Marcela García Llorente escribe para este blog su testimonio sobre un ?amor prohibido??. Su experiencia ha hecho que sea una persona abierta a ayudar a otros que han vivido algo que todavía preferimos callar: el amor que puede surgir entre un sacerdote y una mujer.
Me enamoré de un sacerdote?? Cuando uno toma conciencia de lo que ello significa, el primer sentimiento que aflora es la culpa. Paradójicamente «culpa» por tener el sentimiento más hermoso y sublime que un ser humano puede experimentar.
Es un amor «prohibido» que nació y estaba ahí condenado al silencio, la crítica y la clandestinidad.
Mantuve una relación afectiva con un sacerdote durante más de un año, viviendo todas las experiencias maravillosas que circundan al amor, no sin alternar también los momentos difíciles, de dolor, confusión, replanteos, angustias y un sinfín de sentimientos encontrados que pugnan por buscar una salida. Y una profunda soledad … me sentía única en esto.
Me preguntaba cuántos más vivirían esta experiencia y cómo la vivirían. Eso me llevó a buscar incansablemente a estas personas. Aún revivo la inmensa alegría y el gran alivio que sentí el día que encontré a la primera. Curiosamente y para mi asombro fue un sacerdote quien me confesó estar transitando por la misma situación.
Había vivido en la angustia de mantener mi amor en secreto tanto por protegerlo como así también por un inmenso temor de hablar y ser juzgada. Hasta mi difícil separación la viví confinada a una gran soledad. Mi mayor fortaleza fue comprender que amarlo de verdad significaba también «soltarlo», dejarlo ir y desear que sea inmensamente feliz.
Todo esto me llevó a pensar en crear un espacio para facilitar la expresión de aquellos que lo necesiten, ya que todo lo que mantenemos reprimido tiende a reaparecer reiteradamente, incluso con un aumento progresivo convirtiéndose en una poderosa fuente de angustia, estrés o neurosis. Este espacio no sólo fue de ayuda y enriquecimiento para muchas personas sino también para mí misma.
Los patrones de conductas suelen ser similares en la mayoría de los casos, abundando las idas y venidas, la inmadurez para afrontar la situación y cuando aparecen problemas mayores, la irresponsabilidad y el ?síndrome de fuga??.
Actualmente acompaño a numerosa cantidad de mujeres de diversos países e incluso también a algunos sacerdotes y religiosos porque al igual que a nosotras, interiormente les suceden las mismas cosas. El sacerdote es un ser humano más y en algún momento de su vida necesita de un afecto humano, próximo, concreto y cuando esto le ocurre, se encuentra nadando en un mar de dudas y con frecuencia les surge la pregunta: ¿Por qué voy a renunciar al ministerio para el cual me he preparado y es lo que siempre he deseado hacer?
En otros casos, con la pretensión de guardar una castidad ambigua, se producen juegos de seducción que no se definen hacia ningún lado y que terminan afectando a ambos integrantes.
La fragilidad del individuo sometido a estas presiones internas y externas es tan grande que con facilidad se descompensa y no tiene claridad para hacer una reflexión seria y comprometida y, consecuentemente, llegar a una toma de decisión suficientemente responsable y madura.
En cada persona que se contactaba por primera vez, percibía un desesperado grito de ayuda y un gran alivio de poder contar con alguien que había vivido la misma experiencia y las escuchaba sin juzgarlas de antemano, alguien que las acompañara a transitar por su experiencia, aclarar dudas, sanar heridas, comprender y ver una luz que las conduzca por el mejor camino.
Son frecuentes los casos de personas que han quedado con huellas muy profundas, incluso con pérdida total de fe o imposibilidad de asistir a una misa porque hacerlo significaba reabrir sus heridas. El proceso de sanación suele ser muy doloroso como para llevarlo a cabo sin alguien que las acompañe. Poder sacar lo que uno guarda tan celosa y obligadamente en su corazón es el primer paso para sentir la liberación necesaria, aliviar ese gran peso y lograr un poco de paz interior que permite al individuo discernir claramente que camino va a tomar.
La represión siempre clandestiniza pero no corrige. El único pecado que Jesús parecía no perdonar era la hipocresía. Creo que no hace bien a nadie callar estas cuestiones porque como dice el Evangelio ?no hay nada oculto que no se descubra algún día, ni nada secreto que no deba ser conocido??. Si no se aborda esta realidad y tratamos de conocerla y no negarla, no podemos arribar nunca a la comprensión de la misma y reflexionar sobre una posible solución a tantos casos existentes.
25 comments . 25 Comentarios ( hasta el 30-1-09)
Comments: Querido Narciso: con mucho gusto nos gustaría acompañarte en estos momentos. Por qué no nos dejas tu e-mail para contactarte? Dios te bendiga! Comment from: And 30.01.09 @ 20:12 ———————————————————————————— Este tema me viene como anillo al dedo: soy sacerdote casado y enviudado: a mi mujer no hace mucho la llamó el Señor a Sí, y con ?l está. Para qué deciros lo que he pasado y estoy pasando. Dicen que la capacidad de amar se mide por la capacidad de sufrir…
Sí animaros y agradeceros , especialmente a Marcela García que saca el tema. Es cierto todo lo que decís sobre el tema, pero no alguien que parece que se escandaliza de esta realidad: está en todos su derechos, lo respeto, lo siento por él, pero también tiene derecho a escandalizarse por parecerle incorrecto y amoral el enamorarse de un sacerdote y viceversa.
Yo estoy buscando otra pareja que se adecue lo más posible a mi situación. Y es muy difícil. Os puedo decir que en mi mujer (q. e. p. d.) descubrí a la mujer. Es cierto: en el seminario nos machacaron los sentimientos, entre otras muchas cosas más… Y he dedicado casi toda mi vida a des-clericalizarme y aún no lo he conseguido del todo después de muchos años de casado. Os escr… Comment from: Narciso 30.01.09 @ 19:55
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…y podréis tenerlo todo mucho más claro. Comment from: otro cura casado 30.01.09 @ 19:09
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Como ha dicho otro compañero anteriormente, si entráis en www.moceop.net, veréis que es la página web que agrupa a los curas casados de España. Muchos de nosotros hemos vivido esas experiencias de sentir el amor por una mujer. Hoy somos muy felices con nuestras familias y además seguimos manteniendo intactas nuestras convicciones religiosas y de fe.
Hay que estar abierto al amor que es lo más grande. Muchos seguimos viviendo la fe en comunidades cristianas que nos aceptan y no ven ningún inconveniente para comprender que es perfectamente posible compaginar el ser cura y estar casado aunque el Vaticano aún no haya dado la orden…
Es necesario luchar por una Iglesia más acorde con el Evangelio. Jesús no tuvo ningún inconveniente en escoger a sus apóstoles y discipulos entre hombres casados. Hasta el siglo XIII existieron curas casados en la IGlesioa. Y aún hoy existen en la Iglesia de rito oriental.
Entrad los interesados en : www. moceop.net y pod… Comment from: otro cura casado 30.01.09 @ 19:08
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En estos casos considero necesario poder confiar en alguien, lo bueno y lo malo compartido se lleva mejor, por tanto te mando aunque no me agrada mucho hacerlo, mi correo saludos Joz y hasta pronto. (harrigarriza@yahoo.com) Comment from: Maria 30.01.09 @ 18:58 ———————————————————————————— Estimada Marcela: su nota es digna de quitarse el sombrero, reciba mis felicitaciones, tanto por su valentía como por la indiscutible calidez humana con la que aborda el tema y que la ha inspirado a la ayuda. No caben dudas que ésto y su amor por el sacerdote provienen de Dios.
Lamentablemente la Iglesia prefiere seguir mirando hacia otro lado, no solo en esto sino en muchas otras cosas, lo cual cada vez la hace menos creíble y eso conlleva al alejamiento de muchas personas. Los sacerdotes seguirán enamorándose y seguirá habiendo parejas e hijos de ellos como lo ha habido siempre, es una medida disciplinaria inhumana y que solo les garantiza más y más poder Comment from: Alvaro 30.01.09 @ 14:35
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Creo que el amor entre dos personas es algo maravilloso y natural al ser humano. ¿Hasta dónde se puede luchar contra algo que es inherentemente bueno y que no hace mal a nadie? Las estructuras y el poder muchas veces adormecen y hasta anulan la sensibilidad humana. Y las huellas interiores, la impotencia, y el dolor que queda en quienes atravesaron por esta situación son profundas y duraderas. ¿Vale la pena tanto sufrimiento a cambio de … qué bien, de quién? Las personas que renuncian a vivir un amor llamado prohibido, no parecen ser felices.
Aquellas que lo viven, no pueden hacerlo abiertamente y por lo general terminan heridas. Los sacerdotes, no parecen ser mejores sacerdotes, ni más felices… Es que reprimir nuestras emociones nunca puede ser bueno para nadie; es ir en contra de lo que Dios mismo ha creado. Dios creyó tan profundamente en lo bueno de su obra que nos dio absoluta libertad interior. Creo que es tiempo de hablar en serio del celibato opcional, no desde la intelectu… Comment from: Raquel 30.01.09 @ 13:08
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Hola en primer lugar decirte marcela es un buen articulo,creo que muchas se sienten identificadas,pedir consejo a Marcela a mi me ha ayudado mucho,es un mujer estupenda.
Bueno voy a contarles mi historia me enamore de un cura,aunque nunca se lo he dicho,ni el a mi,por que el con sus juegos e insinuaciones me demostro que me queria,luchamos los dos en no caer en las redes de la pasión,pero a el le trasladaron y pense sera mas facil olvidarlo,pero nada me levanto y pienso en el,y asi todo el dia,nos llamamos como amigos.
El es muy timido y no creo que me hable nunca de sus sentimientos,y yo no lo hize por respeto a que es un cura,lo llevare siempre en mi corazon,aunque a veces me dan ganas de quedar con el y decirle todo lo que siento,pero me da miedo a perderlo como amigo,por favor se que esta pagina la leen algunos sacerdotes, les pregunto ¿deearian que les expresaran los sentimientos,o que nos los callemos para no atormentarlos?ayudenme,el amor que siento es grande y limpio,el se que me… Comment from: aragonesa 30.01.09 @ 09:12 ———————————————————————————– el Dios al cual me enseñaron a querer desea la felicidad de sus hij@s a todos los acoje yo les deseo toda felicidad del mundo no me importaria descubrir mis secretos y pecados a un sacerdote casado Comment from: madrugador 30.01.09 @ 05:09
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«Me enamoré de un seminarista que ahora es sacerdote».Un recuerdo tormentoso y bonito… época pasional, de ensueño y temor.
Sus ánsias de amar y ser amado se encontraron con mis ánsias. Juntos soñamos con la luna y las estrellas . Quisimos que nuestras almas y cuerpos se juntaran para siempre y que nuestros abrazos fueran eternos…nuestra propia puesta de sol.
No ha sido fácil dejarlo ir…Prefiero creer que es feliz, que ya no me recuerda y que «hicimos lo conveniente».
Irónicamente y en nombre de ese amor, voy olvidando sus caricias y sus besos. Evito seguir los sueños que me conducen a él.
El tiempo sigue pasando, el rio sigue discurriendo y yo me voy, aunque se que me quedo en él y en su corazón, para siempre…
TORMENTA Comment from: TORMENTA 30.01.09 @ 03:07
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Permitanme la segunda parte,porque nuestro corazón es tan caprichoso y tan tonto que cae la segunda vez.Solo que en esta ocasión subió de categoría(que no puedo revelar)Nueva experiencia,con diferentes matices, pero el mismo fondo los mismos problemas,la misma ambición.
Al final triunfa sobre el deseo la racional pesas en la balanza.A él le pesaba muchisimo sus costumbres,su categoría,solo le suponia unos momentos de diversión.Le mandé a la m…..Cuando pienso en lo que pudo ser y no fué, enseguida me viene a la mente cuantas lagrimas me he ahorrado,humillaciones cuanta soledad absurda, frustraciones y me alegro inmensamente.
El AMOR ES ALGO MARAVILLOSO¡CLARO QUE SÍ!pero que sea sanamente correspondido. Al menos a mi me ha librado de un tonto tormento.Si le sirve alguién de algo… Comment from: MAGDALA 30.01.09 @ 03:03
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Aqui la novela de Mª magdalena se queda chiquita,frente a la realidad.Me mueve contar mi experiencia porque estoy orgullosa de mi respuesta tan beneficiosa para mi,puesto que he sabido equilibrar mi corazón con mi mente.Es un continuo debate,creanme!pero que cuando tenia 16 añitos me evitó caer en los brazos de un oportunista curilla de pueblo jovén lleno de dudas,enamorado eso sí,pero que no quería renunciar a su ministerio
Me deseaba, pero en el papel»la querida de:».Poco le importaba mis deseos de tener hijos legitimos de una relación normal.Yo le queria pero también me queria a mi misma y esa es la clave para no caer en manos de estos manipuladores de los sentimientos y del espiritu.Más tarde supe que otra ocupó mi lugar, a cambio tuve la inmensa alegria de no estar en su harém,porque si pueden mejor dos que una.Conociendo su verdadera cara y sus ambiciones es la mejor cura.
Comment from: MAGDALA 30.01.09 @ 02:43 ———————————————————————————– Andromeda, Marcela,María, Felix… está en cuestión el celibato de los curas, fenómeno muy tardío obligatorio para todos.Hoy hay curas católicos casados en los ritos orientales. Las relaciones sexuales-afectivas con sacerdotes está mas generalizado de lo que aparenta. Hay que dar pasos sin temor, ni escrúpulos. En numerosos ambientes aceptan a curas casados con toda naturalidad y estos ejercen el ministerio si se lo piden.Visitad la web Moceop de curas catolicos casados de España que ayudan en parroquias grupos cristianos, etc www.moceop.net Comment from: Un cura casado 30.01.09 @ 01:24
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Soy sacerdote y te comprendo perfectamente. Yo tambien estuve profundamente enamorado de una mujer, pero no fui valiente de manifestarle lo que sentia por ella, quizas por no hacerlo daño, creo que ella tambien me amaba. Que pena no poder haber compartido la vida con ella. La culpa de esto la tienen unas leyes eclesiasticas que se pueden cambiar.
Es inhumano la soledad en la que vivimos los sacerdotes, la falta de afectividad, el tener prohibido amar a una mujer, y vivir esa maravillosa experiencia de ser padres… ya podian cambiar el celibato y ponerlo opcional. Pero claro, con esta jerarquia tan anciana, carca, inmovilista que tenemos asi nos va. Espero que en un futuro no muy lejano esto sea posible. Un sacerdote casado estaria mucho mas centrado y no tendria muchos de los problemas que la falta de amor y afectividad hoy tenemos muchos: ¡viva el amor! Comment from: Sacerdote 30.01.09 @ 01:15
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¿y qué decir cuando es un hombre quien se enamora de un sacerdote? También hay hombres necesitados de ternura, de cariño, de una palabra de ánimo, y lo han encontrado en la persona de algún sacerdote cercano. Y lo que al principio era una amistad, poco a poco se convirtió en algo más. Estoy enamorado de un cura, lo confieso.
Y mi gran duda es que pienso que él también está enamorado de mí. Ninguno de los dos se lo va decir al otro, lo sé. Creo que es lo mejor, aunque hago todo lo posibe por disimularlo cuando estoy con él. Comment from: félix 30.01.09 @ 00:42 ——————————————————————————- María: pides ayuda en tu escrito. No me importa ponerme en contacto contigo y prestarte la ayuda que pueda. ¿Cómo contactamos?. Si te interesa, dímelo Comment from: joz 29.01.09 @ 23:40
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Te entiendo porque tambien me paso a mi. Es una experiencia muy enrequicedora, pero triste y llena de conflictos. Nunca me olvidare de mi amor prohibido. Tan es asi que escribi un libro llamado Different Flags en honor a lo que alguna vez he sentido por ese hombre prohibido. Eugenia Renskoff Comment from: Eugenia Renskoff 29.01.09 @ 22:17
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Lagartus- lagarte- Lagartum. adjetivo de la segunda declinacion. Comment from: naftul 29.01.09 @ 21:56
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Las mujeres que se enamoran de sacerdotes y son correspondidas no tienen nada de que avergonzarse ni por qué atormentarse: amar es la experiencia humana más maravillosa, la vida sin amor es desierto seco. Cuando llega, si hay que liarse la manta al cuello, pues se lía y a freir buñuelos el escándalo y la hipocresía. Como se canta en las iglesias: al final de la vida nos examinarán del amor. Ánimo, chicas, y no os rompáis el corazón. Comment from: Amoroso 29.01.09 @ 20:55
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Maria, apoyate mucho en los demas sabes? es lo mejor que podemos hacer sobre todo cuando ya hay un recorrido hecho por otras personas. Marcela es una excelente persona y apoyo. De cualquier manera aqui esta mi correo y si alguien mas quiere ponerse en contacto conmigo lo agradecieria muchisimo, como lo dije anteriormente necesitamos de alguien que no te juzgue que te entienda y oriente andromedavida@hotmail.com
Comment from: Andromeda 29.01.09 @ 20:03
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Melo, déjate de palabras hipócritas, estamos aquí para entender situaciones humanas, que tienen que ver con los sentimientos de las personas, y en primer lugar está la misericordia.
Cuida tu «niño interior», y no te dejes escandalizar, por el mal y el pecado. Comment from: Para Melo 29.01.09 @ 19:46
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Animo a toda mujer que se enamora de un sacerdote y animo al sacerdote a que se enamore.La relacion nunca ha de ocultarse, sino reodearse de buenos amigos que miren mas la persona que la institucion.La institucion va a su benefecio,a mantener como sea al funcionario.
No mira sus sentimientos, no le educaron para sobrellevar sentimientos propios, sino de los demas.Pero el sacerdote es una persona, y no tiene porque reprimir lo que es el mayor don, el amor.La ordenacion es un servicio temporal publico, atornillado por el celibato a la fuerza.Y somos personas sexuadas, con sentimientos y con deseos de vivir juntos.Lo que hace falta es valentia y escuchar al hombre que hay dentro y no cambiarlo por un figurante de rezos que de tanto repetirlos, ni se los cree.
La gracia no suple la naturaleza, por tanto, mientras mas natural se es, mas lleno de Dios se esta.Animo, venced el miedo.Yo he pasado por ahi. Comment from: pepe 29.01.09 @ 18:59
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Yo estoy pasando por una situación que me esta haciendo sufrir, este asunto del que habla, La valiente Marcela, hace mucho tiempo que no puedo ni soy capaz de hablar con nadie de mi situacion, me gustaria poder saber que hacer y hablar con alguien sobre este tema, ya que paso por esas circunstancias, si ves este comentario me gustaria tener una ayuda gracias Maria. Comment from: Maria 29.01.09 @ 18:52
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Marcela, sabes? te admiro muchisimo por la valentia que tienes al escribir tu experiencia de vida y compartirla con nosotros, yo estoy en un caso muy similar y te agradezco tanto por la ayuda tan grande que he recibido de vos. Por lo que he podido darme cuenta estas cosas no le han sucedio ni a una ni a dos personas creo que somos muchisimas personas las que nos encontramos en esta situacion. Ojala y sigas escribiendo sobre el tema para reflexion y madurez de nosotras y poder tomar una decision importante.
Andromeda