Los cambios reales los hace el pueblo en sus conciencias y en la calle… -- Gabriel Sánchez (Montevideo-Uruguay)

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«Tomemos en serio la revolución, pero no nos tomemos en serio a nosotros mismos»(Graffiti del mayo francés hecho en un muro cercano al Odeom)
Montevideo, 9 de abril de 2012 ?
Hay mucha experiencia histórica en el mundo sobre la alianza de izquierdas con sectores más corridos hacia el centro, normalmente esto ha implicado flexibilizar la carga utópica, los principios y en no pocos casos los programas, esto ha generado muchísimas frustraciones para cuadros y militantes de la izquierda y si esto ha sido cierto en el mundo, lo ha sido más en la vieja y querida tierra Europea??

Justamente en momentos en que Europa se encamino hacia el colapso, pues la austeridad salvaje esta contrayendo lo que los capitalistas llaman mercado, en realidad lo que hace al bajar el poder adquisitivo de los salarios y precarizar el empleo, es que la multitud de trabajadores afectados no puedan comprar muchísimas de los productos que le son necesario, esa contracción de la demanda se ve reflejada en toda la economía hasta tal punto que comienza a erosionar la demanda del comercio exterior intrazonal??si se tiene en cuenta que Alemania, tiene una deuda externa que es publicitada al 81% del PBI, cuando los que realmente estudian los números hablan del 83% o hasta el 85% y creciendo, cuando la baja de demanda afecte su comercio exterior con destinos europeos, sabiendo que el 50% de la exportaciones alemanas dependen de Europa, junto con la enorme emisión de Euros electrónicos para cubrir los fondos de la deuda y el inexorable avance de más de un país (debido justamente a los recortes sanguinarios de la economía) hacía la cesación de pago de la deuda soberana, como se ha dado en llamar, un incendio que consumirá toda Europa, pero que paradojalmente afectará a la gran banca trasnacional, lo que en directa impactará sobre la economía Alemania y por osmosis en la francesa, en esta coyuntura histórica los movimientos políticos, cara a las elecciones se vuelven muy importantes, si alguna vez el pueblo francés tuvo poco margen para equivocarse, esta es una de ellas, si da el triunfo al sector equivocado, vivirá por lo menos una década terrible (y soy conservador en el tiempo), por esto, la oferta que parece abarcar todo el espectro desde la ultraderecha, hasta la izquierda real, con muchos matices intermedios, se vuelven una prueba de fuego para el pueblo francés?? En esta marco situacional viene emergiendo el Frente de Izquierda, que tiene algunas características contradictorias??

?Por ejemplo: el programa no se pronuncia sobre la duración de la cotización para la jubilación a 37,5 anualidades y no asume las demandas de auditoría sobre la deuda, anulación de las deudas ilegítimas, etc. Pero numerosas reivindicaciones van en la buena dirección. La pregunta es: ¿cómo imponerlas, si no es apoyándose en la lucha social, en las empresas?

De hecho, en el programa del Frente de Izquierdas, la lucha de clases por las reivindicaciones está eclipsada por las fórmulas rimbombantes sobre la ?revolución ciudadana??, ?la insurrección cívica?? y ?la implicación popular??. Entonces se plantea la siguiente pregunta: ¿en qué medida se trata de un programa anticapitalista? La respuesta no es tan evidente como se podría pensar según el número de veces que Mélenchon pronuncia la palabra ?revolución??.

Es lo que revela esta sorprendente frasecita en la que hace como si las empresas y los asalariados tuvieran intereses comunes frente a las finanzas: ?No es a los mercados a los que hay que tranquilizar, es a los productores, es decir, a las empresas y los asalariados?? /11. Esta cita, firma un programa antineoliberal, no anticapitalista. Un programa construido sobre la ilusión de una muralla china entre el capital financiero y el capital industrial.?? *

Parece un abordaje algo paradójico el de esta alianza que une al partido comunista francés y a sectores que representan al capitalismo productivo representado por Jean Luc Mélechon??es interesante ver el matiz y el encare que en sus apariciones publicas da Mélechon al universo programático de ese ?Frente de Izquierdas?? cuál es camino que la gente que se agrupa alrededor de Mélechon desea andar, un camino antineoliberal o un camino anticapitalista, veamos la impronta política e ideológica de este le da al mismo?? ?Acentos patrióticos-Todo esto es indiscutiblemente positivo.

Al mismo tiempo, no hay que ocultarlo: el proyecto político y el programa merecen que se debatan. ¿Qué quiere exactamente el Frente de Izquierdas? La pregunta se plantea muy en particular hoy, pues el discurso de JL Mélenchon en La Bastilla estaba muy desfasado respecto a la crisis social y las reivindicaciones inmediatas. De una parte, ha denunciado las desigualdades entre mujeres y hombres, prometido inscribir el derecho al aborto en la constitución, ?borrar la deuda ecológica??, dar la nacionalidad francesa a todo niño nacido en Francia, anunciado la prohibición de patentado de lo vivo…

¡Bravo! Pero de otra parte no ha dicho ni una palabra de las jubilaciones, de la deuda, del empleo, de los bancos… Increíble pero cierto: palabras de referencia como ?capitalismo??, ?crisis??, ?austeridad??, ?neoliberalismo??, ?izquierda??, ?derecha??, ?finanzas??, ?trabajador-trabajadora??, ?clase obrera??, ?socialismo??… no han sido pronunciadas ni una sola vez. Por el contrario, en veinte minutos, el orador ha dicho once veces ?Francia??, veintitrés ?pueblo??, cinco veces ?república??, tres veces ?patria??… Ha hablado mucho de ?revolución?? y de ?insurrección??, pero no hay que engañarse: se trata de una ?revolución/insurrección en las urnas??, en favor de un cambio de régimen, no de una revolución social.??*

Entendemos la necesidad de alianzas para profundizar la contradicción entre el capital especulativo y el productivo, pero esto esta lejos de plantear un real cambio sistémico, la experiencia histórica ha mostrado inequívocamente que cuando los sectores capitalistas (sea el capitalismo productivo-sea el capitalismo especulativo) deben definir las cuestiones más gruesas, sobre los rumbos a seguir, siempre hacen alianzas reales entre si y no será la primera vez, que arrastren a partidos de izquierda, para desmontarlos ideológicamente o para abandonarlos una vez cumplido su rol de acercar votos?? la contradicción entre ellos es un matiz, pero ambos cuidarán que la renta del capital no se deteriore y eso implica necesariamente la pauperización de la clase trabajadora en forma creciente??

Esto a pesar del entusiasta optimismo que plantea en el portal de ALAI, el periodista argentino Alberto Rabilota, que presenta al Mélechon como un político carismático de izquierda, ya hemos planteado porque no tenemos esa imagen??lo que es más importante, Rabilota plantea algo que merece ser contextualizado (el lo hace), en este proceso francés del Fdel I, pero para entender el proceso latinoamericano, desde la situación francesa??veamos que nos dice Rabilota en su articulo Un brote de Esperanza en medio de la demolición neoliberal?? ?La revolución socialista latinoamericana del siglo XXI tendrá su , igual que lo tuvieron, en su momento, las revoluciones rusa, china, coreana, vietnamita y cubana.

El sujeto de la revolución no será solo la clase obrera, o estará formado solo por la alianza obrero campesina; ese sujeto será integrado por todos los sectores oprimidos del pueblo. No habrá un solo partido de vanguardia porque la complejidad de ese sujeto social admite alianzas, pero no homogenizaciones () La relación entre las fuerzas políticas plurales que actúen como vanguardia colectiva y las fuerzas sociales también plurales que esa vanguardia se comprometa a representar será de igual a igual, respetuosa y complementaria??, escribe el politólogo cubano Roberto Regalado al concluir las ?consideraciones finales?? de su último libro, titulado ?La izquierda latinoamericana en el gobierno: ¿alternativa o reciclaje??? (2)??**

Convendría analizar esta postura, que no es sólo de Rabilota, se ha entendido que se puede realizar una alianza entre las clase trabajadora (campesinos, trabajadores, desempleados, sectores socieconomicamente pauperizados, estudiantes) y por todos los sectores oprimidos del pueblo??

Esto parece que plantea los de abajo, los explotados, los oprimidos y se me ocurre que se esta hablando de la clase trabajadora??Pero en mi modestísimo opinar, la situación francesa es bien distinta de este planteo el empresariado y los dueños del capital productivo (representados por la gente de Mélechon)??planteándose la idea de una conglomerado aliancita que se integre en una lucha con discurso de izquierda pero con contenidos no anticapitalistas, el Frente de Izquierdas, creemos que pueda ser un instrumento tal vez pueda servir para plantear?? una socialdemocracia algo devaluada, que en Europa no existe y sería un avance de la situación actual, pero para los cambios más profundos, si bien se puede integrar en una ?diversidad??, todos tienen que tener la mística de la clase trabajadora que empuje un cambio cultural, socioeconómico y político, que cambie la relación de los medios de producción y termine con la rentabilización del capital??

Porque la vieja verdad de que el pedazo de más que se lleva uno de la torta, se lo esta robando al otro??se ve verificado, en la danza capitalista??para mantener la renta del capital, es necesaria la explotación de la clase trabajadora, tal vez en algún frente latinoamericano esta alianza de un frente policlasista pueda aspirar a generar un cambio??tal vez sea más posible, porque existe una cierta aún cierta mística de izquierda, aunque poco a poco se ha ido perdiendo, por ejemplo en Brasil, los de abajo, se ven cada vez más afectados, directamente afectados por el crecimiento de la riqueza y el poder de un empresariado capitalista, que debajo de la mesa, termina haciendo negocios con el capital trasnacional y con un modelo agroexportador de sobre acumulación de renta capitalista y marginación intensa del campesinado y de los trabajadores rurales sin tierra, modelo que pronto entrará en crisis??ante la esperada contracción global del comercio exterior??Pero en Francia, donde Mélechon claramente representa al capital de la economía productiva, nos parece muy difícil??

Por eso nos estimamos que es esta una contradicción que va más allá del juego de palabras que los Anticapitalistas, apoyen al capitalista Mélechon, es una de esas paradojas histórica que esperaríamos saliera bien, sin embargo somos muy pesimistas al respecto??Por otro lado en la izquierda anticapitalista lo esta pasando que es tragico ?? ?Francia-NPA, ¿continuación y final?-Lénaïq Bredouz (Mediapart)-Europe-solidaire-http://www.europe-solidaire.org/-Traducción de Faustino Eguberri-http://www.vientosur.info/
El NPA no aguanta más que de un hilo y sus militantes apenas pueden ocultarlo.

La publicación, la semana pasada en Libération, de una primera tribuna y luego, esta vez en Mediapart, de otra, de varios cuadros llamando a votar por Mélenchon, ha cristalizado una situación ya deletérea. A un mes de las elecciones presidenciales, Philippe Poutou sigue en campaña, su predecesor Olivier Besancenot ha cogido vacaciones en su trabajo para ayudarle, sus partidarios siguen esperando que la igualdad del tiempo de palabra va a permitir al ?obrero-candidato transgredir los códigos mediáticos e imponer un discurso de ruptura. Pero a la sombra de las cámaras y de las reuniones públicas, los militantes se desagarran; el NPA está al borde de una escisión que certificaría definitivamente el fracaso de la ?apuesta loca?? lanzada en 2009 por la difunta Liga Comunista Revolucionaria (LCR).

La ruptura tuvo lugar hace pronto un año, tras el anuncio de la retirada voluntaria de Olivier Besancenot: en una conferencia nacional, en la que la mayoría de entonces se había roto en dos a la hora de designar a su candidato para las presidenciales. Philippe Poutou sólo fue elegido por una escasa mayoría. A partir de entonces los desacuerdos no hicieron más que profundizarse. Tras la Universidad de Verano del pasado mes de agosto, la minoría inquieta por una ?desviación aislacionista?? del NPA, particularmente respecto del Frente de Izquierdas, se constituyó en fracción pública, con su propia página Web, sus portavoces, sus reuniones nacionales.

Hace diez días, la Izquierda Anticapitalista [Gauche Anticapitaliste, GA], como se ha denominado ella misma, ha optado por no dar consigna de voto para la primera vuelta. Algunos de sus militantes hacen campaña a favor de Poutou, otros quieren votar a Mélenchon, pero todos son muy críticos sobre la evolución del NPA. Debemos levantar acta del hecho de que el NPA, fundado hace tres años con el objetivo de reunir a todos los anticapitalistas en un partido de masas implantado en la sociedad, toma el camino de la marginalidad, escriben en su último texto. A la inversa, dice la GA, la campaña que realiza Jean-Luc Mélenchon enuncia un amplio espectro de propuestas políticas comunes a toda la izquierda radical.

La Izquierda Anticapitalista está en una trayectoria de salida. La salida del NPA es una cuestión que se plantea a un plazo breve, explica una de sus portavoces, Ingrid Hayes. Traducción: la mayoría de la GA podría abandonar el NPA de aquí al verano si la dirección actual no opera un giro estratégico. Hay ya discusiones en curso con el Frente de Izquierdas para constituir un polo anticapitalista, con Clémentine Autain y los Alternativos, al lado del Partido de la Izquierda de Jean-Luc Mélenchon y del PCF. Están aún lejos de concluir y podrían fracasar si el Frente de Izquierdas decide participar en un gobierno dominado por el PS.

Pero, incluso entre las figuras históricas de la LCR, varios piensan ya en la escisión o la salida. Es por ejemplo el caso de Samy Johsua, que está con la GA. En cinco semanas habrá que decidir si el NPA permanece en su aislacionismo o si se alía con las fuerzas, incluso en el Frente de Izquierdas, que no irán a un gobierno PS. Es una decisión capital…. Las discusiones sobre la forma serán quizá largas pero hay que firmar el principio, explica. Y añade: Para mí, son 15 años de batalla. Si no se pone en práctica, no es ya mi partido.

Estamos en la hora de las decisiones??, dice también Myriam Martin, que ha dimitido de su portavocía al mismo tiempo que llamaba a votar por Mélenchon. Va aún más lejos: Hoy, se debe aceptar que la dinámica está alrededor del Frente de Izquierdas. Y no en esta campaña aislacionista y sectaria (la de Poutou)… Veo con dificultades cómo se puede aún reorientar al NPA. Luego: Pero es un desgarro.

Incluso en la mayoría actual se admite. La situación es difícil. Hay que luchar para mantener a todo el mundo unido… Espero que lo lograremos??, dice François Sabado, otro dirigente histórico de la LCR. Quiere creer aún en ello, persuadido de que las divergencias son menos profundas de lo que parece, a condición de no contemplar una participación en el Frente de Izquierdas: Tras la campaña, no se producirá un repliegue sectario. Algunos piensan que se ha cometido el error del siglo. Se ha hecho lo que se ha podido. Pero tras las presidenciales, se reunirán las condiciones para desplegar una orientación anticapitalista de reagrupamiento. El NPA tendrá una política de unidad y de diálogo con el Frente de Izquierdas si no participa en el gobierno y no apoya una mayoría parlamentaria. Pero en un polo anticapitalista independiente.

Es también la esperanza de Sandra Demarcq, miembro del Comité Ejecutivo (CE) del NPA: ¡El hecho de haber obtenido las 500 firmas muestra que hay aún militantes en este partido! La crisis del NPA existe, pero la base cree aún en esta campaña, aunque no sea al 100%, y quiere desarrollarla hasta el final. Y si el NPA está al borde de la escisión, pelearé para decir que nuestros desacuerdos pueden coexistir en el mismo partido??. Una opinión compartida por Antoine, él también elegido para el CE sobre la base de una posición muy hostil al Frente de Izquierdas: Nada está zanjado. Pero si los miembros de la GA que están en la dirección están prácticamente fuera, están en desfase con las preocupaciones de los militantes locales. Y los desacuerdos son a veces sobreestimados. Algunos piensan que se queremos hacer la misma política que Lutte Ouvrière, ¡pero eso es un error!?? ***

Vamos a tomarnos la osadía de expresar nuestro humilde pensamiento?? En primer lugar, votar por Mélechon y decir que se mantendrá la independencia, es una ingenuidad política mayor, muchos confiados anticapilistas votarán a un capitalista con la esperanza de cambiar la realidad económica, social y política, pero estimamos que eso seguramente no pasará, a la hora de pactar la experiencia histórica nos ha demostrado, que los capitalistas son solidarios entre si, que Mélechon pactará sus prioridades con el Partido Socialista o con el que esté en el poder.

En segundo lugar la situación que se plantea ¿Es que pasará el día después, cuando se vuelve más necesario la movilización y la resistencia??con un izquierda fragmentada???

Los aliancistas están hoy cometiendo un error histórico, el fragmentar a la izquierda anticapitalista es el mejor servicio que al capitalismo neoliberal se le puede hacer hoy en Francia?? Hoy el camino es a nuestro entender el de la fidelidad y unidad a los principios, esto convalidará la autoridad moral, cuando se convoque a la resistencia al pueblo en la calle, porque si alguien sueña con cambiar la realidad en las urnas, nos atreveríamos a decirle que no están dadas la condiciones y que la historia nos ha enseñado que romper en pedazos, dividir el frente de resistencia para buscar supuesta alianzas, ha sido la trampa más antigua que ha empleado el capitalismo y en que los de izquierda hemos caídos más veces y es la traición más terrible que los cuadros verdaderos de la izquierda pueden hacerse??lo que se debe tener presente, es que los cambios los produce el pueblo en la calle, o no se producen, el sistema no cederá un solo centímetro de sus privilegios (es decir de su renta basada en la explotación) ??y hacerle el juego al gaullismo ilustrado de Mélechon es en mi modesto entender conciente o inconcientemente una atrasar el reloj de la historia??

* http://www.vientosur.info/articulosweb/noticia/?x=5010

** http://alainet.org/active/53947

*** http://www.europe-solidaire.org/-Traducción de Faustino Eguberri-http://www.vientosur.info/

(Información recibida de la Red Mundial de Comunidades Eclesiales de Base)