El Obispo de Aysén; Monseñor Luis Infanti, expresó en una Eucaristía celebrada en la Catedral, un abierto respaldo a la movilización Ciudadana local. Advirtió que urge dar una solución a las justas demandas ya que la paciencia de la gente tiene un límite…
«Hasta ahora las autoridades no han escuchado adecuadamente, quizás por cierto orgullo, quizás por otros proyectos», pero «la voz del pueblo es también una expresión de la voz de Dios, una voz profética», y en este sentido «es bueno que se escuche al pueblo de Aysén con urgencia», dijo el Obispo.
«Yo espero que haya mayor y mejor respuesta de la que ha habido hasta ahora; ojalá pronto, porque la paciencia de un pueblo también tiene sus límites», advirtió el religioso, que en el pasado ha apoyado también otras movilizaciones sociales, como la de oposición al megaproyecto a HidroAysén.
En esta ocasión, Monseñor Infanti opinó además que la violencia que se ha registrado en la zona en los últimos días «no la generan los ayseninos», sino la política privatizadora que rige al país, y que excluye a muchas personas de los bienes necesarios para la vida, como en el caso del agua.
En apoyo a manifestante herido por Carabineros
Al oficio religioso asistieron dirigentes de la mesa social de Aysén y miembros de la familia de Teófilo Haro, manifestante que perdió un ojo durante un enfrentamiento con Carabineros.
La colecta de la misa fue destinada, de hecho, a los familiares, quienes tienen pensado trasladarse próximamente a Santiago a ver al hombre, quien fue derivado a la capital en virtud de la gravedad de sus lesiones.
Haro, de 49 años, es padre de tres hijos y trabaja como mecánico. Según su denuncia, su estado actual responde a un ataque deliberado de un Carabinero, quien tras dispararle huyó dejándolo abandonado y herido.
Relató que él estaba ayer viernes participando en la toma de un puente, que «estaba el guanaco y habían dos carabineros más, y yo llegué y me tiré a cruzar el puente cortado, pensando que no me iba a pasar esto».
«Justo en eso sale un Carabinero detras de un árbol, estaba escondido, y el primer disparo me lo dio al rostro altiro. Caí al suelo y de ahí llega él y me pone otro disparo en el pecho y me dijo ‘aquí te rematé'», denunció la víctima hoy internada en el Hospital del Salvador de Santiago.
Agencias / Radio Cooperativa / Reflexión y Liberación.