¡Qué diferencia con los prelados españoles!
Mientras que en España nuestros obispos dan cursos en universidades públicas sobre lo perjudicial que es el laicismo, más de 600 obispos anglicanos salen a la calle para presionar a los líderes políticos por su desidia con los problemas del Tercer Mundo. Junto a ellos, han desfilado por las calles de Londres altos portavoces de judíos, musulmanes y sihk, además del jefe espiritual de los católicos británicos, Cormac Murphy-O’Connor.
La marcha, encabezada por el arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, partió del Parlamento de Westminster y, una vez cruzado el Támesis, finalizó en el Palacio de Lambeth, la residencia oficial de Williams, la máxima autoridad de la Iglesia anglicana.
Marcha contra la pobreza
Al igual que en España, donde los obispos católicos empezaron a tomarle el gusto a echarse a la calle la pasada legislatura, los representantes de la Iglesia anglicana también salen a manifestarse a la calle. Pero en lugar de protestar por la destrucción de la familia tradicional o por los matrimonios homosexuales, la marcha de religiones que ayer se produjo en Londres buscaba protestar contra la pobreza y los problemas del Tercer Mundo. Y más en concreto por la pasividad de los líderes políticos para luchar contra ella, según recoge Público.
Objetivos del Milenio
En una carta entregada al primer ministro británico, Gordon Brown, los obispos anglicanos le advierten de que no se cumplirán los objetivos del Milenio, ocho compromisos adquiridos por 191 países de la ONU en 2000 para cumplir antes del 2015. Entre ellos, los prelados anglicanos subrayan el poco avance en las promesas que se refieren a reducir a la mitad la pobreza extrema, frenar la expansión del SIDA y asegurar la educación de los niños del planeta. Williams señaló como consecuencia del fracaso en estos compromisos a “la muerte de millones de mujeres y bebés al nacer o por enfermedades evitables».
Cisma anglicana
Los obispos anglicanos fueron uno ayer para realizar esta protesta. Una imagen difícil de conseguir estos días en que su Iglesia está al borde del cisma. En este momento, están divididos entre revisionistas y tradicionales sobre todo en temas como la presencia de homosexuales en el sacerdocio o la posibilidad de reconocer a las mujeres obispos. En lo que se refiere a este sínodo, en el que se ha enmarcado la protesta y que sólo se convoca cada diez años, el sector conservados, formado por unos 200 arzobispos y obispos de diócesis africanas y latinoamericanas, han boicoteado el encuentro.
Respuesta de Brown
Por su parte, el primer ministro británico, Gordon Brown repartió a los obispos de los diferentes una lista con tres peticiones para que se la trasladen a los líderes políticos de sus países, según informa el diario The Guardian. Brown les solicita que pidan una inversión de 20 millones de dólares en ayuda contra el hambre, que insten a sus gobiernos a ayudar en la escolarización de 40 millones de niños para 2010 y que inviertan en la formación de 4 millones de médicos, enfermeras y matronas para que 10 millones de niños no mueran “innecesariamente” por enfermedades evitables, como es la malaria.