¡Una gran alegría!…
Queridas y queridos amigos siguiendo con mis andanzas les comparto mi experiencia en Puebla:
Ahora que estoy regresando al D.F.-ciudad de México, aprovecho un pequeño alto para compartirles algo de lo vivido en esta semana. Quiero empezar por una alegría muy fuerte y especial. Mañana les enviaré otro correo con las alegrías y una pena del encuentro con mis amistades y mi familia.
El sábado (20 junio) participé en Puebla, en la Universidad jesuita, en un Encuentro con 600 jóvenes alegres, reflexivos y en búsqueda de conocer mejor a Jesús y comprometerse fielmente en su seguimiento. Son jóvenes de todas las regiones de México. Imagínense mi alegría al encontrarme con tantas y tantos jóvenes con esa actitud y esa búsqueda.
Esto lo organizó un equipo encabezado por un jesuita joven, Jorge Atilano que ha elaborado 5 Manuales muy buenos del proceso de los grupos juveniles y otros folletos como Orar en la Calle, experiencia con pandilleros de Honduras etc… Jorge Atilano con el equipo organiza Campamentos juveniles muy creativos y muy reflexivos por ejemplo en torno a Derechos Humanos, o para hallar a Dios a través del arte y de la naturaleza. Realizan Ejercicios-Retiros espirituales itinerantes en la sierra Tarahumara. Y en parte como fruto de su labor este año por primera vez en muchos años, entrarán 18 jóvenes al Noviciado.
El encuentro de este año: Enjuvi 2009 (Encuentro Juvenil Ignaciano) tuvo como Tema central la Identidad Cristiana.
Les pongo primero una impresión principal y una síntesis del encuentro. Como les decía arriba, fue un inmenso gozo y una alegría encontrar a 600 jóvenes buscando conocer y amar más a Jesús y como fruto de ello comprometerse en serio con los demás y en especial con los jóvenes excluidos y con los más pobres- todo esto en el espíritu del Buen Samaritano. Fue impresionante sentir su alegría, su dinamismo y su trabajo en serio.-
(Nota. Todo se trabajó por grupos de 30 a 50 jóvenes y en subgrupos y algunos plenarios).
La síntesis del Encuentro:
Objetivo: realizar un discernimiento comunitario en el seguimiento de Jesús y renovar nuestra identidad cristiana.
Viernes:
1.-Después de la presentación y de la Eucaristía con el obispo de Tlaxcala, se trabajó por grupos en torno a la necesidad de conocer a Jesús para construir nuestra identidad cristiana.
2.- Elementos sociológicos, filosóficos y teológicos para entender las nuevas identidades juveniles.
Sábado:
1.-Taller de cristología: conocimiento de Jesús histórico que anime el compromiso cristiano (en este taller de 5horas y media es donde participe como facilitador)
2.-Compartir el trabajo realizado en el taller de cristología: que resonó mas en nuestro corazón? ¿Qué nos está pidiendo Dios hoy a los jóvenes para continuar el proyecto de Jesús?
3.-Eucaristía.
4.-Festival de identidades.
Domingo:
1.- Compartir ¿que significa ser joven cristiano antes las realidades del siglo XXI?
2.-Eucaristía con el Obispo de Puebla
3.- Reunirse por ciudades para elaborar pistas que ayuden a renovar la identidad cristiana- a que nos invita Dios para renovar nuestra identidad de jóvenes cristianos e ignacianos.
4.- Síntesis y conclusiones.
(Nota. Yo participé el sábado, el domingo no pude quedarme y lo añore, pues cuando me invitaron ya tenía compromisos en el D.F. Me siento muy agradecido y es un regalo muy grande de Dios el haber participado en esta parte del Encuentro y palpar y sentir esta juventud tan deseosa de descubrir a Jesús, y comprometerse a seguirlo).
Dentro de este programa tuve la alegría de facilitar un modulo del taller del sábado y lo enfoqué desde el conocimiento y seguimiento de Jesús desde la experiencia vivida en Nicaragua y con la reflexión teológica que nos ha inspirado. Lo de Nicaragua lo presenté con chispazos en las diversas etapas que nos han tocado vivir desde l980 en las CEB y en nuestros proyectos. Y con los jóvenes comenzamos compartiendo en grupos una experiencia vital y cómo allí descubrían la presencia de Jesús y con qué pasajes del Evangelio más se identifican. Como marco vimos en un power point la situación de los jóvenes en Latinoamérica. Y todo se fue enfocando hacia el compromiso en el seguimiento de Jesús. Nota: Al que le interese le puedo enviar en detalle, lo que vimos en este taller.
Bueno ya les compartí esta gran alegría y regalo de Dios, y me quedé soñando y deseando que de alguna manera adecuada a nuestra realidad, renovemos y fortalezcamos nuestra pastoral juvenil en Managua y en el campo. Ojalá Jorge Atilano nos pueda visitar y acompañar para compartir e impulsar nuestra pastoral juvenil. Me quedo muy agradecido y alegre por esta juventud,
Arnaldo.
* Arnaldo Zenteno S.J., del Equipo de Servicios CNP. Comunidades Eclesiales de Base de Nicaragua