Los mártires del futuro -- Nancy Edith Suárez y Gabriel Sánchez

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Muchas veces nuestro futuro, esta ligado a los valores colectivos, que van determinando como caminamos y hacia donde caminamos como sociedad. Por eso los mártires no son sólo el recuerdo querido de alguien que no esta o la heroicidad de quien da la vida por valores hondamente sentidos, por personas, por pueblos, por un sueño??sino que alumbra el futuro colectivo dándonos una luz que va señalando el camino, en estos días se reabre la causa judicial del asesinato de Víctor Jara??el entrañable poeta militante, y junto a ?l queremos recordar a otro mártir , porque son ellos, aquellos de los nuestros que cayeron luchando por un mundo mejor, quienes nos van enseñando desde ese recuerdo suyo realizado en el boca a boca, valores que vienen de muy atrás, pero que son renovados en cada tiempo, con sangre inocente?? sangre de hermanos derramada, que alumbra el amanecer que ya viene??y nos recuerda cual es nuestro destino, el, de una manera u otra, dar la vida??cada día por amor??

Por eso este recuerdo de un barrio y de un muchacho argentino que asesinaron, que lucho, que fue miembro de la comunidad de base de su barrio, hermanado en el recuerdo al inefable poeta y guitarrero chileno, no sólo nos trae el recuerdo nos trae??también la luz del amanecer que esta llegando??

Agustín pertenecía a las comunidades Eclesiales de base desde muy chiquito.
Era un joven inquieto, inteligente y que a medida que fue creciendo y madurando adquirió una enorme conciencia social.
Le preocupaban los pibes de las esquinas, así que empezó a juntarse con otros jóvenes como él, limpiar terrenos baldíos de la zona y armar algo que denominó Fogones. Particularmente en invierno, se juntaba harina y grasa y su vieja amasaba las tortas fritas (y las viejas de todos) que luego se repartirían en la noche de fogón. Una olla gigante con mate cocido y traía los pibes, los iba a buscar uno por uno. y cambiaba el faso o el vino en una vaso de mate cocido caliente y un pedazo de torta.

Era un tipo súper comunicado, en una época casi sin teléfono. No había Internet ni celular. Pero lo conocía todo el mundo. Y todos lo querían.
Entonces a cada fogón traía una psicóloga, alguien de alcohólicos anónimos, algún especialista en droga, alguien que le hablara a los pibes y contribuyera a su concientización. A descubrirse como persona.

Pero como esto le pareció poco, tenía conciencia de que la tierra es de todos, que es un derecho que tenemos por la dignidad de ser hijos de Dios. El, un chico pobre de asentamiento, quedó traspasado por la experiencia de la toma de tierras en nuestra zona. Junto con otras y otros pibes, vio, que había mucha tierra desocupada y muchas familias sin vivienda. Así que una noche fue a la toma de las tierras…

Pero resulta que a estas tierras las estaba vendiendo un martillero público, tierra que eran fiscales…
Se le jodió el Kiosquito. Y una noche fría del 5 de junio de 1988, decidieron terminar con la vida del pibe que jodía….

Quienes? El martillero? Los cárteles de los barrios? Todos juntos organizados?
El crimen aun está sin esclarecer y han pasado 20 años.
Cuando acabaron con su vida Agustín tenía sólo 23 años….

Nancy Edith Suárez una querida compañera Argentina, recuerda que esa noche, estuvo con ?l??pegando carteles para el fogón??así quedo plasmado en su memoria la ultima vez que vio Agustín??un mártir del futuro.-

(Documento enviado a la red mundial de Comunidades Eclesiales de Base)