Como pertenezco al comité de apadrinamiento de Salah Hamouri, participo en la rueda de prensa organizada en el Senado.
Salah tiene 23 años. Es franco-palestino. Nació en Jerusalén, de madre francesa, profesor de francés, y de un palestino, restaurador en Jerusalén-Este.
Salah fue escolarizado en los «Hermanos de Lasalle» de Jerusalén-Este. Hizo una carrera de sociología en la famosa Universidad de Belén.
En marzo de 2005, fue detenido mientras se dirigía a Ramala. Un mes después de su detención, su familia se entera por la prensa que se le acusa de participar en un complot con otros dos jóvenes contra el rabino Ovadia Yosef, jefe espiritual del partido religioso de extrema derecha, el SHAS, con motivo de que habían pasado en coche delante del domicilio de éste.
Al término de tres años de cárcel, Salah fue sometido a un chantaje despreciable que consistía en forzarle a « declararse culpable » so pena de verse infligir una pena de prisión superior a 7 años.
Es rehén de la ocupación israelí que juzga a quienes oprime.
Hoy, Salah Hamouri está en una cárcel de Galilea, en Gilboa, en el Norte de Israel.
A pesar de todas las diligencias realizadas y las firmes promesas prodigadas, no se mueve nada. El caso Salah Hamouri da lugar a un silencio ensordecedor.
La mamá de Salah me escribió. Para ella es un consuelo saber que defiendo a su hijo.