El Apocalipsis ha dejado de ser una mera referencia bíblica para convertirse en una posibilidad muy real. Nunca antes en el acontecer humano se nos había colocado tan al límite, entre la catástrofe y la supervivencia”. Javier Pérez de Cuéllar
Montevideo, 23 de junio de 2010 –
Estamos ante una crisis, que tiene tres cabezas…la ambiental, la económica y la alimentaria…Ante el mantenimiento del sistema capitalista…con todo su ordenamiento estructural y dinámicas que van desde lo cultural a lo económico, de lo social a los modelos filosóficos, desde el “ordenamiento” de las categorías del pensamiento, hasta la ciencia…y en todo ello manipulando el concepto de realidad, alienando la percepción de la misma a multitudes…cientos de millones de seres humanos…
Pero la realidad pura y dura se revela ante el modelo, que es todo él una falacia, y muestra que el camino del capitalismo lleva en si no sólo la semilla de su propia destrucción, sino, y en vertiginoso crecimiento, el árbol del aniquilamiento de buena parte de la especie…
Al tomar conocimiento publico el desesperado estado de los ecosistemas del planeta, plagado, por la manipulación criminal de las grandes multinacionales, adalides del capitalismo neoliberal, que tanto defiende las potencias, se ha lanzado con gran existo, una serie de iniciativas comercializables sobre como salvar a grupos limitados de personas de la catástrofe ambiental…El ecosistema artificial, con bóveda…que lo aísla, el refugio nuclear, con reservas de comida y agua para largos períodos, pero ninguna ha tenido los efectos deseados…Ser un refugio seguro para las clases dominantes, en este esquema se han empezado a manejar soluciones globales, que claro, intenta compadecerse de los efectos más inmediatos y adversos, tratando de trasladar los efectos colaterales digamos que lejos de sus territorios…
Esta tendencia, viene acompañada por una nueva filosofía política, que en realidad ya subyace en buena parte de las decisiones que los poderosos del mundo toman y que sin su participación define la vida de miles de millones…y esto es lo que llaman poner una pausa en la democracia…
Pero en este caso, ya no son “dirigentes” políticos, sino científicos y capitalistas que se abrogan el papel de decidir por los habitantes del planeta nada menos, con técnicas que influirán sobre el clima y el medio ambiente global, que tal vez en primera instancia perjudique más a una zona que a otra, pero que finalmente se extenderá por todo el planeta…Esta tendencia es incluso más peligrosa para la democracia y la justicia que la represento para la humanidad el nacional socialismo alemán…
Por suerte los pueblos movilizados, han logrado poner algunas…aún débiles salvaguardas es el pedido de moratoria de Nairobi a la ONU… Se debe lograr en el ámbito internacional que este tipo de técnicas experimentales no pueda ser aplicada y se considere un delito de lesa humanidad…el hacerlo, sin el control de las Naciones Unidas…Control al que debe estar integradas las organizaciones de científicos críticos, de las naciones indoamericanas y el campesinado en general y de la sociedad civil…
Nadie quiere que le oscurezcan el sol…atentando contra la salud y la vida de todo lo orgánico en el planeta, soslayando la voluntad de los pueblos, es por eso que hoy más que nunca es necesario crear una agenda mundial de los movimientos populares, sociales y de las organizaciones de la sociedad civil sobre estos temas.-
(Información recibida de la Red Mundial de Comunidades Eclesiales de Base)
