Luto y dolor tras el paso de Ida: las iglesias coordinan tareas de ayuda -- Rafael Menjívar

0
32

ALC

El Salvador fue declarado en estado de emergencia nacional por el Presidente de la República, luego que la tormenta Ida dejara 355 milímetros de lluvia en cuatro horas, equivalente a lo que provocó la tormenta Mitch, en cuatro días, 11 años atrás, según autoridades del Ministerio de Medio Ambiente. El canal 10 estatal de televisión permanentemente generó información sobre la cantidad de víctimas, pérdidas materiales, albergues y otros daños. El mismo presidente Funes y su equipo de ministros y delegados han expresado su condolencia al pueblo salvadoreño y activado los mecanismos para el auxilio internacional. Incluso una televisora, Canal 21, se ha declarado como centro de acopio.

Un informe de protección civil hasta el mediodía de ayer, informaba de 130 personas fallecidas, 13,680 personas refugiadas en 118 albergues instalados, 1,835, viviendas afectadas, 209, viviendas destruidas, 18 puentes caídos, 108 deslizamientos, 13 grandes inundaciones, 12 desbordamientos de ríos y otros datos.

La emergencia provocada por el desastre acaparó la atención en el país, aunque la coyuntura mediática por la salida del Ejercito Nacional a las calles para apoyar a la Policía Nacional Civil en las tareas de seguridad pública, la aprobación del Presupuesto General de la Nación y la deserción de 12 diputados de principal partido de oposición, eran los temas picos, ahora apenas parecen en la agenda.

Los principales titules de los medios locales dedicaban gran parte a exponer los daños, unos más certeros que otros, pero en fin, datos. La cantidad de llamadas en los medios con teléfono abierto sofocaban la atención, en su mayoría llamadas de auxilio.

El Obispo luterano Medardo Gómez ha expresado ?esta situación es alarmante, nos llena de mucha tristeza y dolor conocer la cifra de muertes, heridas, desaparecidas, esto viene a hundir al país en mayor pobreza, miseria y marginalidad??. ?Tan grande es este dolor que hemos olvidado las otras crisis que también son preocupantes. Nuestra gente pobre y sufrida ha sido golpeada de nuevo y es hasta indignante que este círculo de muerte y dolor se repita constantemente validando la expresión que somos un país en eterna emergencia».

Pese al dolor, para el líder luterano, el gobierno ha sabido manejar la situación de emergencia y sostuvo ?felicitamos al gobierno por la forma en que ha manejado este desastre nacional, ha dispuesto los recursos del Estado en función de la población más necesitada, ha generado información y coordinación con las diversas entidades y solicitado ayuda a nivel nacional e internaciona»l.

La Oficina de Justicia y Paz e Identidad de la Creación de los Frailes católicos, giró un comunicado que llama a las autoridades del gobierno central y municipal para que se tomen además de las medidas de reparación, políticas de prevención (no solo por la emergencia) establecidas desde el ordenamiento territorial, el cuidado y protección de cuencas hidrográficas, y la sistemática reducción de las vulnerabilidades sociales, económicas, ambientales y de género.

El Sindicato de la Industria Eléctrica de El Salvador -SIES-, llamó a todos sus afiliados y afiliadas, a solidarizase con el pueblo y a unirse a la campaña de recolección de víveres, frazadas y ropa en buen estado, la cual posteriormente será repartida entre los damnificados, que por ahora ya ?superan las 10,000 personas??.

Según la Asociación Comunitaria Unida por el Agua y la Agricultura, El huracán Ida y el sistema de baja presión continuarán produciendo lluvias sobre el territorio nacional. En un informe girado vía electrónica para este 9, el sistema de Baja Presión ubicado en el Pacífico continuará en proceso de disipación, es decir se estará debilitando aún más. Mientras el Huracán Ida, se acercará a las costas de la frontera de Mississippi.

Pese a toda la carga informativa, varios municipios del país, como Verapaz, ubicado a unos 51 kilómetros al oriente de la capital salvadoreña, se encuentran incomunicado; los deslaves y derrumbes han inhabilitado el acceso, sin embargo, el grito de auxilio se hacía sentír; solo en este lugar las víctimas mortales ascendían a más de 50.

Casa destruidas, puentes, carreteras, un clima de zozobra se vive en el país; las escenas de llanto y dolor se dejan ver a través de la televisión. La gente comenta en murmullo, la desgracia y cada vez mira hacia el cielo que se torna nublado ?no es posible lo que estamos viviendo, tanta desgracia?? y esto que falta los daños a la agricultura y otros detalles»??expresan.

Las Iglesias han tenido ayer por la tarde una reunión para acercar datos. Antes de iniciar, la mirada fatigada en la gente era visible. Bueno iniciemos, dijeron, luego de una oración compartieron los datos y se logró establecer una coordinación con otras instancias como Acción Conjunta de las Iglesia, ACT, (por sus siglas en inglés) para trabajar juntos y juntas en un proceso para la atención de la emergencia integral y más adelante contribuir al proceso de recuperación.

La Iglesia Luterana informa de más de 20 lugares de impacto donde la gente ha sido afectada; algunos testimonios erizan la piel, ?el agua nos llegó hasta la cintura y pudimos como se iba toda nuestra vivienda con las cositas que teníamos?? gracias a Dios, nos pudimos salvar??.

Nos toca trabajar unidos y unidas y salir adelante como siempre lo hemos hecho, con esperanza y solidaridad, finaliza el Obispo Gómez.