Enviado a la página web de Redes Cristianas
Entramos hace unas semanas al circo político en Honduras 2016-2017. Esa mojiganga y saqueo impuesta por los Partidos NACIONAL y LIBERAL desde hace más de 125 años y que tanto daño le ha hecho a este generoso pueblo y a este hermoso y bendecido país, pero tan inmerecido por la indiferencia de la mayor parte de la población que le importa poco lo que hagan con él. Vivimos del diario?el consumismo inmediatista nos mata y domina– y parece poco importarnos el futuro. Lo que sucede actualmente confirma lo dicho por el poeta Sosa: ?La historia de HONDURAS se puede escribir en una lágrima??. ¡Trágico, no?
Honduras, una nación tan bella con tantos y demasiados bienes y contrastes naturales, materiales y talento humano que daría suficiente para que los más de 8 millones de ciudadanos que la poblamos pudiéramos vivir sin sobresaltos teniendo lo suficiente para cada uno y una si no estuviéramos tan mal administrados y gobernados por esa casta política de CACHURECOS y COLORADOS tan dañina y vergonzosa para el país.
Desde nuestra infancia hemos tenido conciencia social plena de lo que infamemente sucede en Honduras gracias a la calidad humana, ciudadana y cristiana de nuestros padres que supieron guiarnos por caminos de bien y servicio a los demás y a esta caricatura de lo que llamamos Patria. Ellos, maestros de brega, fueron quienes nos forjaron el amor a esta tierra, su gente y a las luchas sociales.
A pesar de ello, sin jamás pretenderlo, nos enrolamos después del nefasto golpe de Estado MILITAR-NACIONAL-LIBERAL-EMPRESARIAL y ECLESIAL del 2009 en política vernácula con dos partidos supuestamente progresistas: primero, como candidato a alcalde por uno (2009), y como diputado (2013), por otro. En el primer caso como ciudadanos disciplinados nos retiramos por decisión del pueblo unas semanas antes de las elecciones y, en el segundo caso, participamos recibiendo el cariño, el aprecio y el voto del pueblo santabarbarense en una suma de 6,830, –insuficientes para ganar una curul–votos, que agradecemos desde lo más profundo de nuestro ser, así como a queridas amistades que nos apoyaron con sus limitados y caros recursos e intenciones.
Después de estas experiencias no muy gratas por los resultados posteriores, hablando de estos dos partidos, hemos considerado oportuno no volver a participar en actividades proselitistas partidarias y dedicar todo nuestro esfuerzo en la medida de nuestras posibilidades y capacidades a servir y apoyar a todas las organizaciones ambientalistas, sociales, humanistas, gremiales y populares con las cuales hemos estado ligados desde 1980.
Esto no quiere decir que no participaremos en las ELECCIONES GENERALES convocadas para el 2017. ¡No!, contrario a esto, seleccionaremos cuidadosamente a los candidatos y razonaremos nuestros votos a favor de ciudadanos y ciudadanas de cualquier partido no tradicional que nos parezca favorable, excluyendo totalmente a todos los candidatos de los partidos NACIONAL y LIBERAL.
¡Esa será nuestra trayectoria de aquí para adelante!
20 de octubre de 2016