La llamada revolución de 1848 acababa de concluir. En el convulso París de mediados del XIX se estaba a las puertas de lograr una de las primeras conquistas obreras generalizadas: la jornada laboral de 12 horas para mujeres, hombres… y niños. Deberíamos esperar algo más, hasta 1919, en el caso español hasta 1936, y al Gobierno de Léon Blum en el caso francés, para que la actual jornada laboral de 8 horas se fuera generalizando a golpe de huelgas sangrientamente reprimidas. Y después, nada. ··· Ver noticia ···
Trabajo no es dignidad -- Miguel García Duch, Investigador del Instituto Complutense de Estudios Internacionales y miembro de econoNuestra
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