Los empleados públicos salen a la calle contra los recortes de Aguirre -- F. J. BARROSO / Maria Comes Fayos

0
25
Después de más de un mes de movilizaciones y concentraciones frente a sus lugares de trabajo, unos 20.000 empleados públicos de Madrid se han manifestado por las calles de la capital convocados por CC OO, UGT, CSIF y CSIT-UP.
Bajo el lema Lo público es de todos. ¡No a los recortes!, los asistentes han protestado contra los recortes que el Gobierno regional incluyó en la Ley de acompañamiento de los presupuestos antes de Navidad. La marcha arrancó a las seis y media de la tarde en la plaza de Neptuno y concluyó en la Puerta del Sol.

La protesta, que obligó a modificar el itinerario de 25 líneas de la EMT, fue muy heterogénea y tuvo varias cabeceras, ya que se sumaron maestros, bomberos con su uniforme -está prohibido-, policías de paisano con prótesis en el trasero y lemas como Nos han dejado con el culo al aire, agentes forestales, funcionarios de justicia, sanitarios, empleados de Metro… En las pancartas se vieron también ecos del 15-M y de su No nos representan. Algunos bomberos escalaron al andamio de la fachada de Alcalá 22, en obras, donde descolgaron una pancarta con el lema Bomberos quemados.

Manglano habla de huelga «política»

El consejero de Economía, Percival Manglano, ha declarado que los sindicatos «se equivocan gravemente al convocar huelgas políticas y no leer los resultados de las elecciones» y ha subrayado que las medidas que está tomando el Gobierno regional son «reformas», no recortes.

«Creemos que está plenamente justificada esta decisión en las circunstancias actuales de grave crisis y de perspectivas que nos llevan a una nueva recesión», ha dicho tras presentar los datos de la economía madrileña de 2011. «Los españoles han votado para que los gobiernos pongan en marcha reformas y para que ayuden a relanzar la economía y eso es lo que está haciendo el Gobierno», ha dicho, para después insistir en el «carácter reaccionario de respuesta de los sindicatos a esta voluntad de reforma».

UGT Madrid ha corregido a Manglano, al que ha recordado que la convocatoria es «una manifestación» y no una huelga y que estas «no son políticas» sino laborales y contra la política de vulneración de derechos y de destrucción de empleo público. El consejero de Asuntos Sociales, Salvador Victoria, también ha dicho que la manifestación es «injustificada y fuera de lugar» en plena crisis y en la que «todos debemos arrimar el hombro».