Enviado a la página web de Redes Cristianas
Ante los recientes acontecimientos ocurridos en el país a partir del 23 de enero de 2019, en el cual se intenta desconocer la voluntad del pueblo de Venezuela, las organizaciones y movimientos de derechos humanos queremos expresar al país y al mundo lo siguiente:
DENUNCIAMOS que en la República Bolivariana de Venezuela se está desarrollando un Golpe de Estado con miras a una intervención militar extranjera, promovido por el Gobierno de Estados Unidos –como se observa claramente en los pronunciamientos de los voceros del Departamento de Estado y de su propio Presidente Donald Trump-, simulando un supuesto vacío de poder en el cargo de Presidente de la República, figura que no existe ni en los hechos ni en el derecho, y desconociendo a todos los poderes del Estado venezolano constituidos legítimamente, en ejercicio pleno de la soberanía del pueblo a través de procesos electorales y de los procedimientos constitucionales y legales que prevé el ordenamiento jurídico nacional.
DENUNCIAMOS que la Asamblea Nacional, desde el año 2016, mediante múltiples
actuaciones, proyectos de leyes y acuerdos, ha incurrido en la violación sistemática del orden
constitucional, vigente desde 1999, desconociendo la institucionalidad democrática en el país
y, actualmente, usurpando las funciones exclusivas y excluyentes del Presidente de la
República, lo cual viola de manera flagrante la voluntad popular que se expresó mediante
voto directo y secreto durante las elecciones desarrolladas el 20 de mayo de 2018, en las cuales
resultó reelecto el ciudadano Nicolás Maduro Moros, para el período 2109-2025, con el 67.84%
de los votos válidos que representan un universo de 6.248.864 votos a su favor y con un
restante de 2.960.913 de votos distribuidos entre tres reconocidos candidatos de partidos
políticos de la oposición venezolana.
ADVERTIMOS que las acciones de diputados de la Asamblea Nacional, actualmente en
desacato, en connivencia con gobiernos extranjeros, podrían desencadenar un
enfrentamiento civil entre venezolanos y generar las condiciones para una intervención
militar extranjera, ya anunciada por los diferentes voceros políticos de Estados Unidos y
países colaboradores, lo cual traería la muerte, la desolación y el caos a toda la región. El
registro de las intervenciones militares de Estados Unidos en Irak, Libia, Afganistán, Siria,
Haití, entre otros, solo ha demostrado la perversidad de los intereses que mueven tales
injerencias y el devastador resultado en violaciones a los Derechos Humanos,
desplazamientos masivos de familias, y quiebre absoluto del Estado que se hace ingobernable
por décadas sin posibilidad de curar las heridas sociales, económicas, culturales y políticas
en esos países.
RESPONSABILIZAMOS al Gobierno de Estados Unidos de Norteamérica y los gobiernos
colaboradores del mismo, por los resultados de la agresión económica, política y
comunicacional contra nuestro país, violando el Derecho internacional, la Carta Fundacional
de las Naciones Unidas, los instrumentos internacionales de Derechos Humanos y los más
emblemáticos criterios jurídicos y éticos de la humanidad.
EXHORTAMOS a la comunidad internacional, la Asamblea General, el Consejo de Derechos
Humanos y la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos de la
Organización de las Naciones Unidas; al Papa Francisco, a los diferentes organismos e
instituciones que promueven los Derechos Humanos, y a las organizaciones y movimientos
de derechos humanos; a condenar las amenazas militares contra Venezuela y rechazar el
Golpe de Estado que está en proceso en el país, a fin de prevenir la violación masiva de los
derechos humanos de nuestro pueblo.
LLAMAMOS a las organizaciones y movimientos de derechos humanos del mundo, grupos
religiosos y ecuménicos; especialmente a aquellos hermanos y hermanas que hacen vida en
los países que hoy participan en esta agresión, para que sigan levantando su voz de condena
y repudio en contra de las medidas coercitivas unilaterales que hoy llevan a cabo Estados
Unidos y los gobiernos colaboradores, que pretenden coaccionar al Estado venezolano, a fin
de subordinarlo en el ejercicio de sus derechos soberanos y provocar algún cambio concreto
en su política.
Si quieres la paz, trabaja por la justicia
En Venezuela a los 30 días del mes de enero del 2019
Firman:
Fundalatin
Idhes
Venezuela Propositiva
