La embajada de Turquía ante la Santa Sede ha confirmado que el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, no estará en el país durante la visita del Papa Benedicto XVI, del 28 de noviembre al 1 de diciembre. La prensa italiana ha calificado la ausencia de Erdogán de «desaire diplomático» como consecuencia de las recientes críticas del Pontífice hacia el islám.
El primer ministro estará en la cumbre de la OTAN en Riga, Letonia, los próximos 28 y 29 de noviembre. No obstante, Turquía ha confirmado dos visitas oficiales, con el presidente de la República, Ahmet Necdet Sezer, y con el presidente de Asuntos Religiosos, Ali Bardakoglu. El Santo Padre visitará Turquía del 28 de noviembre al 1 de diciembre, con etapas en Ankara, Efeso y Estambul.
Los medios italianos y observadores del Vaticano opinaron que es muy raro que el líder de un gobierno no tenga algún tipo de reunión con un Papa que esta de visita. «Se lo puede pintar de la manera que se quiera, pero desde el punto de vista occidental, esto es malos modales», decía un editorial en la primera plana del periódico ‘Il Messaggero’, de Roma.
«Erdogan le hace un desaire al Papa», agregaba el diario ‘La Stampa’, de Turín, que describió a la ausencia de un encuentro como «otra muestra de indiferencia hacia el viaje».
Sin embargo, el responsable del Directorio de Asuntos Religiosos de Turquía, Ali Bardakoglu, ha reiterado que «Turquía recibirá al Papa con su tradicional hospitalidad».
Visita ensombrecida
La primera visita de Benedicto XVI a Turquía se ha visto ensombrecida por la furia de algunos musulmanes después de que durante una conferencia en el mes de septiembre el pontífice citara un pasaje de un emperador bizantino del siglo XIV que fue visto como crítico hacia el profeta Mahoma.
El periódico turco líder, ‘Sabah’, insinuó que Erdogan está «escapando del Papa». Algunas de las críticas más fuertes a Benedicto XVI provinieron de Turquía, en donde nacionalistas y activistas islámicos han presionado para que se cancele el viaje.
El Papa y autoridades del Vaticano dijeron, desde entonces y al menos una docena de veces, que sus comentarios fueron malentendidos.
La visita papal no fue confirmada oficialmente hasta el 16 de octubre, y su propósito principal es la reunión con el patriarca ecuménico Bartholomew, líder espiritual de los cristianos ortodoxos del mundo, para discutir sobre la unidad cristiana.
El Vaticano trata de cerrar la polémica
Por su parte, el Vaticano ha intentado minimizar la polémica y ha dado respuesta a los comentarios aparecidos en la prensa afirmando que ya conocía esta ausencia desde hace tiempo.
El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, señaló que las visitas oficiales no estaban todavía confirmadas, a pesar de que desde el 16 de octubre la Santa Sede envió el programa confirmado de la visita del Papa en Turquía. Según el Vaticano «el Jefe de Gobierno estaba intentando estar presente en Turquía para encontrarse con el Santo Padre, pero aún no lo había confirmado».
El primer ministro turco venció en las elecciones de 2002 después de renunciar explícitamente al fundamentalismo en favor de una ideología de «democracia islámica conservadora», en oposición a Erbakan.