Oxfam Francia, Secours Catholique-Cáritas Francia y el colectivo Eurac (Red europea de ONG para el África central) hizo un llamamiento el miércoles en una rueda de prensa en París pidiendo el despliegue rápido de una fuerza europea en la República Democrática del Congo (RDC).
“La intervención de una fuerza europea constituye una verdadera urgencia ya que la población congoleña no puede esperar varios meses el despliegue de tropas suplementarias” en el marco de la Misión de la ONU en RDC (Monuc), declaró Michel Roy, director del “plaidoyer” internacional de Secours Catholique. “Es una prioridad”, aseguró, lamentando que “la Presidencia de la República Francesa haya excluido definitivamente la participación francesa en una fuerza de intervención”.
“Las fuerzas francesas en el extranjero, son hoy día sólo para Afganistán mientras que la RDC está viviendo actualmente una de las principales crisis del planeta”. Los combates que reanudaron hacia finales de agosto en el Nord-Kivu entre los rebeldes del ex general Laurent Nkunda (apoyado por Ruanda, según la ONU) y el ejército regular, aliado con distintas milicias. Alrededor de 250.000 personas han sido desplazadas por estos combates.
Mientras que la Monuc tiene « un problema de eficacia y de credibilidad », con una total desconfianza por parte de la población” subrayó Kris Berwouts, director de Eurac, “una fuerza de estabilización europea sería la mejor manera de dar seguridad a los congoleños, proteger el proceso de paz y tener un verdadero efecto de disuasión”.
Para Nicolas Vercken, de Oxfam Francia-Actuar Aquí, este compromiso europeo ería también “una señal política fuerte enviada a las poblaciones y a los beligerantes”.
Mn. Fridolon Ambongo, presidente de la comisión episcopal de Justicia y Paz de la RDC, que está efectuando un viaje por los EEUU, Canadá, Bélgica, Gran Bretaña y Francia, también ha pedido, en la rueda de prensa que se despliegue “lo antes posible una fuerza occidental de pacificación con la misión de dar seguridad a la población y permitir a los desplazados regresar a sus tierras.”
El obispo ha insistido también en que es necesario “ayudar a solucionar el problema de las FDLR” (rebeldes hutu de Ruanda, con responsabilidad en el genocidio de 1994) cuya presencia en la RDC “es utilizada por excusa por Ruanda”, y ha deseado que hubiera presiones internacionales sobre Kigali. “La Monuc está desacreditada”, añadió. Y el ejército congoleño, “simplemente no existe” y constituye “un conjunto de incompetentes y vagabundos que sólo saben disparar sobre los civiles”
La comisión episcopal reclama igualmente la organización de una conferencia internacional sobre la explotación pacífica de los recursos naturales” de la RDC. Esto sería, dijo el obispo, para definir un “marco legal” para ka explotación de las riquezas minera que hasta ahora sólo han sido “fuente de sufrimiento para el pueblo congoleño” y que constituyen el “nudo del conflicto”.
AFP