El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, ha felicitado hoy al nuevo presidente de la Conferencia Episcopal, al cardenal Arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, y ha deseado que busque el diálogo y no la confrontación con el Gobierno. «?l sabrá lo que tiene que hacer en todo caso», ha dicho Blanco en un encuentro con periodistas para analizar la evolución de la campaña electoral antes de los comicios del próximo domingo. Blanco ha confiado en que Rouco Varela «gobierne la Iglesia con acierto» y que «trabaje para tener más seguidores».
A su juicio, su elección no tendrá influencia alguna en la campaña. «Que yo sepa, no se presenta a las elecciones, aunque por lo que ha dicho podría haber ido en alguna candidatura», ha ironizado.
Por su parte, la cabeza de lista del PSC por Barcelona, Carme Chacón, ha considerado hoy que la elección del cardenal y arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco es la «palpable demostración» de la «radicalización de parte de la Iglesia».
«Creo que no es una buena noticia para la sociedad ni para Catalunya», ha afirmado la candidata del PSC a preguntas de los periodistas tras visitar la escuela de educación especial Paideia de Barcelona.
Según Chacón, esta designación «consolida lo que hemos estado viviendo estos cuatro años: la radicalización, el extremismo, el centralismo e incluso la politización que parte de la jerarquía eclesiástica ha ejercido en esta legislatura».
El cabeza de lista de CiU al Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, ha felicitado a Rouco Varela aunque ha admitido que no era su candidato preferido para el cargo. Duran ha expresado su «respeto» por una designación que «desafortunadamente se veía venir».
«Hay otras líneas de la Conferencia Episcopal que me gustan mucho más, me siento más identificado con otras personas, pero felicito al nuevo presidente y me remito a los obispos catalanes, que es mi punto de referencia», ha comentado.
Más allá ha ido el candidato de ICV-EUiA por Barcelona en las generales, Joan Herrera, que ha asegurado hoy que la elección de Rouco Varela es una «pésima noticia para los cristianos de base» y para aquellos que quieren ser «más libres».
Herrera, en un acto electoral en Molins de Rei (Barcelona), ha afirmado que Rouco Varela ha sido escogido «jefe» de la jerarquía eclesiástica «más salvaje», «carca», «de derechas» y «alejada del evangelio» que existe en Europa.
Una Iglesia, ha añadido el candidato ecosocialista, que «se quiere meter en la vida de la gente» y que «nada tiene que ver» con los cristianos de base.
Herrera ha criticado, especialmente, que la Iglesia continúe manteniendo privilegios en un Estado laico y aconfesional y que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero no haya sido «valiente» para «parar los pies» a esta jerarquía.
En este sentido, Herrera ha afirmado que «hace falta un Gobierno más valiente» que derogue los acuerdos con la Santa Sede, lo que pasa, inevitablemente, por una mayor presencia de ICV-EUiA en el Congreso.
Por su parte, el PNV ha calificado la elección de Rouco como un «paso atrás» que representa a una Iglesia próxima al PP «más rancio».
El presidente del Euzkadi Buru Batzar (EBB) del PNV, Iñigo Urkullu, afirmó hoy, en la localidad vizcaína de Muskiz, que la elección es «consecuencia de un trienio de trabajo de los sectores más conservadores» de la Iglesia. Además, interpretó que la Iglesia da «un paso atrás» porque se dirige desde «la élite» con intención de «influir políticamente». Urkullu lamentó la «paradoja» que, a su juicio, supone que «la estructura de la Iglesia Católica no se adecúe al siglo XXI» porque, su sistema de elección «está hecho por jerarquía». «Esto nos lleva a pensar que la Iglesia está dando un paso atrás, porque está dirigida desde la élite, mirando por su capacidad de influir políticamente», dijo.
El candidato del PNV al Senado por Vizcaya Iñaki Anasagasti ha lamentado también la designación de Rouco, al que considera como «el clásico obispo carca de ‘Los gozos y las sombras'», representa a una «Iglesia periclitada» y próxima «al sector más rancio del PP».
El ya senador en la recién concluida legislatura destacó que «es una lástima» que el sucesor de Ricardo Blázquez sea una de las personas «más vinculadas a la ‘cruzada’ y a una jerarquía eclesiástica que tiene muy poco que ver con el mensaje evangélico de acercamiento a los pobres y al amor fraterno».
«Dicen que Dios escribe derecho con los renglones torcidos, pero estos están tan torcidos que ya es muy difícil enderezar la cosa», comentó Anasagasti, quien insistió en que Rouco representa a una Iglesia «periclitada» que «no tiene nada que ver con el futuro». «Si no se ponen las pilas que se van a quedar sin clientela», agregó, pronosticando que, con su nuevo presidente, la Conferencia Episcopal se «alejará aún más de los fieles».