¿Y la jerarquía de la iglesia católica está implicada en la corrupción de Honduras? -- Rodolfo Cortés

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Enviado a la página web de Redes Cristianas

La corrupción en Honduras esta diseminada como metástasis en todo el cuerpo social, político, gremial, militar, empresarial y hasta eclesiástico. Es una malignidad oncológica que recae en la endeble espalda y economía de los empobrecidos, de los trabajadores, de los que se afanan por llevar día a día un bocado a su casa; en la asfixiada clase media que ya no soporta tanto impuesto, mientras otros, el gobierno y sus compinches de manera descarada saquean las arcas del Estado con la complicidad de los siete partidos de Honduras, ya que no hay uno tan solo donde pueda remirarse con primor el pueblo. Todos, a nivel de las altas dirigencias, son sinvergüenzas, los minúsculos, los medianos y los jurásicos momificados.

De este cáncer nadie se escapa, ni aquellos que se consideran ?salvadores de almas?? que no son más que negociadores burdos del mero Luzbel imperial, de las jerarquías de las iglesias católica, protestante y evangélica de Honduras.
En el programa Comentando la Noticia de Radio y TV Globo de fecha 06 pp. el Director de Noticias, abogado y periodista DAVID ROMERO ELLNER, presentó una denuncia de supuesta corrupción realizada con fondos del Estado a favor de la Iglesia Católica de Honduras que compromete al cardenal ?SCAR ANDR?S RODRÍGUEZ MARADIAGA.

Según el afamado periodista que documentó la denuncia, la iglesia Católica de Honduras, presumiblemente de manos del cardenal Rodríguez recibió la sumita de más de MIL QUINIENTOS MILLONES DE LEMPIRAS (L. 1,500.000.000.00) para el montaje de una Radio y Televisora, compra de equipos y pago de planilla para el funcionamiento de estos medios. Ya antes, para el golpe de Estado se difundió otra noticia que este clérigo recibía desde el gobierno de CARLOS ROBERTO FLORES FACUSS? la pequeña cantidad de CIEN MIL LEMPIRAS MENSUALES ( L. 100,000.00), la pregunta obligada es ¿ a cambio de qué?

Pero que los pastores fundamentalistas como EVELIO REYES y otros no se consideren salvos y libres de pecado, esta familia está coludida con JOH y son cómplices de muchas situaciones irregulares en Lempira, según informaciones que han circulado a nivel nacional. Estos son, según los indignados de las redes sociales algunos de los versos que encabezan el salmo de estos mercaderes religiosos: ?EL NEGOCIO ES MI SE?OR, NADA ME FALTARÁ??

¡Cuánto bien harían estos millones de Lempiras a las comunidades tolupanes, garífunas, misquitas, lencas, chortís, etc. en vez de mantener la actitud ególatra y mezquina de unos pocos clérigos!
Mientras esto sucede los enfermos rurales y periféricos de las ciudades no encuentran una sola pastilla para sus males, todos los centros de salud y hospitales están desabastecidos. La falta de equipo y personal médico es escandalosa. Las escuelas no tienen ni merienda, ni sillas para sentarse, mucho menos material didáctico que lo tienen que financiar los maestros. No hay créditos para el sector campesino que urge apoyo para producir alimentos para este desabastecido país, mucho menos seguros para la producción o subsidios como sucede en otros países. Los pequeños microempresarios están abandonados y quebrados y millones de jóvenes desempleados y sin futuro.

La Constitución de Honduras, aunque muy prostituida por el bipartidismo, establece que el Estado de Honduras es laico. Según el diccionario de la RAE, Laico significa: Que no tiene órdenes clericales/ Independiente de cualquier organización o confesión religiosa. Pero, durante los últimos gobiernos desde ROSUCO, el de ?la Virgen del Perpetuo Socorro??, hasta JUANCHO el de ?Honduras está cambiando y caiga quien caiga??, utilizan las religiones para embrutecer más al pueblo y castrarle el espíritu de lucha. Estos mercaderes del diezmo y de la limosna hacen de la fe el mejor negocio en nombre de Dios, principalmente a través de los medios radiofónicos o televisivos que invaden Honduras, peor que las ?siete plagas de Egipto??, por medio de los cuales ideologizan e imponen el sistema neoliberal corrupto e impune.

La Conferencia Episcopal de Honduras (CEH) o el Nuncio Apostólico del Vaticano en Honduras, están en la obligación de aclarar e informar al respecto.
Somos cristianos católicos y respetamos nuestra fe, pero estos actos de corrupción de supuestos pastores y obispos nos ofenden, difaman la doctrina del humilde carpintero de Nazaret y el pensamiento del obispo FRANCISCO de Roma, líder del catolicismo y también deben ser investigados por la CICIH.
11 de julio 2015.