Con ocasión de los 10 años de encarcelamiento del líder kurdo Ocalan, se celebró una concentración de unos 30.000 kurdos en Estrasburgo
Ocalan, mi hermano,
Tú eres quien nos reúnes hoy.
¿Quién podría reunirnos además de ti?
Estamos aquí para ti.
¡10 años!??10 años de separación, de sufrimientos y pruebas.
Pero tú has sabido salvar tu dignidad.
A pesar de los malos tratos, nadie pudo robarte tu dignidad.
La dignidad es parte de ti. Te pertenece.
Ocalan mi hermano,
Por miles y miles, hemos llegado a Estrasburgo.
Esta multitud inmensa ha venido a demostrarte su cariño.
Los brazos se alzan para levantar tu retrato que nos resulta tan familiar.
Basta con pronunciar tu nombre para que ardan los corazones y brote un gran clamor.
El rumor de tu pueblo de dignidad rebelde llegará a la isla Imrali,
y nuestros cantos de victoria atravesarán los gruesos muros de tu prisión.
¡10 años!… 10 años de espera, de luchas, de concentraciones.
El tiempo no pudo borrar nuestra memoria.
Los niños pequeños sólo te conocieron encarcelado.
Pero tu rostro es familiar para ellos y tu nombre en sus labios.
Sueñan con poder liberarte un día.
Ocalan mi hermano,
No te olvidamos.
Formas parte de nuestra alma y de nuestra carne.
Estás en nuestros corazones.
Si tú eres maltratado, nosotros somos heridos
Si tú eres humillado, nosotros sufrimos contigo.
Si tú eres amenazado, pasamos miedo por ti.
Tu terrible soledad nos resulta insoportable.
(Principio de la intervención de Jacques Gaillot en Estrasburgo)