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El papa Benedicto XVI saludó hoy a cinco mujeres ministros de culto de la Iglesia luterana durante la audiencia general de los miércoles en la plaza de San Pedro en el Vaticano.
El Papa le dió la mano a las cinco mujeres, quienes llevaban el tradicional «clergyman».

Al contrario de la iglesia católica, cuyo clero es exclusivamente masculino, los protestantes pueden ordenar mujeres como pastores. La Iglesia luterana está organizada jerárquicamente como la Iglesia católica, con obispos.

Para los católicos, Jesús escogió doce discípulos para acompañarlo, lo que ha sido interpretado como una forma de privilegiar la misión de los hombres dentro de la Iglesia.

En numerosos países, sobre todo en Austria, Canadá y Francia, grupos de mujeres desafiaron la autoridad del Papa al haber sido ordenadas sacerdotes. Por ello fueron excomulgadas.

Benedicto XVI prometió recientemente abrir una «reflexión» sobre el papel de la mujer en la Iglesia católica.

«Es justo preguntarse si dentro del servicio ministerial se puede ofrecer más espacio, más posiciones de responsabilidad a la mujer», afirmó el Papa a comienzos de marzo, quien precisó con una serie de argumentos teológicos que el llamado «ministerio sacerdotal» está «reservado sólo a los hombres», dijo.