Los bienes creados y recibidos son medios para vivir, no fines -- Benjamín Forcano

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Benjamin Forcano2Reflexión para este domingo (Luc 12,32- 42)
Una vez más, los cristianos , sin dejar de ser humanos, es decir, sin renunciar a su grandeza y entidad propia, abrimos el Evangelio para añadir y enriquecernos con la enseñanza de Jesús de Nazaret.
Hoy, el evangelista Lucas nos comenta y esclarece cuál debe ser nuestra actitud antes los bienes creados-recibidos y los producidos.

Prendido de la palabra de esús, nos dice: todos tenemos la necesidad elemental de comer y beber, de alimentarnos. ¡Todos! Pero una cosa es eso y otra tener el corazón apegado a la riqueza con ambición y angustia.

Vosotros, que me seguis, tenéis que buscar primero de todo que Dios reine en vuestras vidas . Lo advierto: esto es imposible en quienes se afanan por acaparar bienes y más bienes, que roban, malgastan o deperdician inútilmente.

Este afán corrompe, porque acaba apegando el corazón a la riqueza, como bien supremo y prescinde de Dios y no menos del cuidado de la vida de nuestros hermanos, los hombres.
Para estar en forma, es preciso entender que nuestra vida terrenal es para un tiempo, al que llegó el reinado de Dios, anunciado por Jesús de Nazaret, que lo vivió e hizo visible entre nosotros.

¡Tiempos estos! en los que no pocos piensan que el objetivo central de la vida está n poseer y disfrutar de la riqueza. Y no,, porque Lo bienes, todos, que hemos recibido vienen en última instancia de Dios, quien nos los ha regalado para que los poseamos con justicia y los repartamos fraternalmente entre todos.
Nuestra vida terrenal no es eterna, al final de ella lo que cuenta es si, ante nuestro encuentro definitivo con Dios, podemos testimoniar: Padre, de ti lo recibí todo y trabajé para que a todos ayudara y sirviera.

Por tano y resumiendo, ilusos o idiotas: Dios Padre en su hijo Jesús de Nazaret, nos dejó revelado el origen, el sentido y el destino de todos los bienes : los creados y los que producimos. Pretender que nuestro caminar y convivir en la tierra, podamos hacerlo con la negación absoluta del Dios verdadero, acaba malgastando esos bienes con perjuicio y esclavitud de cuantos injustamente fueron privados de ellos y con desespero y llanto de quienes se entregaron a tan estéril y lamentable desvarío.

Brindo como broche, algunas palabras y versos de Pedro Casaldáliga:
?Yo creo que el capitalismo es intrínsecamente malo, porque es el egoísmo socialmente institucionalizado, la idolatría del lucro por el lucro, el reconocimiento oficial de la explotación del hombre por el hombre, la esclavitud de los muchos al yugo y prosperidad de los pocos??.

?Somos, en última instancia,
el reino que nos es dado,
y que hacemos cada día
y hacia el que, anhelantes, vamos??.