizarlo, pero deberemos tener la voluntad política??y para eso, es indispensable la participación conciente y activa de los Pueblos del Mundo??no enfrentándose, sino trabajando codo a codo??para dar a luz el futuro??la patria común donde quisiéramos todos vivir??