Enviado a la página web de Redes Cristianas
Teniendo en cuenta el respeto que el papa Francisco dice tener por los homosexuales, es posible que, en estos momentos, esté arrepentido de haber nombrado cardenal al arzobispo emérito de Pamplona, Fernando Sebastián. Y es que, al parecer, este flamante cardenal está convencido de que la homosexualidad es una deficiencia que se puede corregir con un buen tratamiento.
No acabo de comprender a qué tratamiento se refiere Su Eminencia, pero, con todos los respetos, siguiendo su misma lógica, y visto desde un punto de vista neutral, yo también me siento legitimado para decirle a usted que, su deficiencia empática, y su exceso de dogmatismo y paternalismo, también se podrían corregir con un buen tratamiento. Tratamiento que, por otra parte, ustedes no parecen encontrar para la pederastia.
. Valladolid