Los animos en Valencia estan caldeados. Los ciudadanos de la ciudad levantina acumulan molestias y criticas a la gestion de la visita, independientemente de la religión.
Los elementos que mas estan molestando a la ciudadania son, principalmente, el desmesurado gasto de la visita, el «despilfarro de nuestros gobernantes para hacerse publicidad y conseguir cosas que han intentado en repetidas, y fallidas, ocasiones». Despilfarro que, al parecer superara ampliamente el presupuesto inicial de 60 millones de euros. Como comparacion, las jornadas de familias diversas, organizadas por Lambda unos dias antes tienen del estado un presupuesto de 17000 €, unas 3500 veces inferior.
Dicho colectivo, ademas, critica las fechas de la visita, coincidentes con el tradicional orgullo gay en valencia, en el resto del estado, y en el resto del mundo, por que el 28 de junio se conmemora la revuelta homosexual y transexual de Stonewall, algo que el papa «conoce muy bien». Ademas, critican los articulos en los que el ABC, en un giro argumental, acusó al colectivo Lambda de elegir las fechas del orgullo gay para coincidir con la visita de Ratzinger.
Pero las criticas al dispendio no solo llegan de grupos homosexuales, de izquierdas o ateos, sino que muchos grupos catolicos se preguntan si el gasto no esta siendo excesivo y todo ese dinero no podria ser usado en obras mas necesarias.
Otra de las criticas fundamentales a la visita es que el ayuntamiento de la ciudad haya cortado durante mas de dos meses uno de los puentes principales de la ciudad, puente por el que circulan mas de 75000 vehiculos diarios. Y todo esto agravado por que las obras del puente alternativo que hubiese servido para aliviar el trafico estan paradas.
El simbolismo tambien molesta a los ciudadanos. El escenario con microclima para la actuacion del papa (800000€) esta situado en el corazon de la ciudad de las artes y las ciencias. Como parte del espectaculo se instalara en el una cruz de 30m de altura, en un primer momento provisional, pero que se especula hacer permanente.
Y es que ademas de la visita en si, los ciudadanos se quejan de que la cadena valenciana de television, canal 9, es un «continuo programa de propaganda de la visita», gracias al cual los valencianos sabemos «donde le hacen los vestidos de seda al papa, de donde saldran las formas sagradas para la comunion, quien fabrica las rosas con el rostro del papa, y las telas que «engalanaran» valencia, cual es la cancion oficial de la visita…»
Añadiendose a las molestias del trafico, los ciudadanos y colectivos critican que durante la visita de Ratzinger a pesar de que el centro estara cerrado al trafico, no habra transporte publico, dejando como unica posibilidad la visita a los actos de Ratzinger. Los trabajadores del metro, por ello y por pretender forzarles a trabajar esos dias las 24 horas, sin mas personal, han decidido amenzara con ir a la huelga. Un problema mas de la visita.
Y si las criticas de grupos ultrareligiosos a la campaña «yo no te espero» existen, no es menos cierto que los ciudadanos de a pie estan molestos por el gasto desmesurado que el ayuntamiento ha hecho en banderas del estado vaticano y murales de Joseph Ratzinger. Y lo expresan hasta tal punto que la mayor parte de las mismas exiben pintadas, destrozos e incluso escupitajos.
Por si todo esto no fuera poco, debido a la visita del ex mandatario de la comision para la doctrina de la fe, la policia local esta visitando a los quiosqueros para advertirles que retiren los desnudos e imagenes eroticas de sus escaparates, bajo pena de multa, multa que cinco de ellos ya han recibido por negarse a retirarlos. Esta decision consistorial ha dado alas a los grupos ultra religiosos. Se sabe que ciudadanos individuales amenazan con denuncias a los quioscos que no retiran los desnudos de sus escaparates, imponiendo asi, de facto, una forma de fundamentalismo catolico.
Y prosiguiendo en la misma linea, el ayuntamiento de Valencia ha añadido 1000 camaras de vigilancia por toda la ciudad, medida que la alcadesa Rita llevaba tiempo queriendo imponer y que gracias a la visita ha logrado materializar.
Una critica adicional de los ciudadanos es que la mayoria de centros culturales y de deportes municipales de valencia y pueblos de alrededor, estaran disponibles esos dias para el arzobispado, para que coloque a los peregrinos. Los trabajadores de estos centros, en su mayor parte autonomos, no cobraran esos dias.
Se espere o no se espere a Ratzinger, la visita promete ser polemica como pocas.
