Enviado a la página web de Redes Cristianas
Sr. Obispo Oscar Campos Contreras.
Obispo de Tehuantepec.
Sr. Obispo:
Que el Espíritu Santo lo ilumine en su ministerio episcopal.
Me he entarado de su decisión sobre la remoción del P, Alejandro Solalinde. Me ha llenado de tristeza esta decisión, puesto que el Evangelio habla de dar hospedaje al peregrino (Mat. 25, 31 y ss), de la atención a los más empobrecidos: «A mí me lo hiciste».
A quienes no den este hospedaje o no lo favorezcan de corazón, el Señor Jesús tiene palabras terribles: Apártate de mí, maldito, al fuego eterno, porque fui peregrino y no me hospedaste. Es el amor a los más empobrecidos nuestro examen final de la vida.
Además el Espíritu Santo reparte sus carimas como ve que conviene a la construcción del Reino de Dios, que es Padre amorosísimo. El P. Alejandro Solalinde ha recibido el carisma de atender a los migrantes y está haciendo mucho bien, a pesar de las amenazas recibidas.
La noticia ha causado mucha consternación y he escuchado este comentario: «Ni cómo ayudar a la Iglesia, cada vez se va más gente y desde adentro la están destruyendo, no hay manera».
Le pido reconsiderar la decisión que usted ha tomado. Ojalá hubiera muchos cristianos dedicados a esta noble, difícil y peligrosa misión. Ojalá hubiera muchos obispos apoyando estas necesidades urgentes.
Le transcribo parte de lo que dice el Obispo de Cuautitlán en la página de la C. E. M.: «La presencia de nuestros hermanos migrantes en nuestra Diócesis es un don que nuestro Padre Dios, en su infinita bondad para con ellos, ha querido encomendarnos. Por este motivo, ahora reitero la decisión de nuestra Diócesis de Cuautitlán de seguir organizando la caridad en favor de ellos. Son un sector de hermanos que nos recuerda que todos somos peregrinos en este mundo y que nos encaminamos a la Casa del Padre (Cfr. Heb 11, 13). En ellos, además, podemos ver el rostro de Cristo (Cfr. Mt 25, 35) Texto completo en http://www.cem.org.mx/index.php/component/k2/item/2010
Cuente con mi pobre oración.
Salvador Segura Levy