Obispo cuelga la sotana por la política
El obispo paraguayo Fernando Lugo confirmó hoy, tras renunciar al estado clerical, su intención de presentarse a las elecciones presidenciales de 2008 al frente de una coalición opositora al gobernante Partido Colorado.
‘Pido al pueblo que ejerza con coraje su condición de soberano y que se sume, sin temor, a esta gran cruzada para limpiar a la República de la maleza perversa que la condenó a esta lamentable situación de abandono’, dijo Lugo, a quien algunos sondeos le colocan como favorito en las intenciones de voto.
Lugo, de reconocida trayectoria pastoral en favor de los sectores populares del centro del país, anunció su decisión cinco días después de haber presentado ante la Nunciatura, en Asunción, su renuncia ‘al ministerio sacerdotal’.
El obispo, de 55 años, leyó un mensaje a la ciudadanía en la casa de sus padres, en Encarnación, a 370 kilómetros al sur de Asunción.
La decisión de abandonar la labor clerical, tras 29 años de actividad, ‘no fue fácil, pero no puedo negar que es gozosa’, subrayó.
Una de las prioridades de Lugo es la de encabezar un proyecto multisectorial que apunta a derrotar al Partido Colorado, en el poder desde 1947, en los comicios generales de 2008.
‘Tenemos que poner punto final y definitivo a esta larga historia de exclusión. Es necesario devolver al pueblo toda la soberanía y todo el poder’, aseveró Lugo, que fue obispo de la diócesis de San Pedro (centro), la región más pobre de Paraguay.
Afirmó además que ‘no importa de dónde provengan y qué ideologías tengan, ni a qué partido pertenezcan’ las personas que quieran sumarse a su proyecto político que, a su juicio, ‘buscará consensuar, concertar, construir, y realizar el cambio necesario’ para Paraguay.
Lugo reunió el 29 de marzo pasado a más de 30.000 personas agrupadas en la organización Resistencia Ciudadana en un acto de repudio al presidente de Paraguay, Nicanor Duarte.
Además es el promotor de la Concertación Nacional, que fue conformada en agosto pasado y agrupa a los cinco partidos de la oposición con representación parlamentaria.
Tras recordar su etapa de estudiante y las persecuciones sufridas por su familia por pertenecer a un sector disidente del oficialismo, Lugo exhortó a buscar el consenso entre las diferentes corrientes ideológicas que conforman la Concertación Nacional.
Esta plataforma agrupa a organizaciones independientes, sindicales y de izquierda con el respaldo de las principales fuerzas políticas.
Lugo indicó que aceptó encabezar a esas organizaciones y que se pondrá al ‘servicio del pueblo a través de la política’.
Asimismo, aseveró que ‘Fernando Lugo no tiene ningún compromiso con nadie, el único compromiso que tiene es con la patria, con la nación paraguaya’.
Según un sondeo de hace tres semanas, Lugo sería apoyado por el 24 por ciento de los votantes, frente al 21 por ciento del actual jefe del Estado.
En ese sentido, los dirigentes de la oposición han comenzado a profundizar en los debates sobre los mecanismos que deberán emplear para que Lugo les represente, así como a otros sectores, entre ellos los propios disidentes de la actual dirección oficialista.
Varios dirigentes de la oposición consideraron que fuera de la Concertación no tienen posibilidad de ganar al Partido Colorado, que desde semanas atrás impulsa los mecanismos para incluir una enmienda en la Constitución que permita a Duarte volver a competir en 2008 en las presidenciales.
No obstante, el jefe del Estado dijo el jueves pasado que prácticamente descartaba su intención de llevar a cabo una enmienda constitucional y anunció que más bien encabezaría la lista del Senado en los comicios generales.
El Partido Colorado no cuenta con mayoría en el Parlamento y algunos de sus legisladores, principalmente en la Cámara Alta, se han manifestado en contra de la reelección de Duarte.