La asociación Droit au Logement fue condenada a 12.000 euros de multa por haber instalado un campamento de personas sin techo en una calle, en pleno corazón de París. Se produjeron impedimentos para la circulación en la vía pública. Acaba de celebrarse el juicio en apelación.
Citado como testigo, me encuentro en una sala atestada porque los militantes de la asociación vinieron numerosos. El Presidente es condescendiente conmigo y me da la palabra.
« Hace 20 años que la asociación existe, hicimos campamentos a menudo para alojar a las familias en la calle. »
Cito el ejemplo del campamento del Quai de la Gare en 1991 donde habíamos alojado a 37 familias. Recuerdo la visita del Abbé Pierre a las familias en pleno mes de julio, hacía muchísimo calor.
« En estos 20 años, hemos llevado a cabo luchas que considero justas y dignas. Miles de familias han podido encontrar una vivienda. »
« En estos 20 años, vivimos auténticos hitos. » Cito la ocupación del edificio vacío de la Calle Dragon en el centro de París. ¡Fue todo un acontecimiento!
«Es la primera vez, en 20 años, que la asociación es condenada.»
Manifiesto mi sorpresa:
« ¿Cómo se puede sancionar una asociación que ayuda a las familias que no tienen vivienda? La opinión pública no se ha engañado. No lo ha entendido.
Si los responsables, tal y como se habían comprometido a hacerlo, hubieran dado viviendas a las familias, no se habría necesitado poner tiendas en la calle. »
El Presidente me dice amablemente: « Puede elegir quedarse en la sala o salir. ¡Es Vd. libre! » Risas del auditorio.
La defensa pide la libre absolución. Visto para sentencia.