El Comité Ejecutivo del Consejo Mundial de la Paz concluyó sus reuniones del 19 y 20 de mayo de 2006 en Brasilia, por primera vez, después de décadas en América del Sur. El día anterior tuvo lugar en la Cámara de Diputados de Brasil, un Seminario Internacional auspiciado por Cebrapaz, en el cual un conjunto de diputados brasileños y 20 invitados extranjeros de 13 países analizaron la situación mundial y la necesidad de afianzar la lucha por la paz, contra de la guerra, la ocupación y la dominación imperialista.
Después de un fructífero y enriquecedor debate relativo a la agenda del Comité Ejecutivo, y los principales rasgos de la situación mundial, incluyendo el creciente movimiento antibélico y sus acciones en todo el mundo así como las nuevas amenazas y peligros para la paz, el Comité Ejecutivo acordó e hizo pública la siguiente declaración:
La reunión del Comité Ejecutivo del CMP, en Brasil, constituye un momento especial en la historia de nuestra organización, que tiene lugar cuando esta región, América Latina, se ve agitada por grandes contradicciones.
Por un lado, la agresividad imperialista se acelera e intensifica, creando serias amenazas a nuestro planeta. Y, al mismo tiempo, los movimientos populares antibélicos crecen masivamente en todo el mundo.
El CMP saluda hoy los acontecimientos que se desarrollan en este continente, donde las ideas esenciales del progreso y la paz se abren paso y vencen en Latinoamérica, en Cuba, en Venezuela, en Bolivia, países donde, desafiando la amenaza imperialista, se exploran y recorren nuevas sendas para el bienestar de los pueblos.
El CMP reconoce también los esfuerzos de Brasil, en la defensa de la paz mundial y la integración latinoamericana.
El CMP reitera sus exigencias por el levantamiento del bloqueo de EEUU contra de Cuba y por la liberación de los cinco prisioneros políticos cubanos retenidos en las cárceles estadounidenses.
Esta realidad también se manifiesta en el creciente movimiento popular en toda Latinoamérica, y se ha puesto en evidencia en ocasión de las masivas demostraciones que tuvieron lugar tanto en la III Cumbre de los Pueblos de América (Mar del Plata, Argentina, noviembre de 2005) como en el VI Foro Social Mundial (Caracas, Venezuela, enero de 2006).
La atención de la humanidad se concentra, en estos días, en Irán, cuya situación no podemos analizar al margen de los acontecimientos mundiales. Ella se vincula, en gran medida, con la política imperialista en general, especialmente por parte de EEUU, que de múltiples formas está tratando de imponer la dominación global, para controlar los recursos del planeta y reprimir a todo país o población que ofrezca resistencia.
Los sucesos de estos días recuerdan, hasta cierto punto, la situación previa a la guerra contra Irak. Una campaña propagandística es desplegada para cooptar a la opinión pública y justificar una nueva guerra. La tarea inmediata y esencial de los movimientos por la paz, del conjunto de los movimientos populares y naturalmente, del Consejo Mundial de la Paz, es denunciar y movilizar a los pueblos contra la política de la ?guerra preventiva??, actividad estrechamente vinculada a la exigencia del retiro inmediato de todas las fuerzas de ocupación de Irak, Afganistán y Palestina. Co El CMP expresa su esperanza en que las manifestaciones del movimiento antibélico puedan presionar a los gobiernos y detener la guerra.
Actualmente, resulta cada vez más imperioso denunciar y combatir el chantaje nuclear y las amenazas del gobierno estadounidense y sus aliados ?los que quieren presentarse como protectores de la humanidad ante el peligro nuclear- pero que en realidad constituyen el principal peligro nuclear y de concretarse sus amenazas llevarían al planeta a un desastre total de consecuencias imprevisibles. El CMP reitera sus exigencias por la abolición de todas las armas nucleares y por detener la creación de nuevas armas de destrucción masiva.
El CMP denuncia que Estados Unidos está tratando de utilizar a las Naciones Unidas como un instrumento para legitimar sus planes de dominación. Sin embargo, encuentra para ello dificultades y contradicciones. Y en los casos donde Washington no puede imponer su voluntad sobre Naciones Unidas, aparecen los ?aliados voluntariosos??, dispuestos a apoyar la violación del Derecho Internacional y de los principios de Naciones Unidas.
El CMP señala la urgencia de combatir los planes para incorporar a la OTAN dentro del sistema de Naciones Unidas, con lo cual se pretende pasar por alto todos los delitos e intervenciones de la organización que constituye la mayor maquinaria bélica mundial. El CMP promoverá una campaña para convocar masivamente a las fuerzas dispuestas a luchar contra la guerra y por un orden mundial de paz y justicia basado en los principios de la carta fundacional de las Naciones Unidas.
Al mismo tiempo, damos testimonio de una posterior militarización de la Unión Europea, mientras que las principales fuerzas están compitiendo con otras fuerzas imperialistas por el control de los mercados y de los recursos en todo el mundo. En total desacuerdo con la voluntad de los pueblos de Europa, el contenido reaccionario de la ?constitución de la Unión Europea?? se está aplicando paso a paso en todas las esferas de la vida, a pesar del ?NO?? en los referendums realizados en Francia y Holanda.
El CMP afianzará su cooperación con otros movimientos sociales que se oponen a las políticas neoliberales. Denuncia la política de privatizaciones generalizadas y la desregulación de servicios que son promovidas para favorecer el mayor saqueo de la riqueza social por parte de las corporaciones multinacionales. Las acciones e iniciativas para lograr recortes en los presupuestos militares se están tornando cada vez más importantes como un terreno común para los movimientos y sociales y antibélicos.
Asimismo, Estados Unidos y sus aliados están desafiando la voluntad de los pueblos que se expresa a través de elecciones o referendums. El CMP denuncia todas las intervenciones militares extranjeras tales como en Palestina, Bielorrusia, Chipre y Zimbabwe, así como la prohibición de los líderes y funcionarios estatales electos para viajar al exterior.
África es hoy objeto de una nueva interferencia económica y política y la explotación por parte de ex gobernantes y neo-colonialistas, cuyo propósito es el saqueo de los recursos y, al mismo tiempo, la base para la distribución de nuevos mercados. El CMP denuncia la imposición imperialista de sanciones económicas en países que no cumplen el deseo de los poderosos con el pretexto de falta de democracia, violación de ?derechos humanos?? y reafirma el derecho soberano de cada pueblo a su autodeterminación. En este contexto, exigimos el levantamiento de las sanciones económicas por parte de Estados Unidos y de la Unión Europea en contra del pueblo de Zimbabwe y de sus derechos para determinar su propio futuro.
El CMP observa con preocupación el deterioro de a situación en Sudán y manifiesta su apoyo a una solución pacífica sin ninguna intervención militar extranjera.
Este organismo saluda al pueblo de Angola por el logro de la paz y convoca a apoyar la consolidación y reconstrucción de ese país hermano.
El CMP apoya la reunificación pacífica e independiente de la península de Corea y expresa su solidaridad con el pueblo coreano en su lucha contra la presencia de las tropas estadounidenses en su territorio. El CMP se opone firmemente a la integración de Japón en los planos militares estratégicos de EEUU y la puesta en vigencia de las bases norteamericanas en el país.
El Comité Ejecutivo del CMP manifiesta su profunda solidaridad con el pueblo Palestino, víctima de la ocupación israelí, que es tolerada y apoyada por Occidente. Reiteramos nuestro apoyo a la única y razonable solución del conflicto con la creación del estado independiente de Palestina tal como fue establecido en junio de 1967 y con Jerusalem Oriental como capital. Exigimos la retirada completa de las tropas israelíes y la liberación de todos los prisioneros políticos.
El CMP compromete su actividad para acrecentar los esfuerzos coordinados por la eliminación de todas las bases militares extranjeras, lo cual representa una violación de la soberanía de los países donde estén localizados y una amenaza cotidiana para los pueblos de la respectiva región.. Denunciamos, además, los ejercicios militares conjuntos dirigidos por Estados Unidos en distintas partes del mundo.
A pesar de las tendencias negativas que denunciamos, el CMP ratifica su fuerte voluntad de luchar contra las fuerzas de la guerra. Y mira el futuro con esperanza y optimismo pues la conciencia de los pueblos está creciendo junto con el convencimiento de que la vida y no la muerte debe ser el porvenir de la humanidad.
Trabajamos por crear un mundo pacífico y justo sin guerras, ni armas nucleares y dominación imperialista. La lucha de los pueblos en cada uno y en todos los países, en cada región y continente, y articulada a nivel internacional puede habilitar y habilitará nuevos caminos para la paz y una vida mejor para la vasta mayoría de la humanidad.
El Consejo Mundial de la Paz contribuirá enérgicamente en ese sentido.