Desde sus orígenes el proceso bolivariano fue identificado por Washington como una excrecencia que debía ser rápidamente removida del hemisferio. Intentó por todos los medios pero nada resultó: ni el golpe de estado, ni el paro petrolero, ni el acoso diplomático, político y mediático rindieron sus frutos. En el terreno electoral el predominio de Chávez era aplastante: resistía a pie firme los embates y su pueblo lo seguía con entusiasmo. ··· Ver noticia ···
Registrarse
¡Bienvenido! Ingresa en tu cuenta
¿Olvidaste tu contraseña? consigue ayuda
Recuperación de contraseña
Recupera tu contraseña
Se te ha enviado una contraseña por correo electrónico.