Más allá de la Misión compartida… -- Pau Fornells

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RIFMA

Los últimos meses han sido tiempo de importantes encuentros internacionales, como la tercera reunión de la Comisión de redacción del documento sobre ?La vocación del laico marista?? y la experiencia internacional sobre procesos de formación conjunta y vitalidad carismática para el área lingüística hispano-portuguesa: tiempos para proyectar el futuro del carisma marista vivido por diferentes formas de vida.

Quiero compartir en los próximos blogs algunas de las ideas que más se han repetido en esta última experiencia de formación conjunta, en la que han participado 11 laicos (7 mujeres y 4 hombres) y 10 hermanos, representantes de 14 unidades administrativas de América Latina y Europa, durante el pasado mes de julio.

Han sido 30 días de formación compartida entre hermanos y laicos, seguramente una de las experiencias más largas que ha habido en el Instituto Marista de esta naturaleza. Por las noticias aparecidas en la web (cf. Noticias del 11 y 24 de julio, y del 21 de agosto), sabrán que la experiencia fue muy positiva y que ya se están originando otras experiencias similares en algunas de las provincias de esta área lingüística.

Una de las constataciones que se fue repitiendo a lo largo de la experiencia fue la que origina el título de este blog: Más allá de la Misión Compartida?? ¡Vida y Fe compartidas! Esto puede sonarnos a nada nuevo, pues, a través de otras fórmulas, venimos repitiéndolo ya desde hace bastantes años; sobre todo, a partir del último Capítulo general: Nos sentimos llamados a profundizar nuestra identidad específica de hermanos y de laicos, al compartir vida: espiritualidad, misión, formación… El Capítulo General recomienda al Hermano provincial y su Consejo promover experiencias que favorezcan el compartir la misión, la espiritualidad y la vida con los laicos (Optamos por la vida, 26 y 44.8).

La novedad estriba en ser conscientes de lo que significa compartir vida y compartir espiritualidad (fe). Hasta ahora hemos compartido sobre todo la misión. El término ?misión compartida?? se ha hecho muy popular entre nosotros. La formación marista para laicos ha ido dirigida, sobre todo, en este sentido. Existen muchos programas que llevan este nombre.

Lo que hemos experimentado como nuevo en nuestro encuentro de Quito ha sido el compartir también la fe, la vocación, la relación con los demás?? de una manera vital, implicativa, desde una lectura de los acontecimientos que han ido configurando nuestra vida. No se trata de aprender compartiendo conceptos u oraciones, sino de orar a través de compartir aquello que nos ?toca??, que nos hace vivir y sufrir, lo que no acabamos de superar y aquello que constituye nuestra fuerza, los momentos más bellos y duros de nuestra vida, los reflejos que nos dan los otros desde nuestro diario vivir. Todo esto es formación desde la vida y para la vida.

Hasta ahora, quizá hemos compartido más la misión que la vida y la fe. A medida que iba desarrollándose la experiencia, nos preguntábamos por qué en nuestras comunidades y fraternidades nos cuesta tanto compartir la vida y la fe, con todos sus claro-oscuros. Siempre no resulta más fácil compartir ideas o programar juntos que abrir nuestro interior a los demás y compartir aquello que vivimos y somos. Sí, es verdad, que el Señor nos ha convocado para una misión y que ésta debe ser la finalidad de toda comunidad; pero también es cierto que compartir la vida y la fe es ya un signo visible de comunión y, por tanto, de misión.

Nuestra misión esencial es mostrar experiencialmente a los jóvenes de nuestro tiempo que es posible compartir la vida como hermanos y hermanas, y que esto se consigue gracias a una fe también compartida. La pregunta es: ¿Por qué nos da tanto miedo a compartir la vida y la fe? La intuición de esos días vividos en Quito nos llevaba a afirmar que la vitalidad del carisma marista nos vendrá de favorecer espacios, caminos, estructuras que nos permitan compartir vida: espiritualidad, misión formación?? ¡Y eso, hermanos con hermanos, laicos con laicos, hermanos con laicos??! El futuro del carisma pasa por verdaderas comunidades de vida y de fe.

(*) El H. Pau Fornells forma parte del Secretariado de Laicos de la Casa General de los Hermanos Maristas en Roma