La tasa de un euro por receta que entró en vigor el pasado 1 de enero en la Comunidad de Madrid ha recibido miles de insumisiones en la primera semana de aplicación de la medida.
El presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM), Alberto García Romero, ha informado de que los formularios oficiales, que la propia Consejería de Sanidad repartió en las farmacias, se han agotado en un tiempo récord.
«Estamos llegando al límite de la burocracia», ha puntualizado García, quien también ha explicado que «los formularios están hechos para un número mínimo de insumisos, como ocurrió en Cataluña, donde se registraron un total de 4.500 negativas por mes», una cifra que en Madrid se ha superado en solo siete días.